Salvatore Mugnano - Pizza & Passione — Restaurant in Milan

We came pretty late in the evening, and there were a few large parties inside so they only had room at one of the outside tables for us. That was perfectly fine as the weather was nice. I don't think they normally sit people at those tables at that time, but they made it work for us, which was great and the food was terrific. We shared a pizza (decent size pie) and a panna cotta. Both were delicious! The price was reasonable for everything as well. Great value for money here, and the staff...

On the corner situated pizzeria with a small terrace outside close to City life. It’s quite a busy road on weekdays so on those days I would sit inside. The atmosphere is nice, it’s modern but nothing fancy. The staff is really friendly and the service is quick. We had pizza’s which were quite good although I had them better and I’m not a big fan of the Neapolitan pizza. Unfortunately it’s the most common style in Milan. Prices are reasonable. We paid almost 40 euro for 3 pizza’s...

El lugar es buen sitio para comer (en nuestro caso), nos pedimos pizzas y ensaladas, por lo que respecta a la comida, todo en orden, de hecho las cantidades son abundantes y no con menos calidad, así que lo recomiendo en cuanto a calidad/cantidad.

Pero por algún motivo, tuvimos la “mala suerte” de ser atendidos por una tal “*danna” por respeto hacia su privacidad no pondré su nombre completo, pero si algún encargado/jefe lo lee, sabrá de quién hablo.

Desde el inicio, malas formas, como si por por alguna razón ya le molestáramos o algo parecido (no sé si por ser españoles y hablarle en inglés) o bien porque simplemente no tenía educación. Por resumir, fuimos 4 comensales en la misma actitud de siempre, respeto hacia la profesión de hostelería, pero lo que es inconcebible es que de malas formas exija que le pasemos los platos, uno a uno cuando ya habíamos terminado de comer, menos aún que a la hora de pedir los cafés, le diga que quiero una proporción X en la taza de café y me diga que aquí solo sirven Espresso y es lo que hay. Y que de buenas formas quiera explicarle cómo lo quiero y de mala forma, me diga en su idioma, no te entiendo y se dé media vuelta y me deje con la palabra en la boca.

En resumen, recomiendo el sitio, pero a día de hoy, si tuviera que volver, si por casualidad me atendiera esta persona, me levantaba y me iba.

Hay que decir, que había otra persona que nos tomó nota de la comida y...