Restaurante Sushi Cero — Restaurant in Alicante

Qué grata sorpresa ha sido descubrir el restaurante buffet CERO en Alicante! Este lugar ha superado todas mis expectativas con una propuesta gastronómica única y llena de sabores. Los platos que ofrecen son una auténtica delicia, con opciones tan originales que muchos eran completamente nuevos para mí. Cada bocado fue una explosión de sabor, y no exagero al decir que repetiría cada uno de ellos sin dudarlo. El servicio es otro de los puntos fuertes de CERO. La atención es rápida, eficiente y súper amable, lo que hace que la experiencia sea aún más agradable. Pero lo que realmente me impresionó fue su innovador sistema de pedidos: a través de su página web, puedes ver en tiempo real lo que has pedido, lo que están preparando y lo que ya te han servido. Este toque tecnológico no solo es práctico, sino que también demuestra cómo CERO integra la modernidad en la experiencia culinaria, haciendo que todo sea más fluido y cómodo. En resumen, CERO es un lugar que combina comida sorprendente, un servicio impecable y un enfoque innovador que marca la diferencia. Súper recomendado para quienes buscan una experiencia gastronómica única en Alicante....

Amazing place! 🍣 The sushi is incredibly fresh, the rolls are neatly prepared, and the fish simply melts in your mouth. Generous portions with beautiful presentation. The beer selection is great — perfectly complements the food, and it’s served nice and cold, just as it should be. The staff is attentive and friendly, making you feel truly welcome. I’ll definitely be...

Fuimos a comer y nos sentaron justo al lado de la puerta. En pleno verano, cada vez que alguien entraba o salía, una ola de calor sofocante nos golpeaba de lleno. Era como comer dentro de una sauna con la puerta abierta, sudando y sintiéndonos agobiados durante toda la comida. La incomodidad fue tal que resultó imposible disfrutar plenamente de la comida. La comida estaba buena, pero con muy poca variedad. Además, cada vez que pedíamos una bebida nueva, lo lógico sería que viniera con un vaso limpio con hielo, pero no fue así. El momento más surrealista llegó cuando, al pedir hielo para enfriar un café, el camarero respondió: "No puede ser, es que nos piden mucho hielo". En pleno calor, negar hielo a un cliente es incomprensible. El servicio fue lento, los platos tardaban más de lo esperado y los camareros daban muy poca información sobre los productos. En resumen: aunque la comida estaba correcta, comer con un calor insoportable, sin detalles básicos de atención y con respuestas como la del hielo, convierte la experiencia en algo que no...