Hornitos Belalcázar — Restaurant in Bogota, Capital District

Los Últimos Hornearán Primero: Una Odisea en Hormitos

Cuatro estrellas para la panadería Hormitos. ¿Por qué, te preguntarás? ¿No es un tanto generoso si al parecer siempre te hacen esperar hasta que tus canas se duplican y tu paciencia se reduce a migajas? A continuación, te contaré mi hilarante historia de amor y desesperación con este local.

Entrar en Hormitos es como entrar a un bizarro pero delicioso universo paralelo donde el tiempo parece dilatarse más que un croissant en el horno. Tú entras a las 8 AM pero de alguna manera sales a las 9, con pan caliente y una extraña sensación de haber perdido un pedazo de tu vida, pero con la satisfacción de haber comido los más exquisitos bocados.

Llegué a Hormitos un día soleado, con ganas de saborear un crujiente baguette. Sin embargo, la suerte estaba echada, y me vi atrapado en lo que puedo describir como la versión panadera de la película 'El Día de la Marmota'. No, no te despertarás todos los días con 'I Got You Babe' de Sonny & Cher, pero te sentirás atrapado en un bucle de pan y espera.

Te encuentras esperando que te atiendan mientras observas cómo preparan con meticulosidad cada pieza de pan, masa que sube como la espuma en un vaso de cerveza, y a la que atienden con más amor y dedicación que a un recién nacido. Y tú, impaciente, te preguntas, ¿y qué hay de mi amor y dedicación, Hormitos? ¡También necesito cariño en forma de carbohidratos!

Pero aquí viene la razón de mis generosas cuatro estrellas. Cuando por fin tienes en tus manos ese pan, tan esperado que casi puedes escuchar a tus antepasados aplaudiendo en el más allá, te das cuenta de que, madre mía, este pan vale cada milisegundo de espera. Es esponjoso, sabroso, calientito, como un abrazo a tu estómago. Entiendes que en Hormitos el tiempo es un ingrediente más, y quizás el más importante.

Hormitos, eres como esa relación que todos hemos tenido alguna vez. Nos haces esperar, nos frustras, pero cuando llega el momento, nos dejas sin palabras y nos haces volver por más. ¿Consejo? Lleva un libro, un sudoku o quizás esa tesis que tienes pendiente, y aprovecha la espera en Hormitos. No te...

Es una panadería que no hornea el pan. A pesar del nombre en la puerta, todos los productos los traen ya horneados desde alguna planta industrial, por lo que nunca los encontrarás realmente frescos.

Sus buenos productos son los calentados y algunos sánduches.

Las sopas son razonablemente buenas y no tan caras.

El espacio se ve agradable pero en la práctica resulta muy incómodo, hay que hacer fila a la salida y aunque ya hayas pagado en la mesa tendrás dificultad en atravesar esa fila de gente, que en muchas ocasiones interfiere también con el servicio a las mesas más cercanas.

Por suerte, en el mismo barrio hay otras panaderías reales, con horno y con precios muchísimo más bajos.

Si entras, definitivamente deberías probar los calentados o las ensaladas de frutas. Sirven desayunos caros pero elegantes.

Y dale una sonrisa a los trabajadores, que se ve que la pasan duro. Las dificultades del local son de diseño más que de atención al cliente, en lo que se ve que se esmeran aunque no logren un nivel sobresaliente por la estructura del negocio: distribución física del local con tapón de fila en la puerta, precios altos y pan transportado en lugar de horneado...

ASQUEROSO! Mi primera y última vez en este lugar. Primero no se sentía acogedor, nos pasaron la carta, después de 10 minutos de solicitar un mesero le indicamos lo que queríamos y hace el comentario: Esa gente que ve que uno está atendiendo mesas y empiezan a llamar no se dan cuenta que uno está ocupado? Ya llevábamos tiempo esperando y no había un gesto de amabilidad. Me pregunté: Será que me está diciendo una indirecta? Y lo deje pasar. Comimos y la comida aunque no es mala tampoco es lo mejor pero en una jornada laboral que habíamos pasado tan larga solo esperábamos una buena experiencia comer rico e ir a descansar, pedimos para llevar 2 brownies y cuando fuimos a comer el postre hemos llegado a casa con 2 piedras de masa dura y arequipe tieso. Y tienen el cinismo de cobrar servicio? Y aunque reconozco que fue mi error no revisar, se supone que una panadería tan reconocida, prefiere vender que pensar en el bienestar del cliente?. Con lo que me gaste en este lugar me hubiese comprado 2 pollos y el postre y me sobraba. Un lugar sobre valorado para lo que...