Trattoria Dove Andiamo? — Restaurant in Móstoles

En respuesta a la contestación. En primer lugar, considero que deberían tomarse mejor las reseñas constructivas como la que he hecho. Hay cosas que están bien y otras que no y hay que aceptarlo y mejorar a partir de ahí.

En segundo lugar, me extraña que después de más de un mes de la visita os acordéis de si dijimos o dejamos de decir, además, siendo la primera vez que íbamos. Si estáis intentando dejar en entredicho la reseña de cara a un futuro lector, se ve bien la transparencia. No es la única reseña que destaca la falta de sabor. En vez de intentar cubrirse de mala manera, evalúen la situación e intenten una mejora.

Por otro lado, creo que ninguno de nosotros dijéramos que estaba todo bien cuando la gran mayoría de la mesa no se terminó el plato (no precisamente por estar llenos) y, entre otras cosas, sin haber terminado, se nos trajo la cuenta sin preguntar nada. Entiendo que ibais a cerrar, seguramente, pero teniendo en cuenta que solo había un entrante (porque el otro no lo hicisteis), principal por persona y postres, pues los tiempos no están bien medidos.

————- La atención ha sido muy correcta. Muy amables en todo momento. Si es cierto, que de entrante pedimos, a parte de la provoletta, una pizza que no la sacaron y ya nos trajeron los principales por lo que la tuvimos que cancelar. La provoletta estaba rica de sabor pero le faltaba fusión en el queso y tenía mucho aceite. Eso sí, el pan estaba muy rico.

En cuanto a la pasta, toda la mesa coincidimos en que faltaba sabor. Yo que no soy de tomar sal, le agregué sal y pimienta.

Mi plato: la pasta con gambón y espárragos. Tengo que decir que el producto parecía ser bueno pero creo que falta darle una vuelta en cocina porque falta sabor. Tiene muy buena pinta pero al comer no te queda la misma sensación. El punto de la pasta tampoco estaba al dente.

El postre estaba bastante rico.

Aún así, el sitio es acogedor y el precio...

Me resultan incomprensibles las reseñas que hacen de este sitio, a no ser que nosotros hayamos tenido muy mala suerte y les hayamos pillado en un día malo. Pedimos un risotto de tinta de calamar incomible, salado, artificial, de lo peor que he visto en mi vida. Lo dejamos entero. Una ensalada de gorgonzola sin gorgonzola, con un queso que ni se le parecía. Una lasaña infame, de las congeladas de peor calidad. Apenas si pudimos probarla. Y, para rematar, una tarta de queso que debería ser perseguida por la fiscalía. No podemos decir que comimos mal, porque no comimos. Horrible. El personal, eso sí, es amable. Añado unas líneas para aclarar que el dueño miente como un bellaco, que es lo que hace quien dice media verdad: mentir dos veces. Afirma que nos comimos la mitad del arroz y que el resto nos lo llevamos, pero omite que, ante la imposibilidad de pedir una única ración de risotto -a mi acompañante no le apetecía - pedimos dos con la intención de llevarnos una. Ingenuo de mí, hasta me dije que, si estaba rico, podría comerme las dos raciones. Y nos llevamos esa segunda ración, es cierto, hasta el contenedor más cercano. Y también es mentira que consumiera la mitad. Y no comenta nada de la tarta de queso que quedó intacta. Y dice que pagamos a reñadientes. ¿Qué significa eso, que no dejamos propina? Le aseguro que en el bar al que tuvimos que ir a comer unas tapas, sí que la dejamos.En resumen, me temo que su cocina, como todo en la vida, es reflejo de su moralidad y en su respuesta no queda bien...

Para comenzar el sitio está bien, el establecimiento se encuentra amoblado y con detalles inspirados en Italia. En cuanto a la atención muy buena, han sido atentos, pero... Fuimos los primeros en sernos, pedir y no sé como se lo arreglaban para servir a nuestro alrededor antes (pidiendo lo mismo). Comida minimalista por no decir mini o porciones de degustación, vamos que hasta pude contar los ñoquis de mi plato, y sí me quedé con hambre. Entrada queso fundido... Los he comido mejores. Postre! El momento que esperaba y fue una desilusión, por Dios! Postre para compartir, pero si era mini! Un coulant ("volcán de chocolate"porque en teoría tu cortas con la cuchara y sale desde dentro el chocolate caliente), pues nada no se desarmó, tieso, templado picando a frío Ahhh acompañado de helado de vainilla que pedí noooo me pusieron helado nata. Malísimo! Malo y pequeño. Como que lo comimos una cuchara para él y otra para mí, un fiasco. Pedimos otro postre tiramisú, presentación original en un frasco muy majo. Tamaño sí era para compartir, ahora bien, el frasco estaba frío el contenido no. Cualquiera sabe que un tiramisú que no esté frío no mola. Sabor suave para mi gusto no vi café en el mismo. En fin, me quedo que el sitio es agradable para verlo, pero para comer...platos muy grandes para lo que ponen de comida. Simplemente me quedé con hambre y me fui con sensación de que le falta trabajo. Mucha presentación poco...