Adecuación y realización por el arquitecto Pablo Moreno Mansilla

Se trataba de la adecuación de las antiguas naves del Matadero Municipal y la construcción de espacios adyacentes que permitan la transformación del conjunto en un espacio museístico cuyo protagonista principal es el escultor cinético Francisco Sobrino. Se construyen dos edificios nuevos en la parte anterior y posterior de las naves históricas que sirven como apoyo a los verdaderos contenedores de la colección Sobrino pero además tienen el cometido funcional de ocultar la vista de las medianeras colindantes y provocar un atrio de acceso y un telón de fondo ocultando el desnivel existente con la calle posterior.