Taberna Griega

Carta muy variada y deliciosa 😋 con esmero por lo tradicional y una buena representación de las ensaladas, entrantes quesos, platos principales y postres más significativos de la Grecia rural. Todo servido con pan de Pita y vinos griegos (muy recomendable el retsina de la casa). El servicio es tan profesional como amable. El local está amueblado, decorado y hasta estampado con paisajes y monumentos griegos. Todo ello lo hace muy acogedor y hasta crea la ilusión de estar en una remota isla del Egeo o en una aldea montañesa de la Grecia profunda. Estuve en una cena de grupo multitudinaria (más de 50 comensales) con discursos incluidos. Y resultó ideal, tanto para la actividad asociativa como en el rápido y muy eficaz atención en cocina y servicio (habíamos elegido cada menú personal con días de antelación). Lo único que eché de menos es que el hilo musical no fuese de música griega tradicional. Un buen repertorio de rebetiké haría honor al nombre del restaurante y lo ambientaria aún más. Salí muy satisfecho de la deliciosa cena y atención rápida a imprevistos. Y no sé si por ser grupo numeroso o por que es habitual me pareció una insuperable relación calidad/precio. Volveré muchas más veces, en solitario, en 👫 y, por supuesto, en grupo. Además, sé nos informó que hay menú del día, muy asequible y atrayente.