Grill Corner Xanadú — Restaurant in Arroyomolinos

Fuimos el sábado por la noche, sobre las 23:00, un poco tarde, aun así el “metre” de la puerta, que nos llevo a la mesa nos recibió con un cariño, una profesionalidad, y un respeto inigualable, 10/10 para el, al sentarnos en la mesa nos recibió un chico joven camarero de pelo blanco, el cual aun queriéndoos dar imagino un trato cercano y amable, de primeras fue un poco incomodo su forma de tratarnos con demasiada cercanía y sin mucho “respeto”, aun así le recibimos con sonrisas y hablando con el, nos toma nota sin saber ni si quiera como iba el tema menús en ese restaurante, le pedí Nestea, y me dijo que de beber sin gas no había nada, “agua sin gas” me dijo, a lo que se acerca un compañero de pelo oscuro mucho mucho mas formal y educado, y nos tomo nota de los menús, y me confirmo QUE SI que obviamente había bebidas sin gas, como en todos sitios. Nos trajeron los primeros platos, y aun no había bebidas, a lo que le pedimos al camarero de pelo blanco y origen venezolano, que si nos podía traer la bebida, y lo que hizo fue, decirnos que ahora mismo lo pedia como si fuera para el y acto seguido se puso a hablar con la mesa de al lado durante 5 minutos sin haber pedido la bebida de nuevo, y al rato nos la trajo OTRO camarero. La comida estuvo muy buena dentro de que las patatas no son lo mejor del mundo, las salsas si fueron destacables, estaban bastante buenas, nos trajeron el segundo plato preguntando el punto de la carne de dos hamburguesas que pedimos, las cuales NINGUNA se asemejo con el punto de carne que le dijimos al camarero, mucho mas hechas de lo pedido. A lo largo del resto de la cena el camarero de pelo blanco nos siguio hablando y abriendo temas de conversacion cortandonos la cena entre mi pareja y yo, aun asi le recibimos con una sonrisa como comente antes, por educacion. Cuando llego la hora del postre vino a tomar nota, el mismo camarero, y un desastre total, demasiada confianza y cercania, nos dejaba los aparatos para apuntar y cobrar encima de la mesa y como si fuera lo mas normal, aparte de tomar nota sin prestarnos ninguna atencion y nada mas que hablando de sus cosas, que no mostrabamos interés ninguno y se notaba, pero le daba igual. Se fue sin apuntar el postre de mi pareja y el mio apunto lo que le dio la gana, habia MUCHOS tipos de helado, y me dijo 3 tipos, gracias a que vi en su propia pantalla de que habia y pedi lo que quise yo. Los helados los trajeron derretidos practicamente y cuando yo acabe el mio, le trajeron el otro a mi pareja. En resumen, la atencion por parte de ESE camarero, nefasta, la calidad de cocina bastante buena sin ser destacable. Cabe recalcar que en los últimos 20 minutos que estuvimos en el restaurante el susodicho camarero iba con la camisa por fuera arrugada, el delantal quitado y cantando y haciendo lo que quisiese. Cosa que el restaurante desde luego no creo que quiera dar esa imagen.

Solo espero que este camarero no siga mucho mas porque arruina totalmente la presencia del restaurante y esta mas enfocado a trabajar en un 100 montaditos o similares, que en un restaurante que quiere aparentar ser de...

Me veo obligado a bajar la puntuación tras la respuesta del restaurante.

Cito: “No es necesario nombrar lo de las chicas de la entrada cuando muchos de nuestros camareros y DIRECTORES son hombres”

El chiste se cuenta solo. Hablan de igualdad diciendo que los jefes son hombres y confirmando que tienen a las chicas de “imagen” como oí decir a uno de sus “directores”, (imagino que sería “director” ya que iba vestido con americana, aunque llevaba zapatillas),antes de entrar al local.

De verdad, señores, no pretendan ir de lo que no son. No intenten ir de inclusivos e igualitarios sin serlo. Y no piensen que los clientes somos estúpidos, eso SÍ es de ser estúpidos. De momento, no pienso volver nunca a su restaurante, ni se lo recomendaré a ninguna de mis amistades. Y espero que esta reseña sirva de aviso a quien intente informarse sobre su restaurante y se decanten por otra opción, ya que lamentablemente ustedes no ofrecen un servicio adecuado.

Y no es que algunas de sus recetas no hayan sido de mi agrado, es que no se pueden freír unas patatas, calentarlas al microondas, y luego servirlas en un plato de carta. Es lamentable. Platos fríos y recalentados, servicio rápido, claro, está todo ya a medio cocinar antes del servicio.

Lo que tienen que hacer ustedes es mejorar la calidad de su cocina, y tal vez poner a alguna directora para esa igualdad de la que presumen tanto.

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Lo mejor del local, el camarero, Moisés, y el propio local, muy bonito.

Claro ejemplo de que las apariencias engañan.

Preguntan el punto que quieres de la carne, pero o lo ignoran o no saben como conseguirlo. Fallaron en los dos platos. Las patatas fritas, directamente incomibles, claramente recalentadas. Horrible.

Patatas bravas por el nombre, la salsa era una suerte de especias hindúes que se parecía más a un tikka massala que a una brava. Igual el “chimichurri” con sabor a pisto de verduras.

Lo llamaría trampa para guiris total, gente que vine a echar el día al Xanadú y pica, como ha sido nuestro caso, y que seguro no volveremos. De hecho ni postre ni café quisimos pedir visto lo visto.

Nunca se fíen de un restaurante que utilice a chicas como imagen y gancho, suele ser para compensar la poca calidad de lo...

PENOSO!! Horrible food and worse service. Had to send our entire table of main courses back to the kitchen because each dish was as cold as ice, and my steak back a second time as it was raw. When it was served for the third time it was still underdone and half of it was inedible. Laughable and embarrassing for one of the most expensive plate on the menu at a restaurant that is supposed to be specialized in the grill. The worse was that the manager would not even acknowledge the problem or take responsibility for it. If this place was anywhere else than in a crowded mall they would be closed within the week. They have no idea how to cook food and should be thoroughly ashamed...