El Lavaderu — Restaurant in Gijón

Celebramos una cena espicha de empresa hace 2 semanas y todo salió de la peor manera que podía salir. Para empezar, habíamos acordado por teléfono y Whatsapp con el dueño un menú espicha con un precio cerrado y un número de platos definido y que haríamos la espicha de pie en uno de los salones, todo perfecto. El día de la cena, ya cuando llegamos nos dimos cuenta que estaba todo preparado para hacer la espicha sentados y no de pie como habíamos hablado pero bueno no dijimos nada. Lo peor vino cuando al terminar el cuarto plato los camareros empezaron a retirar los cubiertos y aún quedaban por salir tres platos más según lo acordado con el dueño, pero por lo visto, nos ofrecieron un menú distinto y que no correspondía a lo que luego se comunicó a cocina que debía sacar. Se comentó lo que sucedía y tuvimos que terminar llamando al dueño por teléfono (porque no estaba allí presente) para que se dignaran a compensarnos con una copa o postre al que quisiera ya que habíamos acordado un precio por un menú en el que faltaban tres platos por salir y ya no iban a salir porque habían cerrado la cocina según nos dijeron. Solo se salva de la crítica el camarero que teníamos en sala que en todo momento fue comprensivo e intentó ayudar, tanto los camareros de barra como una señora que estaban allí fueron bastante maleducados y no querían aceptar la alternativa que pedíamos, que era ni más ni menos que nos compensaran de alguna manera el valor de esos tres platos que faltaban por salir. En definitiva, para no volver nunca jamás porque tampoco merece la pena la calidad de la comida y desde luego recomiendo no organizar jamás una comida o cena de grupo porque te encargas de organizar todo para 40-50 personas y te...

Lo primero, quiero dejar claro que no soy hatter ni pertenezco a la competencia, solo quiero exponer mi experiencia personal. El miércoles, 18 de septiembre, fuimos 2 personas a comer allí. No teníamos mucha hambre, así que pedimos una botella de sidra, una ración de croquetas, y otra de "zamburiñas", estas las entrecomillo por que estoy prácticamente segura de que eran volandeiras, no sólo por su tamaño sino por la calidad y el sabor. Sobra decir que son muchos los negocios que te dan gato por liebre cuando las pides. Nuestra sorpresa vino cuando vimos que en la ración sólo venían 8 unidades bastante pequeñas, cuando lo normal en todas partes es que te pongan un mínimo de 10 y hasta 12 con un tamaño adecuado, más aún si te las cobran a ese precio. Sin tocar el plato, avisamos al camarero para mostrar nuestra disconformidad y ni siquiera nos ofreció cambiar el plato, ya que no las habíamos probado y tampoco nos dio la opción de hablar con un responsable para solucionar la queja. Pero la sorpresa fue mayúscula cuando pedimos la cuenta y vimos que cobraron la sidra a 4,20€. No se lo que habrían cobrado por la de selección...además de no escanciarla a mano ya que comimos en la terraza, te traen el tapón dosificador para que tú lo hagas Evidentemente, no dejamos ni un céntimo de propina. Es una pena que estén orientando los negocios al turismo a costa de hacer el agosto. Lo que desde luego tenemos claro es que, después de haber ido muchas veces no volveremos y no será un sitio que recomendemos a nadie por que es UNA ESTAFA A...

No sabría ni por donde empezar...fuimos a hacer una cena espicha 45 personas y de entrada nos tenían el salón preparado para estar sentados cuando indicamos que era espicha de pie. El propietario del bar acordó un menú cerrado y nuestra sorpresa fue que de 8 platos nos trajeron 5 con raciones escasas: 2 croquetas por persona/2 trozos "con suerte" de cada tipo de embutido...siendo ese numero de personas deberían de haber calculado mejor las raciones a sacar...estamos hablando de un bar que lleva años de experiencia... La escusa que nos dieron es que en cocina les habían indicado únicamente lo que sacaron y no lo que se había acordado y no nos querían dar ninguna solución ya que eran las 12 de la noche cuando empezaron a recoger sin haber servido la mitad de la comida. Tuvimos que hablar con los camareros que, por cierto uno de ellos muy mal educado...menos mal que los otros compañeros fueron bastante educados...llegamos al acuerdo que nos ponían postres (que nunca llegaron) y una copa a quienes quisiéramos (porque evidentemente con cocina cerrada, más comida era imposible) Evidentemente esto no cubre el importe de la comida que nunca llegó. En resumen: NO RECOMIENDO IR AL LAVADERU A HACER COMIDAS ESPICHA NI COMIDAS GRANDES, QUE NO OS VEAN LA CARA!! Por mi parte, no era muy asidua del bar pero...