Fuimos por recomendación y nos gusto mucho. La atención fue rápida, había pocos clientes y estaban bien distribuidos por todo el restaurante.

Me sorprendió mucho la calidad de la comida.Para el precio que tenia, 12€/persona, estaba todo muy rico y en cantidad para no quedarte con hambre. Si no recuerdo mal, eran 4 primeros y 4 segundos para escoger, pan agua y café o postre. Sin duda lo que más me gustó fue que la piña que pedimos de postre era natural y estaba muy sabrosa. Las 2 camareras que nos atendieron, estuvieron atentas en todo momento.

En cuanto al tema de las alergias alimentarias, estan muy atentos/as y te explican bien todo.

Los baños estaba limpios, aun que faltaba papel para secarse las manos. El restaurante todo él es accesible y amplio. Para nuestro gusto hacia un poco de frío.

Como mejora para el restaurante, las camareras tienen que esperar un poquito más entre plato y plato, es decir, esperar a que todos los comensales hayan acabado de comer para llevarse lo platos. Como cliente te hace comer mas rápido. No es incómodo, pero de esta manera sería perfecto el servicio.

Está situado en el centro de Guadalajara, a escasos 50 metros hay aparcamiento gratuito o en zona de pago.

Recomiendo muchísimo este restaurante y estoy segura de que volveré