Caprice Crepería y heladería en Santander plaza de Atarrazanas — Restaurant in Santander

¡Bienvenidos al paraíso de los sabores en la Crepería Heladería "Caprice"! Este lugar es mucho más que una simple crepería, es un santuario para los amantes de los postres que buscan experiencias divinas en cada bocado.

Desde el momento en que entras, te envuelve un aroma celestial que despierta tus sentidos y te transporta a un mundo de delicias culinarias. El ambiente es acogedor y encantador, con una decoración que te hace sentir como si estuvieras en una pequeña nube de felicidad.

Pero lo que realmente hace que "Caprice " sea único es su increíble variedad de crepes y helados. Cada crepe es una obra maestra cuidadosamente elaborada, rellena con ingredientes frescos y sabrosos que te hacen saborear el cielo en cada mordisco. Ya sea que prefieras algo dulce como el clásico Nutella con plátano, o algo más sofisticado como el crepe de salmón ahumado con queso crema, hay algo para satisfacer todos los gustos.

Y no podemos olvidar hablar de sus helados artesanales, cremosos y llenos de sabor. Desde los clásicos como la vainilla y el chocolate hasta los más extravagantes como el helado de lavanda o el de jengibre, cada cucharada es como un regalo del cielo.

El servicio es impecable, con un personal amable y atento que te hace sentir como un verdadero rey o reina. Además, la presentación de los platos es simplemente impresionante, con cada crepe y helado adornado con cuidado y creatividad.

En resumen, si estás buscando una experiencia gastronómica celestial, no busques más allá de "Caprice". Es el lugar perfecto para deleitar tus papilas gustativas y satisfacer tus antojos más indulgentes. ¡Una visita aquí es como un viaje al...

Es la primera vez en mi vida que escribo una reseña, me gusta pensar que cuando algo me cuadra mal es fruto de la mala suerte y no de que haya alguien haciendo algo tan mal adrede (soy muy optimista o muy ingenuo, según se mire). Experiencia horrible con esta "gofrería". En un martes lluvioso de Santander y tras salir del oculista llevo a mis hijos a merendar un gofre a este lugar. Lo primero hay 4 o 5 mesas con sus respectivas mesas pero tan solo una sombrilla que, como fuimos los primeros, nos correspondió a nosotros (el resto de gente se mojó).Los gofres no eran ninguna maravilla, industriales nada artesanal; el batido de mantecado tenía poco mantecado y más de la mitad de nata de bote, por supuesto; el precio más bien caro y, lo que fue lo peor, tras acabar los gofres me entra sed y le pido un vaso de agua a lo que me dice que no puede servírmelo porque tiene los vasos contados y no es la dueña. Me quedo a cuadros y le digo que tienen la obligación legal de dar agua a un cliente, desde Julio de 2022 para ser exactos. Me responde que lo sabe pero que no puede hacer nada porque no es la jefa. Lástima que me quedé tan petrificado ante la situación que no caí en pedir la hoja de reclamaciones, aunque seguro que hubiese valido de poco, y que luego teníamos visita médica y no tuve la oportunidad de pasar por comisaría a denunciarlo, que igual si hubiese válido de más. Encima, yendo hacia el médico (cerca del Río de la Pila) vimos una gofrería en local cubierto y calentito, gofres más baratos y con...

Visitar Caprice fue toda una experiencia deliciosa de principio a fin. El local, situado en la acogedora Plaza de Atarazanas nº 2, tiene un encanto especial: ubicación céntrica, ambiente cálido, y con las ventanas a la plaza lo que permite disfrutar no solo del dulce sino también del paseo de Santander.

🍽️ Lo que más me gustó

Variedad: Hay muchísimas opciones. Crepes dulces y salados, gofres, batidos, helados enormes… cada vez que voy acabo descubriendo algo nuevo que probar.

Calidad: Tanto el helado como las crepes estaban en su punto: textura buenísima, sabores auténticos, todo muy fresco. No se nota nada artificial.

Servicio: El trato fue amable, cercano y con una sonrisa. Los pedidos los preparan bastante rápido, sin largas esperas, lo cual se agradece si solo quieres un capricho para después del paseo.

Relación calidad-precio: Aunque no sea lo más barato de Santander, lo que pagas lo merece: tamaño, calidad, ambiente… Está más que justificado.

🔍 Un par de detalles a considerar

En momentos de mucha afluencia, puede costar encontrar sitio cómodo, ya que es un local bastante popular.

Algunas personas comentan que en ciertos turnos la atención puede variar ligeramente, quizá dependiendo del número de clientes.

✅ En resumen

Caprice es uno de esos sitios que recomendaría sin dudar, tanto para una tarde de helado en buena compañía como para matar el antojo dulce. Todo lo que probé estaba rico, el ambiente es agradable y el servicio eficiente....