Terrassa Sant Josep — Restaurant in Xàtiva

Un quiero y no puedo que salva su ubicación y aspecto. Recomendado exclusivamente para un refresco tras la visita del castillo. No recomendado para comer. Fuimos 3 amigos a comer después de una visita turística en la zona. Nos atrajo su enclave. La primera sorpresa que nos encontramos es que nos ponen en una mesa para 6 personas en vez de una para 4 y además ubicada en el pasillo entre la entrada a los baños y la entrada a cocina. Con el añadido que 2 de los comensales tienen el sofá a la altura de la mesa prácticamente comiendo de forma incomoda. Nos quejamos y la respuesta fue "EL SILENCIO". Pedimos varios entrantes, y lo único que estaba bueno era el foia. El tomate con ventresca era literal, un tomate trinchado y una ventresca tirada por encima con el mismo aceite de girasol de la lata y con apenas alguna escamita de sal q descubrimos por casualidad. Los huevos revueltos con papatas SIN PELAR les faltaba sabor por todas partes. Plato principal pedimos 2 arroce de alcachofas con ajetes y magret de pato y una hamburguesa black angus. El pan de la hambuirguesa era de barra de la panderia, servido en un trozo de pizarra de los años 90 con 2 mini boles de salsa ketchup y mayonesa y las mismas patatas del entrante CON LA PIEL. El arroz venía con 4 trocitos de magret de pato MINUSCULOS y alcachofas a mansalva. Así que como era de esperar el arroz sólo sabia a alcachofa. Una pena por que prometía. Postres pedimos 3, ta tarda de chocolate NO SE PODIA COMER ESTABA MALA y te clavan 6,50€, lo único bueno era la torrija y sabia mas a crema catalana que a torrija y 2 bolas de helado congeladas a -100 grados. El tercero ni quise probarlo del aspecto que tenía. Resumiendo: clavada de 100€ por alguien jugando a las cocinitas que no da la talla en un sitio que podría ofrecer y ser algo bastante bueno por su enclave... así que si vas por la zona te recomiendo que vayas solo a tomarte una coca cola con una bolsa de patatas fritas, disfrutes del sol y te marches. Además te han cobrado una buena cifra por las bebidas así que te puedes ir tranquilo por que...

Fui de invitada de una boda, la comida estaba buenísima las cosas como son, pero a la hora de servir los calderos (primero la paella de los niños) en vez de sacarlo y servir el camarero como habíamos pedido, su respuesta fue que ellos no pueden servir porque tienen mucho trabajo, cosa que en todo restaurante se hace, sirve el camarer@ y más contratando el servicio para una boda... Cuando sacaron los demás calderos de arroz, fideua, etc... más de lo mismo. Los dejaron donde les pareció de la mesa y tenía que levantarse la gente desde la otra punta para poder servirse y no tener el caldero de arriba a abajo, porque además de que el caldero quema no se podía porque iban sacando los otros y no quedaba espacio para ir moviendo... A última hora con la forma de actuar de los camareros era como que te estaban dando indirectas para que se fuera todo el mundo, apagaron las estufas de gas de la terraza donde estábamos sabiendo que hacía frío desde el medio día y que habían niños de 4 años diciendo que tenían frío... Luego retirando copas cuando la gente aún estaba bebiendo, salían a fumar o iban al baño y al volver no estaban las copas. Cerraron la puerta de la zona de fumadores y uno de los camareros se puso con una bolsa de basura enrollada en la cintura delante de esa misma puerta para seguir con la indirecta de que todo el mundo se vaya ya... Si no saben llevarlo, que no tengan la opción de contratar servicio de boda, porque ni claro tenían la aproximación por persona de los calderos, que los recién casados días antes de la boda tenían que hablarle a sus invitados para cambiarles el primer plato, un día les decían si tal caldero para "X" personas y al otro que no podía ser, al día siguiente que si puede ser y todo un lío. En fin... un sitio para comer bien pero no es adecuado para...

Wow! We were lucky, made the reservation before visiting the castle, and what a treat after the climb. Service was good, not to quick as they were very busy but after the visit it was good to sit and rest. The food was excellent and our waiter Carlos super freindly and helpful. Carpaccio of tuna and avocado, the entrecot, partridge in escabeche, and scrambled eggs with Ham and potatoes. I couldn't say which was our favorite. But the desert to die for! "Torrijas" with leche merengada and honey. A definite definitely highly...