Restaurant El Mirall — Restaurant in Igualada

Hemos ido hoy a comer por primera vez. He de decir que la comida ha estado bastante buena en general a pesar de confundir el concepto coca de escalibada con un hojaldre de escalibada. Pero igualmente estaba muy bueno. Pero no puedo decir igual del servicio. La mitad del local tenía manteles blancos en la mesa. Mi mesa estaba en la mitad que no tenia. Mi mesa estaba en la mitad del local que los postres son enumerados verbalmente. La otra mitad les mostraban el carrito de los postres. En mi mitad de local teníamos que pedir los cubiertos para los segundos. En la otra mitad parece ser que no. Y por último parece ser que dirección no consideraba preguntar cómo había ido la comida a mi mesa quizá porque no tenia más de 80 años. En cambio con 59 considero que mi presencia y mi dinero es igual de digno que los demás. A pesar de todo lo buena que pudiera estar la comida que nos han servido no ha estado bien el trato discriminatorio que para algunos comensales se da en el...

es un auténtico oasis gastronómico que deleita los sentidos en cada visita. Desde el momento en que entras, te envuelve una atmósfera acogedora y elegante, perfecta para una velada memorable.

El servicio es excepcional, con un personal atento y amable que siempre está dispuesto a hacer que tu experiencia sea inolvidable. La carta de menú es una sinfonía de sabores, con platos que fusionan la cocina tradicional con toques modernos, ofreciendo una explosión de deliciosos aromas y colores en cada plato.

Los ingredientes frescos y de alta calidad son el sello distintivo de 'Sabor Celestial'. Cada bocado es una obra maestra culinaria que despierta los sentidos y deja una impresión duradera en el paladar.

No importa si buscas una cena romántica o una comida con amigos y familiares, 'Sabor Celestial' es el lugar perfecto. Una experiencia gastronómica que te transporta a un mundo de sabores exquisitos y atención inigualable. Sin duda, un tesoro culinario que merece ser explorado...

Es un local pequeño, que estaba lleno así que había bastante ruido. La comida estaba buenísima y los postres son de otro planeta. Mi queja respecto al servicio es muy concreta. Dos de los comensales pedimos galtas de segundo. Nos sentábamos en lados opuestos de la mesa. Nos traen una sola olla con los trozos para dos personas. Nos tenemos que pasar de una parte de la mesa a la otra la olla con cuidado de no darle un golpe a nadie y no tirar una copa. Pero eso no es lo peor. Venían tres trozos de galta para dos personas. El problema no es la cantidad porque de por si hemos tenido un primero con el que nos hemos llenado bastante, el problema es como dividirlo. Si dos personas están justo al lado uno de otro todavía, uno de los trozos lo partes en dos, pero si estás lejos... O me pones dos trozos o cuatro. Por otro lado, no hay carta, solo menú. El menú es bastante amplio, pero aun así se hecho en...