Lua Chea — Restaurant in Vigo

Edito esta reseña pues no puedo responder a la repuesta del local. A parte de ser un supuesto estafador, es usted un inculto, no estoy haciendo ningún comentario de odio contra el colectivo, si no que estoy remarcando la mala educación de sus camareros, al igual que usted ahora,con la respuesta a mi reseña. Si su capacidad lectora fuese de nivel de primero de la eso entendería que llegamos cuando el local estaba vacío, por lo de que no me crea tan importante, de hecho, la importancia se la está dando usted no mostrando ni la más mínima humildad.Si usted entiende las reseñas como un ataque es lógico el paupérrimo trato que se brinda y la soberbia con la que responde. Si usted es consciente de algún delito le recomiendo que lo denuncie no se vaya a convertir en encubridor de ese crimen. Muchas gracias y un saludo! No tengo ningún problema con "elles" pero todos los camareros ( o por lo menos cuando yo he estado) son LGTBQ+. Esto no querría decir nada, ni me importa, mientras desarrollen su trabajo con profesionalidad. Llegamos bastante temprano y no había nadie en la terraza. Pedimos una ración de pulpo, cachopo 4 quesos y solomillo al oporto .El problema empieza cuando nos traen la "ración" de pulpo( 22€ en un plato enano con un cachelo en medio. Aporto foto) me quedo mirando para el plato con cara de sorpresa. Parece ser que a la camarera no debió gustarle pues a partir de ahí todo fueron cuchicheos,risitas y miraditas hacia nosotros ,aderezado con una sonrisas de sorna que solo he visto en divas sin educación . Al coger uno de los trozos de pan, mi pareja se da cuenta de que tiene una mata de pelusa y procede a avisar de ese tipo de pan ya que ponen varios ,otro camarero, amagando amabilidad le dice que lo comentará con su jefe, cuando vuelve nos dice que es un cereal y que lo hacen así . Con el consecuente cuchicheo entre ellos, miradas,risitas y demás. Llegan los platos principales y más de lo mismo. El solomillo enano pero buena carne, la salsa de Oporto era un engrudo o pegamento con olor a Oporto. El cachopo bien ,tanto de tamaño como de sabor. Mientras tanto iba llegando más gente y nuestro servicio desapareció. Imposible pedir una bebida o pedir la cuenta. A nadie le importa con quién se meta otro en la cama pero eso no te da patente de corso para hacer un show de Drac Queens cada vez que no te guste alguien y más cuando te tratan con un respeto que con esas formas pierden. Sin tener en cuenta el emplazamiento,para intentar ser un buen sitio le queda mucho.Un saqueo de moral y de dinero que no merece la...

El lunes fui a comer con mi pareja. Teníamos reserva para las 14 hecha en el propio día y cuando llegamos nos dejaron escoger mesa. Al principio éramos sólo 3 mesas así que el trato fue muy cercano y rápido. Nos pedimos unos calamares, un cachopo y para beber una cocacola y una caña. Primero nos trajeron una cesta de pan que no pedimos y tuvimos que devolver, pese a que nos habían preguntado si queríamos y dijimos que no, pero sin más problema. Tardaron muy poco en servirnos y las raciones están genial en relación calidad/precio. El problema empezó cuando mi pareja quiso pedir otra caña porque el camarero se agobió cambiando el barril y nunca más se la llegaron a servir. Sobre las 14.20 ya habíamos acabado de comer e intentábamos hacer contacto visual con algún camarero para pedir el medio cachopo que nos sobraba para llevar y unos postres pero estaban tan sobrepasados que era imposible, así que me puse de pie en la barra esperando a que alguien me cobrara al menos para poder irnos. Tras diez minutos allí plantada conseguí que un camarero se parara un segundo y me dijo que esperara sentada que ya iba su compañero por nuestra mesa a preguntarnos por cafés y postre mientras él ponía la comida para llevar. Estuvimos otros 15 minutos sentados en la mesa sin nadie que nos atendiera y ya cuando nos dieron las 15 nos volvimos a poner los dos de pie a ver si alguien se dignaba a cobrarnos. Sin haber consumido al final nada más.

Pese a cómo pueda sonar esto la culpa no es en absoluto de los camareros, ellos estaban haciendo un muy buen trabajo para todo lo que se llenó el local en ese tiempo. El equipo es bueno y la comida también... ¿El problema? Están todos sobrepasados y el ambiente generado es horrible e insostenible.

Contraten personal por favor porque bastante deben tener ya con los clientes repugnantes como para recibir 80 órdenes por el pinganillo. O sino no acepten tantas reservas, porque al final también es perder dinero, que seguro que no soy la primera ni la última que se queda con ganas de postre.

Tal y como fue mi experiencia sin...

Deben de haber cambiado de dueños porque el despropósito vivido hoy no se corresponde con ninguna de mis visitas anteriores en los últimos años. Llegamos temprano y pedimos algo para beber. Cuando ya habíamos casi terminado (unos veinte minutos más tarde) la camarera, una jovencita a todas luces muy inexperta, vino a ofrecernos algo de picar para acompañar la bebida. Para comer, pedimos tapas variadas y una ternera asada. Trajeron unas raciones más bien escasas (en comparación con visitas anteriores) y una milanesa. Pedimos que subsanasen el error en la carne pero media hora más tarde ya habíamos terminado las tapas y la persona que había pedido la carne aun estaba esperando para comer. Cuando por fin llegó, la ternera no estaba asada, sino cocida, con una salsa por encima para disimular, y por supuesto una cantidad ridícula, todo hueso y casi nada de carne.. También pedimos vino y se olvidaron de traerlo, aunque no de incluirlo en la cuenta... A estas alturas veíamos al servicio tan superado, aunque el local no estaba tan lleno como antaño, que desistimos de pedir nada más. Pagamos la cuenta y nos fuimos a otro local ya que estábamos hambrientos y sedientos. Un desatino. Y una pena porque este restaurante...