Nixtamal Restaurante — Restaurant in Oaxaca

Tuve recientemente la fortuna de cruzar el umbral de un restaurante que no solo despertó mis sentidos, sino que los elevó a los más exquisitos altares del placer culinario. Lo vivido allí no fue simplemente una comida: fue un auténtico banquete para el alma. Desde el primer instante, el ambiente del lugar me abrazó con una calidez oaxaqueña que sólo puede compararse con el cariño de una abuela que cocina con el corazón. Pero vayamos a lo sustancial: la comida, ese poema servido en platos que aún suspiro al recordar. La quesabirria, señoras y señores, fue un auténtico manjar de los dioses. Crujiente por fuera, melosa por dentro, con ese queso fundido que se derramaba como si supiera que estaba protagonizando un momento sagrado. Cada bocado era una sinfonía entre la carne suculenta y el consomé que lo acompañaba, digno de beberse a cucharadas... o a besos. Pasemos, si me lo permiten, a la tlayuda, esa joya oaxaqueña que en este sitio se presenta con una majestad digna de realeza. ¿Cómo describirla sin quedarme corta? Era un lienzo crujiente cubierto con los colores y sabores de una tierra generosa: frijoles refritos con carácter, tasajo perfectamente sazonado, quesillo que se deshilaba y, por si fuera poco, una salsa que bailaba entre lo picoso y lo celestial. Una experiencia tan intensa que me dejó sin palabras, y eso que no suelo escatimar en elogios. Las bebidas, por su parte, merecen un capítulo aparte. Hablo de néctares dignos de Apolo y Dionisio: cocteles que equilibraban frescura, carácter y un toque de alquimia. En suma, este restaurante no es simplemente un lugar para comer: es un templo donde se rinde culto al sabor. Salí de allí con el corazón contento, el estómago agradecido y el alma danzando de felicidad. Si alguna vez la vida los lleva a Oaxaca, no cometan el pecado de pasar de largo. Entren, pidan sin miedo, y prepárense para vivir una experiencia gastronómica que no se olvida ni con los años ni con...

Lunch here and I would highly recommend. The restaurant is located only a few blocks from the Central Park in town, but away from the busy centre of town. There is indoor as well as outdoor seating; we sat outside. I had an excellent chicken burrito with a salad at a very reasonable 100 pesos. The chicken was pulled rather than sliced which I enjoyed. My wife had what she describes as a wonderful salad, including avocado. A third member of our party just had a soda, and with my Coke and my wife’s agua mineral, our total...

Si te gusta la discriminación ven a este restaurant. Llegamos a desayunar elegimos una mesa y nos tomo la orden un mesero. Pedimos fruta, jugo, huevos y un sándwich. Llevábamos 15 minutos esperando por la comida, y llegó un extranjero a la mesa de al lado, inmediatamente dos meseros fueron a servirle, le tomaron la orden y le sirvieron café, jugo y fruta en menos de 5 minutos, otros 5 minutos después le llevaron el desayuno y otro café con pan. Yo le pregunté al mesero de nuestros desayunos ya que toda la atención era para el extranjero, el mesero me dijo que los extranjeros eran prioridad. Yo le pedi que nos trajera nuestro desayuno ya era casi media hora esperando. Finalmente nos lo trajeron. Después llegó otra familia a la mesa de enfrente y pidieron su desayuno. Estaban sirviéndoles el café y nuevamente llegó otro extranjero a la mesa de al lado y fue la misma historia. Buena comida pero no me gusta que por ser mexicano te discriminen en tu...