Restaurante Arrels — Restaurant in Sagunto

Quería comunicar diversos aspectos, tanto positivos como negativos: En cuanto a los puntos positivos mencionar que tanto la comida como el servicio fueron excelentes. En cuanto a los puntos negativos solo hay uno, que resultó en una experiencia bastante decepcionante. Resulta que yo había reservado hace como un mes para dos personas queriendo realizar el menú Llavor (45€) un sábado y la web me permitió hacerlo. La misma mañana de la reserva, menos de 4 horas antes de la hora (siendo este el tiempo límite de cancelación previa) me contactan desde el restaurante indicando que en mi reserva no había indicado ningún menú, a lo que respondo que queríamos el Llavor y me comentan que no puede tomarse dicho menú el fin de semana. Tras revisar la web y ver que esa información no aparece en ningún lugar lo comento y la persona me dice que aunque efectivamente esa información no aparece, al realizar la reserva solamente deja reservar el menú Saba (65€) o el menú Arrels (85€) pero que mi reserva no indica ningún menú, cosa que me pareció bastante extraño. A continuación, una persona por teléfono nos indica que si no es de nuestro agrado podemos cancelar la reserva, teniendo que pagar evidentemente los 20€ por comensal ya que quedaban menos de 4 horas. Es decir, haciéndonos elegir entre un menú más caro del que la web nos había dejado reservar o perdiendo 20€. Sintiéndonos ya algo molestos ya que nuestra intención era ir, habíamos seguido las instrucciones de reserva de la web y no aparecía por ningún lado que el menú Llavor no pudiese tomarse en fin de semana, nuestra sorpresa viene cuando al llegar al restaurante, uno de los camareros nos dice lo siguiente: "He visto que en su reserva han indicado el menú Saba, es decir el intermedio. ¿Es así?¿Seguimos con el plan?" Con ello, daba a entender que había un menú superior y otro inferior. Como ya estábamos allí después de organizar el día en torno a dicha comida y habiendo conducido más de una hora para ir a Sagunto decidimos no decirle nada al camarero ya que tampoco iba a saber de la llamada que previamente habíamos recibido. Nuestra duda en ese momento fue la siguiente: Si se nos llama a menos de 4 horas de la reserva para confirmar un menú, ¿por qué ya en el restaurante se nos vuelve a pedir confirmación? ¿Hubiéramos podido cambiar al menú inferior o superior tal y como comentó el camarero? La verdad es que nos pareció una situación desagradable que no esperábamos de un restaurante de esta categoría. Por ello, sería conveniente que o se indicara la información pertinente en la web o no se pudiese realizar una reserva de fin de semana sin indicar un menú concreto, tal y como yo pude hacer. Con ello, sería también indicativo de buena actitud que si aparece algún "fallo" en la reserva se informe al comensal en el tiempo suficiente para poder realizar una modificación y no a última hora para que pueda elegir si seguir adelante con la reserva o no y no dándole dos opciones que en resumen ambas consisten en pagar...

Hoy traemos un lugar de esos en los que nos faltan líneas para expresar todo lo que sentimos al visitarlo.

Fuimos en Septiembre de 2018 y un 🔆 y una ⭐ después, por fin hemos vuelto a disfrutar de todo lo que nos ofrecen.

El local es sensacional, las antiguas caballerizas del palacio de los Duques de Gaeta del siglo XVI no dejan indiferente a nadie. Amplio, luminoso, muy cuidado y digno de observar.

Cocina mediterránea, de mercado, de temporada, productos de alta calidad y de proximidad, con muchos guiños a la huerta y el mar. Platos llenos de sabor, juegos de texturas, color, elegancia, frescura, combinaciones sorprendentes donde el equilibrio consigue que cada ingrediente tenga su protagonismo.

Elegimos el Menú Saba, 72€: Snacks, 6 Pases y 2 Postres. Vamos a por algunos de sus platos:

Mollejas con puré y chips de chirivía: es difícil escoger un plato cuando todos son tan diferentes entre sí y están tan ricos, pero quizás este se llevaría el platazo del día. Sabor intenso que te llena de recuerdos a cada bocado.

Cochinillo a baja temperatura durante 14 horas con chutney de manzana. Muy tierno por dentro, crujiente por fuera, explosión de sabores, un clásico que siempre alegra volver a comer.

Flor de calabacín con una tempura especial y fina, nos pareció una delicia.

Colirrábano con mousse de setas, el más sorprendente de los snacks por el contraste de texturas e intenso sabor.

Gazpacho de pepino y aguacate, muy refrescante, conforme se va comiendo, va sumando más puntos.

Los postres muy diferentes entre sí. El primero: cítrico, refrescante y ligero. El segundo para amantes del chocolate, en tres texturas y con un toque de café muy acertado. Nos encantaron los dos, final apoteósico.

Servicio amable, profesional, atento, simpático y explicando cada plato con mucha dedicación.

Como Historiadora del Arte poder comer esos platos que parecen pinturas al óleo en un local con tanta Historia es algo que llena el...

Beautiful authentic interior, thought out to the smallest detail. Here the contents of the dishes are not revealed in advance, leaving it a secret until the moment of serving, and this element of surprise gives the culinary journey a special appeal. Each dish was a pleasant surprise, making us enjoy not only the taste, but also the very process of discovering new gastronomic delights. The taste unfolded inside, like a palette of culinary shades, starting with delicate notes and ending with deep, rich chords, leaving an unforgettable aftertaste for a long time. Service at the highest level. The restaurant deserves the...