La Tecla Restobar — Restaurant in Ñuñoa

Tras disfrutar de una obra en el teatro UC, decidimos cenar en el cercano Restaurante La Tecla. Pese a la terraza completa, nos ubicamos en el interior. Formábamos un grupo de nueve y pedimos cuatro cuentas separadas, para lo cual nos asignaron números asociados a cada cuenta.

Los refrescos llegaron sin demora, pero los primeros platos, asignados a uno de los números, se demoraron unos 20 minutos. Quienes los recibieron esperaron al resto antes de empezar a comer. Sin embargo, ante la tardanza del resto de los platos y para evitar que se enfriaran, comenzaron a comer. El segundo grupo de platos, correspondiente a otro número, llegó después de otros 20 minutos, y los primeros comensales aún tenían comida en sus platos, debido a que habían comido lentamente.

La continuada ausencia de los siguientes pedidos me llevó a hacer señas a la camarera, quien se retiró sin ofrecer respuesta. Una amiga se levantó a indagar después de 10 minutos adicionales, y sólo entonces se nos informó del problema con el horno. Tuvimos que esperar 15 minutos más antes de que llegara un camarero con más platos, pero aún faltaba el pedido de mi familia. Después de más tiempo y cuando todos los demás habían terminado, consideramos cancelar nuestro pedido dado que nuestros amigos necesitaban irse. Al pedir la cuenta y anunciar la cancelación del pedido, aparecieron los platos que ya no aceptamos.

Con años de experiencia en hostelería y gastronomía, entiendo los retos de gestionar un restaurante y lo difícil que es leer críticas. A pesar de eso, se acumularon varios errores:

Los platos se servían por cuenta, lo cual indica una falta de comunicación entre el personal y la cocina respecto a nuestras cuentas múltiples. La información sobre el problema del horno fue retrasada, lo que no explica la entrega desigual de platos idénticos. Además, haber conocido este contratiempo a tiempo hubiera sido crucial para darnos la opción de buscar otro restaurante, considerando la variedad de la oferta en Plaza Ñuñoa. A pesar de la cancelación de nuestros platos, se nos cobró por las bebidas consumidas al inicio. En experiencias anteriores de espera prolongada, otros establecimientos han tenido la cortesía de no cobrarlas.

Esta ha sido una de las experiencias gastronómicas más desfavorables que he tenido en años, y aunque se dijo que no me perdí de una gran experiencia culinaria, lo que más lamento es la oportunidad perdida de disfrutar una cena...

I do not recommend for those who like authentic Micheladas, and want to experience an original Chilean made one. Pizzas are also ridiculously small. I ordered my first Michelada with “Merken” & Salt rim to our first waitress, she delivered exactly what I asked. Then I ordered a second Michelada “exactly like the first one”, and a dofferent waitress brought me a glass without Merken rim. When I mentioned her that the glass was missing Merken, she became upset, and mentioned that the bartender did not make such a drink, even though first drink had Merken, which I mentioned her, so then she had even more attitude and told me to be specific about the Merken, which I did, as I ordered the same drink. Finally she served the second Michelada just like the first one, but when I ordered my third one she became unfriendly and mentioned that she did not want to upset the bartender and that she was not going to serve a third one, she also told me that if I ever wanted to “even think if going back there” there was absolutely not chance for me to have Merkén on rim. So we went next door to “Barbudos bar”, and unlike the service at La Tecla, people are Barbudos were very friendly and had a much fun scene, with a patio full of Mural art and beautiful plants, outdoor hitting as well.

El servicio del lugar es muy malo, la primera mesera fué fue un 7, tenía mucho conocimiento de los tragos y comida y me sirvió una Michelada muy rica con merken y sal en el borde. En mi segunda ronda pedí tomar lo mismo, y una mesera diferente me trajo un vaso sin Merken en el borde. Cuando mencioné que no tenía merken, la mesera se molestó diciendo que ellos no lo servían con Merken en el borde sin embargo era lo que me habían servido originalmente, Y contestó que yo debería haber especificado, a lo que respondí que había pedido exactamente lo mismo que antes. Finalmente llega con la michelada, y cuando era hora de pedir la tercera michelada, la misma mesera nos dió un discurso de que “De verdad el Bartender se va a enojar si le pregunto que le ponga merken en el borde”, además insinuó que no volvieramos si queríamos pedir con merken otra vez. Con mis amigos nos fuimos a Barbudos, que es exactamente al lado y nadie nos dió problema por...

Esta opinión va con mucho cariño y siempre con ánimos de que mejoren.

Con mi esposa somos vecinos y clientes de hace mucho tiempo, y en el último año hemos visto como ha ido bajando considerablemente la calidad y subiendo aún ´más considerablemente los precios.

La gota que revalsó el vaso fue cuando visitamos el local ayer. Pedimos una chorrillana grande (casi 20 mil solo por ella), un jugo y una limonada.

Además de esperar 50 minutos aprox por la comida, las papás fritas llegaron frías (solo los champiñones que estaban encima estaban tibios). La porción, en relación al precio, era nada, muy poca y el sabor no era nada del otro mundo.

Además, los vasos cambiaron de tamaño a la mitad, y el jugo era más agua que otra cosa, y la limonada no tenia sabor a limón.

Lamentamos mucho que esto esté ocurriendo, espero puedan tomar esto como una recomendación constructiva y puedan hacer los cambios necesarios. Era un buen local, espero puedan retomar la...