Comecamiños Street Food — Restaurant in Ourense

Edito: no hay ningún error, fuimos un domingo por la noche, pedimos dos hamburguesas, la mía con pollo y cambié el queso de cabra porque no lo puedo tomar. La carta en los alérgenos es obligatoria. No podéis decir que es un error, porque no lo ha sido. Fuimos a cenar un par de hamburguesas mi pareja y yo. No había mucha gente nos atendieron bien de inicio. Después de ver las hamburguesas había una que me gustaba pero no podía comer el queso por el embarazo, le pregunté si podía cambiármelo por otro, a lo que no puso buena cara, especifique porque era, si me dice que no no hay problema porque o busco otra cosa o vamos a otro lado, al final me dijo que si, acto seguido especifiqué que nada de frutos secos ya que soy alérgica.( que en la carta no estaban los alérgenos y se de primera mano que es obligatorio tenerlos) Bastante bordes la verdad. Gracias que fue muy poquita cantidad lo que debía de llegar, porque al día siguiente me desperté con toda la cara y cuello llenos de ronchas y mucho picor que tuve que ir por urgencia a mi médico, no fue a más por suerte aunque por el embarazo no te permiten tomar nada, estuve una semana con picor y la cara roja con ronchas y manchas. Me parece que con esas cosas no se juegan, ya que no solo es mi salud si no la de mi bebé. No fui a poner una queja porque no merece ni la pena y gracias a dios no fue peor, con no volver es suficiente, pero que sepáis que el tema de las alergias es una cosa muy seria con la que no se...

Delicious burgers, super friendly and accommodating staff, great recommendations and an overall great experience. The menu is built in a way where you can construct your own burger (similar to Bacoa in Barcelona), but also pre-determined options for your easy selection. The place was packed with local people which is always a great sign. Even though we arrived super late in the night and without reservation, we were welcomed in and served immediately. Would love...

The food could be edible. I would not know. I stood in the terrace wearing g a bright yellow shirt with a dog on a leash in one hand and the menu in the other. The guy that was supposed to be behind the counter (he was on the other side leaning on it) looked out the window three times and saw me. One of the cooks ran past me twice to get an order to the Uber Eats motorcyclist (the order was wrong, they had to redo the order twice). No one came out to serve...