Pataliebre Burgerbar & Café — Restaurant in Puerto Varas

Una experiencia peligrosa debido a negligencia y falta de sensibilidad

Hoy fuimos con mi familia al Pataliebre y tuvimos una experiencia sumamente decepcionante y peligrosa. Tengo una alergia alimentaria grave a los champiñones, lo cual mencioné claramente en tres ocasiones a la mesera al pedir una hamburguesa. Me aseguró que no habría ningún problema y que mi comida sería preparada sin champiñones. Mientras disfrutaba mi comida, ya con más de 3/4 del sandwich consumido, descubrí que había champiñones en la hamburguesa. Inmediatamente informé al mesero que nos atendía en ese momento, quien respondió de manera superficial y hasta con sarcasmo, diciendo que “si quería, me la cambiaba”. Esto mostró una falta total de sensibilidad ante una situación seria. Intenté explicarle lo grave de mi alergia y que no podía seguir comiendo, pero el trato fue indiferente y poco profesional. Solicitamos hablar con el administrador de turno, para explicar la situación y al revisar la comanda que enviaron a la cocina simplemente decía que mi pedido no debía incluir champiñones, sin especificar que se trataba de una alergia alimentaria. Allí nos explicaron que en la cocina utilizan una sola plancha para cocinar todo, lo que genera una alta probabilidad de contaminación cruzada. Esto, sumado a la falta de claridad en la comanda, hizo que mi salud se viera en grave peligro. Además, jamás se nos informó previamente que no podían garantizar la inocuidad alimentaria en casos de alergias, algo fundamental que cualquier restaurante responsable debería advertir. El resultado fue que terminé desarrollando síntomas de alergia mientras aún estaba en el restaurante, lo que me obligó a salir de emergencia hacia la clínica. Aunque descontaron la hamburguesa y ofrecieron un pequeño descuento en la cuenta, esto no compensa en absoluto los gastos médicos ni el mal rato que pasamos. En resumen, el servicio fue negligente tanto en la cocina como en la atención en mesa. Si tienen alergias alimenticias o restricciones alimentarias, no visiten este lugar. La falta de cuidado, comunicación y sensibilidad del personal puede tener consecuencias graves para la salud. Es una lástima, porque esperaba pasar un buen momento en familia, pero salí del restaurante poniendo en...

Fuimos con mi familia a celebrar y nos hicieron pasar un muy MAL rato.

Pedimos bebestibles y entre ellos cervezas artesanales de la zona que la misma mesera nos recomendó muchísimo.

El tema es que llegaron desvanecidas, sin gas, sin espuma y tibias, por lo que OBVIAMENTE le avisamos de buena manera a la chica que nos estaba atendiendo y le preguntamos si nos las podían cambiar porque sinceramente no se podían ni tomar.

Y unos 10 minutos después llega otra mesera con 2 vasitos de muestra de nuestra supuesta cerveza (porque esos sí tenían espuma) y con actitud y tono prepotente empezó casi a gritarnos que no podíamos pedir un cambio, que teníamos que pagarlas igual porque era una pérdida para el local (Eran solo 2 vasos) y que NO nos las iba a cambiar y que si veíamos los vacitos que trajo sí tenía gas (repito, NO estaba así la que nos trajeron, esas muestras se veían mucho mejor) Y ni siquiera escuchaba, siguió diciendo que ya era cosa de gustos y que era culpa de nosotros que no nos gustara porque según ella la cerveza era así, casi sin gas...

Luego de todo el show que armó cuando ni siquiera le habíamos faltado el respeto ni nada por el estilo, por fin accedió de mala manera a cambiarnos por otra variedad artesanal.

De verdad pensamos en irnos por el miedo de que nos hicieran algo en toda la comida que habíamos pedido antes de todo el problema, porque cada vez que pasaba nos miraba mal y hablaba de nosotros descaradamente con otros meseros. Ni siquiera pudimos alegar por el resto de las cosas, porque había una royal que llegó tibia, unas papas frías, casi sin salsa, y 3 pedidos que por culpa de todo el show llegaron muchísimo después, pero preferimos evitar otra escenita por parte de ella.

Lástima que opaquen tanto el local trabajadores así... La comida estaba rica. Pudo haber sido algo grato.

También mencionar que no habían enchufes cerca.

No creo que volvamos a ir después de eso. Y ya saben, si van NO pidan esa variedad de cerveza artesanal a menos que les guste tibia...

Fuimos con mi marido y dos niños pequeños hace un par de semanas. El lugar muy bonito decorado. Primero nos quisimos sentar adentro por los niños ya que en la terraza había gente fumando, pero como hay vidrios en el techo en ese sector pedimos movernos a la terraza de todas maneras ya que el sol era demasiado fuerte. En segundo lugar yo pedí una hamburguesa luego de ver el menú en mi teléfono, al parecer indicaba que la hamburguesa era estilo americano o algo así, lo que significaba (y yo no sabía) que la hamburguesa venia básicamente cruda. Evidentemente por no conocer este estilo no la pude comer ni compartir con mis niños que son muy pequeños. Mi marido pidió algo así como un lomo saltado en una cama de papas fritas, pero la carne estaba durísima. Finalmente cuando nos vamos, sin reclamar por la comida, le digo a la señorita que nos trajo l cuenta que quería hacerle una sugerencia de manera amable y le digo que en el futuro deberían preguntarle al cliente en que punto quiere la hamburguesa ya que la mía estaba muy cruda y no la pude comer. En lugar de aceptar la sugerencia (aunque no le vayan a hacer caso, solo por amabilidad), ella saca su teléfono y se pone a ver algo, para luego decirme que el menú decía que viene en ese estilo. Le indico que yo desconozco de que se trata eso y ella insiste en que es mi culpa. Me parece que mas allá de la comida del tipo que haya sido, el personal debería ser entrenado para recibir sugerencias de un modo mas certero, ya que de lo contrario sólo indica que no están abiertos a comentarios constructivos y hacen sentir mal a quien pudo haber vuelto en el futuro, pero evidentemente así ni ganas...