Restaurante Juan Blanco Catering — Restaurant in Boadilla del Monte

Me he decidido a poner esta reseña como réplica a la efectuada por la propiedad del catering (contestaron a la efectuada por mi mujer). En dicha réplica se vierten algunas afirmaciones poco verídicas, o directamente falsas. Paso a rebatir citando a la propiedad entrecomillando sus respuestas para rebatir con datos fehacientes: -“Este año hemos dado más de 50 servicios y en absolutamente todos nos han felicitado.” ¿Cómo puede ser esto, a fecha de mediados de junio? No me salen las cuentas. 24 fines de semana y 50 cócteles. ¿Y dónde están todas esas reseñas positivas? -“SERVIMOS LO CONTRATADO, lo que no se puede es pretender coger un cóctel de comunión de 45€ con duración de 2 horas para celebrar una boda de 12 horas de duración” Lo contratado, querida señora, fue un servicio de 11 horas de duración, con 2’5 horas de cóctel y dos camareros durante 12 horas. Omite usted que había una recena y un cortador de jamón. ¿Cóctel de comunión? ¿Eso qué significa? ¿Dónde especifica en su web que es un cóctel de comunión? Porque nada más que diferencia cócteles según número de canapés y precio. Y si fuera así…¿se come menos en una comunión? ¿Acaso tiene un precio distinto? -“A las 10:30 de la mañana ya estaba allí el encargado probando el portátil de cerveza , y que ya se comenzó a utilizar en ese momento. El resto del personal llegó a las 11:45 horas ,yo misma estaba allí a las 11:50” FALSO. El encargado llegó a las 10:30, se ausentó y no apareció hasta mucho después. A las 11:30 llegó un coche con una cocinera y un camarero y el encargado no estaba. Le llamamos para ver que tenían que hacer esas dos personas y no contestaba al teléfono. No fue hasta las 12:20 cuando llegó el resto del personal -“ El comienzo del cóctel estaba previsto a las 14:30 horas y tuvimos que esperar 35 minutos paran comenzar a servir porque la gente no llegaba. Imagínate si llegamos pronto.” El cóctel debía empezar a las 14 h y se demoró 30 minutos porque se lo pedimos, ya que faltaban algunos invitados por llegar. “Cóctel de 19 bocados con bebida” Según figura en la factura y en la oferta comercial de su web, fueron 20 bocados más 2 de postre ( se pueden contar el número de bocados en la web) -“ Les dijimos hasta la saciedad que ese cóctel no era para una boda y mucho menos una boda desde las 14:30 hasta las 12 de la noche” FALSO. Solamente nos mencionaron una ocasión que ese cóctel era de comunión (justamente en la última reunión presencial, en mayo). Ante nuestra sorpresa ante tal afirmación, le mostramos nuestra preocupación de que los invitados se quedaran con hambre. La dirección nos aseguró que eso no iba a pasar, y que el cóctel nº 4 era el mejor y el más completo. -“ La gente tenía hambre, pues claro que tenía hambre. Los invitados cogían las mini burguer de dos en dos. Servicio de mesa no teníamos, SÓLO SE CONTRATÓ un CÓCTEL y nada más.” Una vez más, FALSO. ¿Servicio de mesa no teníamos? ¿Eso quiere decir que la gente que estaba sentada no tenía derecho a comer? La gente cogía las miniburguer de dos en dos, querida señora, porque tenían hambre (a pesar de que usted lo vea muy lógico porque era un “cóctel de comunión). Y eso fue así porque salieron gran cantidad de canapés de un tipo, mientras escaseaban los de otro tipo. Incluso había canapés en la lista que no salieron, y usted lo sabe muy bien. Sus camareros depositaban bandejas enteras de canapés en algunas mesas, mientras desatendían otras, y por tanto la gente acudía a esas bandejas a coger comida. -“ Se os virvió más de lo que pagasteis” Hemos de agradecer (lo cortés no quita lo valiente) que las 4 mesas con mantelería blanca que no estaban en el precio fueran montadas por su personal (a pesar de que la gente allí sentada se quedó sin comer). También el montaje de flores en las mesas altas (un...

El servicio contratado para nuestro catering de boda fue el siguiente: Un catering de 2 a 5 para 95 adultos con el cóctel frío-caliente nº 4, un servicio extra de 2 camareros de 13 a 14h y de 17 a 24h, una recena para 60 comensales a las 21:00 y un cortador de jamón a las 20:00. He de aclarar en primer lugar que mi intención, como creo que debe ser la de cualquier reseña, es ayudar a otras personas (que no hay sido tan incautas como yo) que se piensen la contratación de este servicio, así como a la propiedad, ya que por este tipo de reseñas pueden captar la opinión de otras personas para tomar nota y mejorar (este último lo tengo totalmente descartado, no obstante, por hechos por los que voy a relatar atestiguan). También he de destacar que el restaurante cuya reseña nos ocupa tiene dos líneas de negocio bien distintas: un servicio de restauración en su local, con muy buenas reseñas, y un servicio de catering fuera de el mismo, con reseñas bastante peores (por no decir nefastas). Lo que aquí vertimos no es precisamente fruto de nuestra atención en ese día, ya que tanto mi mujer como yo estábamos a mil cosas aparte de la comida, sino de los testimonios de esos 100 invitados que, menos atareados que nosotros, tuvieron su antención puesta en el mal servicio y el caos reinante: -Falta de camareros: sin contar con el camarero de barra, que exclusivamente servía bebida, había 3 camareros sirviendo comida para 100 personas. No se si este es el ratio de camareros-comensales habitual en estos eventos, pero es claramente insuficiente. -Suciedad en las mesas: Nadie recogía los vasos vacíos y restos de comida, dando un aspecto dantesco a las mesas. Los camareros hacían lo que podían, y estaban desbordados. -Presentación y falta de canapés: brochetas de langostinos con un palillo atravesando el bicho, trozos de jamón del tamaño de icebergs en el salmorejo, y canapés como mini hotdogs que ni aparecieron. Algo cutre para una empresa cuya gastronomía se presenta como “estudiado equilibrio entre la gastronomía y el diseño pero, fundamentada en la tradición, aunque dando un guiño a la modernidad, siempre con productos de primerísima calidad” ó "la sencillez de lo exquisito". -Desorden general: La sensación de todo el mundo era de atropellamiento y caos. Los camareros no daban abasto, y gracias a su quehacer pudimos comer algo. -La dirección cambia el acuerdo verbal que teníamos, ya que nuestra intención era pagar en metálico el 50% el día del evento. Una semana antes de la boda nos insisten en que es necesario abonar el total antes de 5 días. Se aprovechan de que con ese margen de maniobra nadie va a dar marcha atrás en un día tan importante con tan poco márgen de tiempo. Parece que por reseñas similares es la estrategia habitual. Brillante jugada! -la dirección, a pesar de estar incluido en su oferta comercial en la web, nps cobra 1,5 € por persona por los cafes (estaban incluidos en dicha oferta) Quiero dar un consejo, por último, a todos los futuribles novios para que no cometan el mismo error que nosotros. En primer lugar, leed las reseñas (nosotros no lo hicimos). En segundo lugar, acudid al lugar y probad absolutamente todos los canapés, incluso con algunas personas como los padres acompañando (8 ojos ven más que 4). Y por último, algún, invitado de confianza que se dedique a estar atento el día de la boda a todas estos datos que he señalado en la reseña. Un...

Lamentablemente he de poner esta reseña y unirme a las múltiples reseñas negativas de este catering. Decidimos mi marido y yo escoger este catering para nuestra boda por ser “conocida” de un “ conocido” y recomendado, gran error por nuestra parte por no leer las reseñas del catering. El inicio de la contratación fue afable y con interés, siendo unos novios que prácticamente no preguntamos casi nada. Una vez cobrado el anticipo con un recibí por escrito por whassap, comenzaron los meses previos al evento donde el maitre fue a la finca, el cual llegó tarde, tenia que organizar el evento y ver cómo poner las mesas e infraestructura, cual fue mi sorpresa cuando ni sabía el número de personas ni si era cóctel, sentados, menú, etc.., Pasaron los meses y cada vez que contactábamos con la dueña o se equivocaba de novios o tardaba mucho en solucionar las dudas ( no en todo momento, pero fue comentado entre nosotros) Quedamos en que la mitad del catering lo pagábamos el día de la boda y de manera unilateral decidió unos días antes que todo por adelantado. Llegó el gran día , en el cual mi marido y yo no pudimos estar muy atentos por los nervios y la emoción pero desde el primer momento ya hubo problemas más las numerables quejas de los invitados; llegaron tarde a preparar todo, con tan solo hora y media de antelación para una boda de 100 invitados. Los canapés no llevaban los ingredientes que se detallan en el catering e incluso llegaron a faltar algunos canapés. Una de las mesas familiares se quedó prácticamente sin comer porque los camareros no daban abasto y fueron avisados en repetidas ocasiones. Entre canapé y canapé pasaban 20m y había mucho de algunos y de otros muy poco.Recuerdo muy sorprendida como la brocheta de langostino tan solo llevaba un langostino pelado en un palo o como la brocheta de ensalada caprese llevaba tan solo un cherry con un trozo de queso sin aceite , condimento ni nada. El bocado de salmorejo llevaba unos trozos enormes de jamón serrano en vez de crujiente de jamón y huevo. Y podría continuar y hacer la reseña eterna pero lo más sorprendente después de lo acontecido es que la dueña ni pregunto que tal ni al día siguiente ni a los dos días. Tras el gran disgusto, la llamé y su defensa fue implacable, desde que habíamos contratado un cóctel de comunión ( que debe ser que en las comuniones no se come) cuando nos dijo que el cóctel de 23 bocados era perfecto, y ante la falta de organización , canapés y camareros que si había puesto 4 tableros sin cobrarlas y un largo etcétera sin responsabilidad alguna respecto a los problemas acontecidos. La reseña me desahoga pero el desastre no se repara ni el día se repite. Eso si el jamonero que contratan impecable. Espero que en vez de eludir responsabilidades, den el...