Restaurante La Perola de Soto — Restaurant in Soto del Real

Sobre el Restaurante La Perola, hoy he de actualizar la Reseña de ayer. Nuestro compañero ha contactado con el Restaurante y han sido detalladas, mediante mail, las bebidas servidas, enviado Bizum por la cantidad extra facturada y atendido al criterio de clientes habituales del restaurante. Efectivamente, las bebidas se sirvieron en mesa, lo que no se determinó fue cuáles eran de menú y cuáles no.

Las dos partes hemos tomado lección para visitas próximas y les agradecemos que nos hayan escuchado y atendido Muchas gracias.

Hoy, como otros muchos días, mi grupo de senderistas de la Universidad Autónoma hemos comido en La Perola. Aunque no es la primera vez que cobran un tanto alzado por la bebidas fuera del menú, incluso las del menú -vino, casera y agua- hoy hemos tomado la diligencia previa de pasar por la barra y pagar nuestras consumiciones en ese mismo momento. Algunas personas han consumido esa cerveza en mesa como bebida que se oferta incluida en el precio del Menú. Nuestra sorpresa ha sido que a la hora de pagar ha vuelto a ocurrir lo mismo que en veces anteriores y nos han cobrado 33 euros en concepto de “bebidas extras”, sin determinar cuáles ni cuántas, la cifra incluía ése único concepto. La camarera sólo quería terminar cuanto antes de cobrarnos uno por uno a cada comensal. Menú con postre, menú con postre y café y en todos los casos esa cantidad prorrateada entre todos, incluso entre los que no habían bebido e incluso, entre los que habiendo bebido, habían pagado en la barra. Aunque nos hemos indignado porque ya todos peinamos canas y nos ha parecido un robo flagrante, hemos pagado religiosamente para, entre otras cosas, no apurar más de lo que estaba a nuestro compañero que se tomó la molestia de reservar. Hoy hemos sido 19 personas y nos preguntamos cuándo van los negocios de restauración a dejar de hacer estas cosas que tan mala impresión causan a los clientes y que nos hace pensar que nos están tomando el pelo a nuestra edad.

Yo recomiendo a La Perola que estos gestos los aparte de su trato si no quiere que les llamen ladrones, al menos tengan la buena práctica, obligatoria por otra parte, de poner en la factura lo que nos están cobrando, de más o no.

Les deseo suerte y a los clientes les recomiendo mirar la cuenta de una forma más exigente de lo que nosotros lo hemos hecho hoy...

Habíamos estado un par de veces y nos había gustado, así que decidimos celebrar allí el día de la madre. Reservamos para 7 personas, primero llegó una parte de la familia, nos tuvieron que esperar 20 min, ya que tuvimos una urgencia veterinaria. Durante esos 20 min nadie se acerco ni a ofrecerles algo de beber. El resto, como digo, tuvimos que ir al veterinario con nuestro yaco, es una especie de loro de 400gr. Como llegábamos tarde, y somos de Madrid, tuvimos que ir con el yaco. Va en un transporting pequeño, ocupa lo que un bolso grande. Cuando llegamos allí, no nos dejaron pasar con ella, ni en la terraza. Con el calor que hacía no podíamos dejarla en el coche, así que le dijimos que por favor, que si no nos íbamos a tener que ir y eran las 4 de la tarde, íbamos con la abuela de 90 años y una niña de 1 año. Nos dijo literal: 'pues os tendréis que ir'. Así hicimos. Tenemos que darles las gracias, ya que debido a esta contestación encontramos el restaurante 'La Estación' (Diseminado Cr Miraflores K 39 5, 2, 28791 Soto del Real, Madrid). Primero llamamos para asegurarnos no tener ningún problema con el tema del yaco, nos dijeron que sin problema, eran las 16.30 de la tarde, estaban hasta arriba (sábado, puente y fin de semana del día de la madre) y aún así nos hicieron un hueco. Nos trataron de maravilla, comimos espectacular, la merluza estaba buenísima. Repetiremos sin dudarlo. Muchas veces los pequeños detalles son los que marcan la diferencia, y éste detalle sin duda para nosotros ha hecho que no volvamos a ir a este restaurante y hayamos descubierto La Estación. Entendemos que no a todo el mundo le gusten los animales, pero como digo, era un yaco (400gr) en un transporting, completamente cerrado, que debajo de una silla, en la terraza, ni te das cuenta...

Amplio restaurante de comida tradicional con 4 primeros (fabada, ensaladilla, judías verdes con jamón y otro que no recuerdo) y 4 segundos (entrecot, pierna de cordero, y dos pescados). Las raciones del menú son, para mi gusto, escasas. Ni la pata de cordero, que pedimos con cierto temor por su posible tamaño, cumplió las expectativas, era mini. Soy de buen comer por otro lado, pero el sentir general fue ese. Los segundos van acompañados de patatas panaderas. El Menú infantil es una suerte de plato combinado que incluye una paletada de macarrones, otra de patatas fritas y un escalope. Como siempre, muy poco cuidado y escaso, al menos no incluye pizza, perrito, nuggets o hamburguesa… Las raciones fuera de menú tampoco son memorables por su cantidad. Los postres son natillas, arroz con leche, flan (todos ellos caseros) son los que merecen la pena tambien hay frutas del tiempo y helados de cono. La tarta de chocolate es un mazacote de grasa y bizcocho barato, totalmente industrial, que pone fin a una comida algo decepcionante a mi gusto. El local consta de varias zonas con mesas tanto en el exterior como en el interior. Nada mas entrar hay una terraza bastante agradable; en el interior a pie de calle hay un patio bastante bullicioso. En el piso superior, un amplio y cómodo salón. La verdad es que desconozco el secreto del éxito de este restaurante, salvo que sea por el personal que lo atiende, amables, atentos y profesionales. Las veces que he ido siempre está lleno, de la propia gente del pueblo principalmente y tambien de...