Los Ventanales están situados en un lugar privilegiado, la céntrica calle Jaime I acoge este clásico establecimiento de la restauración murciana, en el mismo se pueden degustar platos de una amplia variedad, desde tapas típicas, montaditos a las ya tradicionales sartenes y roscas ( productos estrella). Esta oferta diversa lo convierte en un restaurante adecuado tanto para almorzar, comer o cerrar el día con una agradable cena. El ambiente del local es idóneo para albergar desde comidas familiares, grupos de amigos a reuniones más formales de empresa o negocios. De todo ello se encarga y ocupa un grupo de profesionales competentes y muy capacitados en sus tareas de servicio y cocina, bien dirigidos por la experiencia y saber hacer del gerente, un veterano y reconocido hostelero de Murcia. En resumen, mi experiencia ha sido muy positiva y recomendaría la visita a este establecimiento sin dudarlo, volverán a...
Read moreEsta vez mi valoración no va a ser buena… frecuento regularmente este lugar.. solía ir a Los Ventanales que estaban cerca de Alter Ego, cuando cerraron ese establecimiento venía a este… en el otro local había un ambiente acogedor, cercano y muy simpático por parte de los camareros, este es un ambiente algo frío y “estirado”… suelo pedir una sartén en específico que ya no se encuentra en carta, pero la camarera siempre me ha dicho que al tener los ingredientes y los mismos cocineros podía pedirla y me la harían sin problema … a veces me la hacen y otras veces no, si hay follón evidentemente entendería que no me la hagan… pero estando vacío como ha estado varias veces, pues depende de las ganas que tenga ese día el personal de cocina… suelo ir por ese plato en particular , ya que , para tomar unos caballitos, marineras, croquetas, roscas o calamares .. me vale cualquier...
Read moreLlevaba más de un año sin visitar este bar y, efectivamente, algo ha cambiado.
Antes se curraban muchísimo la cantidad y la calidad de los platos. Servían rápido y eficazmente. Estuvimos hace un par de meses y tardaron una hora exacta en servirnos, estando con el local a medio gas (nada que ver con la espera que tenías que hacer antes para poder coger una mesa). Nos puso las tapas calientes antes que las marineras. La rosca de salmón, uno de los platos más visuales del local, solo llevaba guacamole. El pisto sigue estando buenísimo.
Hay dos tipos de menú del día y también carta. Los fines de semana reservan las mesas, aconsejo hacer esto teniendo en cuenta que es un sitio muy transitado y se llena a medio día. Tiene unas cuantas mesas en la calle, otras de barra y dos comedores.
La calidad de la comida no es mala y los precios no son...
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