Restaurante Bar Gutiérrez — Restaurant in Aranda de Duero

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Mira, si vas a Aranda y quieres comer como se come en España de verdad, tienes que pasar por Los Gutiérrez. Aquí no hay inventos raros ni platos de postureo: lo que hay es cocina española de la buena, esa que en Madrid ya casi hemos olvidado entre tanta hamburguesa, sushi y demás historias.

El pollo de corral guisado es de esos que te hacen mojar pan sin parar, con salsita de las que huelen a casa de pueblo. Los calamares están tiernos y sabrosos, nada de chicle ni fritanga, y las codornices saben a campo, hechas con mimo, como toca. Y ojo a las mollejas, que aquí las hacen de lujo: doraditas, jugosas y con ese punto que solo se consigue cuando se cocina con cariño y experiencia.

Y luego está la forma de atender: de frente, con la cabeza alta y mirando a los ojos. Como debe ser. Aquí no hay sonrisitas forzadas ni “todo bien, chicos” de manual. Hay seguridad, respeto y cercanía, que es lo que uno agradece cuando se sienta a la mesa.

En resumen: Los Gutiérrez es cocina española auténtica, sin disfraces y con la esencia de siempre. Si lo que quieres es comer como se come en casa, pero bien servido, este es el sitio.

⸻ Mira, si vas a Aranda y quieres comer como se come en España de verdad, tienes que pasar por Los Gutiérrez. Aquí no hay inventos raros ni platos de postureo: lo que hay es cocina española de la buena, esa que en Madrid ya casi hemos olvidado entre tanta hamburguesa, sushi y demás historias.

El pollo de corral guisado es de esos que te hacen mojar pan sin parar, con salsita de las que huelen a casa de pueblo. Los calamares están tiernos y sabrosos, nada de chicle ni fritanga, y las codornices saben a campo, hechas con mimo, como toca. Y ojo a las mollejas, que aquí las hacen de lujo: doraditas, jugosas y con ese punto que solo se consigue cuando se cocina con cariño y experiencia.

Y luego está la forma de atender: de frente, con la cabeza alta y mirando a los ojos. Como debe ser. Aquí no hay sonrisitas forzadas ni “todo bien, chicos” de manual. Hay seguridad, respeto y cercanía, que es lo que uno agradece cuando se sienta a la mesa.

En resumen: Los Gutiérrez es cocina española auténtica, sin disfraces y con la esencia de siempre. Si lo que quieres es comer como se come en casa, pero bien servido, este es...

Otro bar del montón, no te dejes engañar por las reseñas. Hoy Domingo he estado comiendo en este bar, me ha tocado esperar mesa porque no tenía reserva es entendible y estoy de acuerdo por ello pero al final me han sentado dentro de un comedor que en teoría estaba todo reservado aunque hemos sido los primeros en ocupar la mesa. Creo que hacen disticiones con los clientes pues en las mesas exteriores creo que están sirviendo menú del día mientras que en el comedor interior te dan la carta, carta sencilla a base platos_raciones. Es un bar muy influenciado por la comida vasca todo a base de pinchos y la gente está todo el tiempo hablando de tapas cuando no son tapas. Servicio normal en barra en el comedor cambia por la mujer que lo atiende y es efectiva 100%. Como nota aclaratoria me han cobrado dos servicios de pan que traducido a Cristiano era una canasta con cuatro trozos. En ningún momento había pedido el pan y tampoco figura el precio de este en la carta ,2€ con lo cual no sólo pagas tú pan sino 5 barras más que no te has comido. Recordar que no te pueden cobrar el pan si no tiene puesto el precio en la carta es ilegal, tampoco os recomiendo el bar, como os dije al principio otro más del montón de malos bares en los que he estado hoy en Aranda. Mucho rollo con la ruta del vino en la ribera del Duero pero del negocio de la hostelería poco saben para estar de cara al...

Penosa experiencia. Pedí un arroz con leche, que venía con un cristal, un trozo de vidrio con punta incluido de sorpresa dentro que se notaba que se les habría roto un vaso o algo así, lejos de pedir disculpas o tener la deferencia de no cobrarlo y como si no fuese la primera vez que les pasa me ofrecen cambiármelo por otro, y no, obviamente entiendo que todos los arroces con leche que hicieron en la misma olla deberían de tirarlos ya que lo más seguro es que hubiese más cristales y alguien se tragara alguno, pero no, allí estaban repartiendo más arroces a los clientes. Para lo que podía haber pasado si me lo trago poca empatía y saber comportarse del personal. Sinceramente debería haber llamado a sanidad a ver si a la próxima aprenden a gestionar estos incidentes con más...