Why only 3 stars? Well, the food is good (but unimaginative), the restaurant itself (if you don't look up) is nice, but the food preparation and presentation is only adequate. For the pretensions and the price, one should expect more; however, it shows that its a family-owned place which can trade on its history and position and (they think) doesn't need to try. Shame, because it ought to be special. We visited for dinner, which was a mistake; the huge windows must make the view by day wonderful. Ay night they act as mirrors, reflecting the cavernous interior - and almost empty on Friday night (of course the pandemic didn't help). Look up to the high roof and you realise that it's built like a warehouse. I'm sure that when it's very busy and in daylight it's good; but if you see the vast car park empty, turn around and go down to the city where there are...
Read moreNO TIENEN LECHE SIN LACTOSA
Años comiendo en Lobato, soy de Oviedo de toda la vida. La atención y el servicio son siempre excepcionales. El dueño (padre) más majo no puede ser. La comida siempre es de calidad, buena presentación, las esperas son más que aceptables, etc.. Era un sitio al que poner cinco estrellas siempre. Pero hay dos cosas que le han descendido al grupo de las 4 estrellas para mi. La primera es que la carne poco hecha cuando la pides, no puede estar al punto y mucho menos llegar la carne casi fría y la guarnición caliente. Y lo que me ha animado a escribir esta reseña es sin duda que no tienen leche sin lactosa, pensé que era una pequeña broma del camarero pero no, los que padecemos este tipo de intolerancia, a la lactosa, nos quedamos sin café, en Lobato, se lo dices a cualquiera y no lo cree. Cinco tipos de azúcar, tres de sal, extensa y buena carta de vinos y no tienen leche sin lactosa. Tendré que hacer como algún conocido que pregunta en los sitios si la tienen antes de reservar y si me dicen que no, no ir. Podrá parecer un detalle menor, pero yo no creo que vuelva si no me confirman que empiezan a tener leche...
Read moreGran restaurante referente en Oviedo al que hacía años quería ir pero dado su éxito y calidad (y mi poca antelación) siempre lo encontraba completo, hasta que hace unos días por fin acudimos.
El ambiente es muy acogedor, con unos cuadros preciosos y su personal no pudo ser más atento en todo momento, cambiando incluso las copas para el champagne si ya no estaban lo suficientemente frías, un gran detalle.
Probamos como entrante para una mesa de cuatro, las croquetas que estaban muy buenas y las delicias de puerros y langostinos, obligatorio pedirlas.
Como principales, solomillo al foie con setas, de los más buenos que he probado, siendo además una ración muy abundante.
El entrecote con patatas, punto perfecto; la lubina al roquefort, sin eres amante del queso, es la salsa perfecta y el medallón de pixin negro con salsa de oricios, que pidió otro comensal y que será mi próximo plato porque estaba espectacular.
Acompañado de una botella de bollinguer y su delicioso postre de esponjoso caliente chocolate junto con el helado de vainilla de tahití, el mejor que he probado en mi vida.
Una auténtica experiencia para todos los...
Read more