Estimado equipo de Muerde la Pasta – El Faro, Badajoz:
Hoy no venimos a criticar, sino a rendir homenaje. Porque lo que vivimos en vuestro restaurante no fue una simple comida: fue una coreografía perfectamente ejecutada entre platos, camareros y humanidad. Si el local de Torre del Mar fue una película de terror gastronómico, lo vuestro ha sido una comedia romántica con final feliz y servicio de cinco estrellas.
Desde el primer momento, Susana nos recibió como si fuéramos parte de su familia. Nos ofreció ver los platos que quedaban antes de decidir si entrábamos, como si supiera que la confianza empieza por la transparencia. Y cuando mi hija se dio un golpe en la cabeza, apareció con hielo como si fuese una enfermera de guardia en urgencias. ¿Camarera? No. Ángel de la guarda con delantal.
Y luego está Ismael. Si existe un multiverso donde Flash trabaja en hostelería, sin duda ha encarnado a este hombre. Cada vez que un plato sucio tocaba la mesa, él ya lo había recogido antes de que el pensamiento siquiera se formara en nuestra mente. No sabemos si tiene poderes sobrenaturales o simplemente una pasión por la limpieza que debería ser estudiada por la NASA.
La comida, sin ser una oda a la alta cocina, cumplía su función: alimentar sin provocar traumas. Las mesas estaban limpias (¡milagro!), y los baños... bueno, siguen siendo ese bioclima característico de todos los Muerde la Pasta, donde la humedad y la fauna local podrían dar lugar a una nueva civilización. Pero al menos aquí parece que han domesticado a las criaturas.
En resumen, si Torre del Mar fue una experiencia para olvidar, El Faro ha sido una para recordar. Deberían enviar a Susana e Ismael como embajadores de la franquicia, o al menos como instructores de “Cómo atender a clientes sin provocarles ganas de huir”.
Gracias por demostrarnos que, incluso dentro de una cadena, hay oasis de profesionalidad y humanidad. Volveremos, no por el buffet, sino por ellos.
Atentamente, Unos comensales que han recuperado la fe en la hostelería. P.D.: Mi hija ya está bien. El hielo funcionó mejor que...
Read moreEl día 3 de Agosto del presente año, me personé con mi familia en el restaurante Muerde la pasta que está ubicado en el Centro Comercial el Faro, en la ciudad de Badajoz. Soy madre de dos niños, uno de seis años y otro de tres años, diagnosticado del Trastorno del Espectro Autista. Nunca antes había visitado este lugar, por lo que decidimos esperar la cola influidos también por mi hijo mayor que ya tenía bastante hambre puesto que eran las 15:00 horas. Para mi sorpresa y después de esperar la cola, llegamos al mostrador y la persona allí presente me pregunta si para cuatro personas, a lo que le explico que mi hijo pequeño es autista, y el solo come determinados alimentos que no alteren ni cambien su entorno ni interfieran en su normalidad(características de este trastorno)pues al niño le pueden dar crisis. No se queda muy convencida y llama a la encargada, le vuelvo a explicar lo mismo y me dice que o pago cuatro personas o no se me permite el aceso. Le intento explicar de nuevo la situación y sigue en su misma dinámica. Literalmente lo que ha hecho esta persona es echar fuera de un establecimiento a una persona con discapacidad sin contar la humillación que me ha hecho pasar y el dolor de que desprecien a mi propio hijo, no hay ningún derecho a esto y todo por no pagar un cubierto. Ruego que desde consumo tomen las medidas oportunas, al igual que yo me encargaré de tomar las mías para que por lo menos, en cualquier establecimiento haya personas con calidad humana y no máquinas de hacer dinero. Vergonzoso la situación que me han...
Read moreLa primera vez que visito esta franquicia, la verdad es que es el típico buffet libre, pero con muchas especialidades culinarias italianas, el trato del personal excelente, el cajero me preguntó si era la primera vez que iba, así que mandó a un camarero a explicarme dónde se encontraba cada cosa, voy ser sincero, de primero tomé algo de verdura, el tomate gratinado con queso y bacon me encantó, pero los guisantes con jamón y huevo cocido le faltó un poco más de cocción (estaban duros como perdigones de posta del 12), lo siguiente fue un combinado de pasta 🍝 (ravioli 4 quesos, exquisitos, ravioli de ternera con salsa simplemente correctos y los tortellini con salsa de pesto que no me maravilló) , y pizza 🍕 rica, probé 4 quesos y pepperoni y me gustaron, masa fina y crujiente.
Recomendación, deberían tener más caliente 🌡️ cierta comida, alguna estuviera un poco fría, igual estando más caliente disfrutarías más del plato.
Los postres correctos, aunque no los probé tenían buena pinta, me tomé un café con helado tipo shandy y riquísimo.
También cabe destacar las bebidas, ilimitadas (todo cañero) y me sorprendió la gran cantidad de variedad de bebidas que disponen (mucho más que en otros buffets) máquina de café (no es profesional, es tipo vending) para terminar la comida.
Conclusión, he visto reseñas varias en que se quejan de la comida, el servicio y demás, pero es un buffet libre, por 12,95€ entre semana, no seamos tan exquisitos y queramos platos al estilo ABaC...
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