Lamento mucho dejar una reseña así, pero el lugar que alguna vez valoré con 5 estrellas me ha decepcionado al volver después de un par de años. Seré estructurada, ya que para mí hubo demasiados fallos para una sola cena.
Al reservar la mesa, solo me ofrecieron disponibilidad a las 22:30 (todo lo anterior estaba reservado). Acepté, pero pedí que me llamaran si se liberaba algo antes. Estábamos de paso en Lleida y nos liberamos antes de lo previsto (20:30). Llamamos al restaurante para avisar que, si no se liberaba nada, cancelaríamos la reserva, ya que no queríamos esperar dos horas en la calle con frío (a esa hora en Lleida todo está cerrado y no hay dónde ir). El restaurante nos cambió la hora a las 21:45… Esperamos una hora en la calle tratando de matar el tiempo, pero el frío nos obligó a entrar antes de nuestra hora.
Nos sentaron en la planta baja, donde había cinco mesas libres. De inmediato nos dimos cuenta de que habíamos esperado afuera en vano, ya que mientras estuvimos dentro, dos mesas quedaron vacías todo el tiempo.
Hicimos nuestro pedido: dos entrantes, tres sets de sushi y yakisoba. Los entrantes llegaron rápido y estaban buenos, lo que nos relajó un poco. Sin embargo, cuando nos trajeron los dos primeros sets de sushi, pedimos wasabi a un camarero y luego a otro. Ambos vieron perfectamente que no tocábamos la comida porque estábamos esperando el wasabi, pero actuaron como si no fuera su problema… Esperamos 15 minutos hasta que tuvimos que pedirlo por tercera vez.
La calidad del sushi fue decepcionante: • La parte del salmón rojo estaba llena de nervios. • El sushi con mango tenía un sabor extraño, como a algún tipo de condimento para caldo.
El tercer set de sushi llegó solo cuando ya habíamos terminado de comer y estábamos esperando lo demás. Fue muy raro comer dos tipos de sushi, esperar un buen rato y luego comer el tercero por separado. Lo correcto habría sido traer todo junto, sobre todo teniendo en cuenta los 15 minutos de espera.
Pedimos una Coca-Cola Zero al principio de la cena, pero nunca nos la trajeron. Como al final de la comida aún la queríamos, la volvimos a pedir. Tras un rato de espera, tuvimos que recordarlo otra vez, y solo después de dos recordatorios y 15 minutos más de espera nos trajeron la Coco-Cola NORMAL.
El sushi fue la mayor decepción, especialmente porque este restaurante se especializa en ello. La calidad ha bajado muchísimo (adjunto fotos).
Muy mala atención al cliente. La cena costó 110 €, pero lo único realmente bueno fue el carpaccio, el ceviche y...
Read moreAfter 4 days of hardy mountain fare in the Pyrenees, we were hankering for something fresher and more delicate on our drive home. Japanese cuisine fit the bill and you could not do better than Bokoto. They are serving sushi and other Japanese dishes at the highest level, with the freshest ingredients, expertly made. The flavors were truly authentic and the menu offered a vast variety of Japanese specialties. The prices are on the high side but are warranted by the quality and care. This is the place to go if you want real, high quality sushi and Japanese food. I only wish I lived closer to here to eat...
Read moreNos acercamos al restaurante gracias a las buenas críticas y os puedo asegurar que todo lo bueno que habíamos leído se cumplió incluso superando nuestras expectativas.
En primer lugar el local es un chalet reconvertido con muy buenos acabados y muy acogedor a la vez de innovador. No teníamos reserva no obstante cenamos en una mesa alta en la bodega.
La atención de la camarera que nos atendió no pudo ser más exquisita, atenta, agradable... Una joya para cualquier negocio. Nos aconsejó sobre todos los platos, las cervezas e incluso debido a mi intolerancia a la lactosa me facilitó la carta de alergias.
Respecto a la bebida, tienen varios tipos de cerveza entre ellas orientales como la Sapporo y Kirin, y además bien frías.
En la comida una gran variedad y casi todo preparado al momento, ya que le confesaron que las gyozas las tenían ya preparadas, pero el resto lo preparaban al momento porque pedimos algún plato con lácteos y lo prestaron sin queso al final, un buen detalle a tener en cuenta por los intolerantes
Como entrante pedimos un tartar de atún con sriracha y wasabi, que estaba fresco y con el justo punto de picante, muy bueno. Para continuar las gyozas de pollo con salsa mezcla de soja y aceite y sésamo muy buenas también y suaves, nada especiadas. En tercer lugar unos roll de salmón, que originalmente llevaban queso pero que prepararon sin el lácteo, y por último teppanyaki de arroz con pollo, langostinos y verduras, buenisimo: el langostino tenía un verdadero sabor a marisco así como el pollo estaba jugoso y el arroz cocinado a la perfección.
De postre brownie con helado y base de galletas y sorbete de mojito. Ambos de diez.
La encargada muy atenta, ya que nos acompañó a la salida y en todo momento se interesaron por saber cómo había...
Read more