TAPERÍA O CANARIO — Restaurant in Vigo

We went at dinner time to share tapas after our graduation.

I had the best chipirones (it's like a little squid) I've had in my life there. The croquetas were fried to perfection; not one extra drop of oil, perfectly crispy, very distinct flavors across options (we had Jamon Iberico and Tetilla and both were fantastic). The zorza was better than every place I've visited in Galicia. French fries were perfectly crispy and the pimientos de Padron were cooked and salted to perfection. The dessert was also fantastic. I had a Nocilla cheesecake. It was beautifully presented with whipped cream, crushed nuts, and a few fresh fruits and it was delicious. I was full and very satisfied. All this (plus drinks, coffee, and licor shots) only cost us 17 euros a person, which was kind of a surprise (low) for how good the food was.

I'm writing this the morning after because the food was so good it...

La verdad que muy mal, trato Nefasto y muy desagradable por parte de la sra.que nos atendió. Mi hijo llamó para reservar una cena familiar para el día de la madre, somos 8 personas. Mi hija menor es vegana des de hace 5 años, antes de reservar mi hijo lo dejó bien claro que entre los integrantes de la familia había una vegana, que por encima es la pequeña de la familia. Nos dió para las 22:00 del domingo y nos dijo que no había ningún problema cuanto a comida de la hija. Entonces llegamos a las 22:00 en punto después de tenernos casi 20 minutos esperando, nos viene atender una Sra. Y hablando en ton algo déspota anotó las consumiciones nosotros pedimos 2 botellas de vino y algunos refrescos. Después de otros 20 minutos regresa y ahora sí que viene como un toro la Sra. Sacudiendo las manos y diciendo que ya no había Pimientos de padrón, que solo quedaba revuelto de setas, y que si quisiéramos ensalada tendríamos que comer luchuga tomate y cebolla, que el plato era así y punto. Ya apresurandose a darnos los precios de los pescados si titubear, rodaballo de ración 75€, "nunca lo olvidaré." Entonces viendo que mis hijos no tomaban partido yo me puse a defender a mi pequeña. Si si sra. Todo muy bien, el precio no es problema, me gustaría resolver el menú de la niña antes de todo, y me dice con cara de hasco si mi hija lo quisiera que le preparaba un revuelto de setas y unas patatas fritas, entonces le digo pero la guarnición del pescado no la puedes preparar aparte, así pediríamos unos cuantos pescados y las verduras para la hija, entonces se da la vuelta la sra Y dice : el plato és: rodaballo y se lo preparamos así: pescado a la plancla y verduras al rededor. Por lo tanto no se puede ni poner ni quitar, nada, si queréis podéis dar las verduras del pescado a la chica. Yo, perdona sra. La niña es vegana a la carne ni olerlo, y me dice pues nada setas con patatas fritas y punto. Mi hija se puso a llorar delante de todos.entonces como la cena era a mi honor decidí levantar de la mesa y opte por invitar a mis hijos y demás familiares a salir de la mesa pagamos las consumiciones y nos fuimos sin cenar

Muy desagradable la situación situación. Nos céntimos mal tratados, y discriminados. Menos mal que íbamos duchados bien...

En nuestro caso ha sido una experiencia pésima. Habíamos hecho una reserva para un grupo de amigos a las 20:30 horas, y como suele pasar en grupos de varias personas no llegamos todos a la vez, pues resulta que cuando pasaron 15 minutos (los que estábamos allí ya habíamos empezado a pedir bebidas) nos dice la camarera que no podía ser que la gente no esté a la hora como echándonos la bronca, que nos íbamos a “solapar” con otras mesas que habían reservado, lo cuál me sorprendió bastante y me pregunto si en caso de habernos quedado nos hubieran invitado a irnos cuando ellos consideraran que ya había sido tiempo suficiente. En ese momento decidimos comentarles que se habían apuntado tres personas de última hora y nos dice la camarera que imposible, que la mesa estaba armada para los que éramos y que no era posible que venga más gente (que por cierto no había ni que añadir mesa, con las que éramos llenando las esquinas y un sitio libre que había apañábamos). He de decir que las camareras no destacaron especialmente por su simpatía. Me parece que determinadas actitudes se las podrían permitir de alguna forma en un restaurante exclusivo de esos que tardas meses en conseguir mesa, pero vamos, aquí lo dejo. En resumen, muy mala experiencia, ya no sólo la atención, sino las formas y los aires, creo que deberían mejorar el trato al cliente, en nuestro caso creo que era una situación fácilmente corregible sin complicar la vida del personal del lugar ni del resto de comensales.

Pero bueno, gracias a esto pudimos ir a otro lugar llamado “Lagareta”, en el cual nos acogieron siendo un grupo numeroso a última hora, poniéndonos en todo momento facilidades, una atención excelente por parte del jefe y los camareros y unas vistas y...