Acudimos al Marisol llevados por las buenas opiniones, a sabiendas de que era un establecimiento económico donde el ambiente y el mobiliario estaban anticuados. Pero se supone que tienen un buen menú y que para ellos la prioridad es dar una buena comida. No fue exactamente así.
Solo hay un menú que te canta el camarero. No está escrito en ningún sitio ni sabes el precio. Esto último no fue un problema, 13€ por comensal en un lunes de julio es razonable. Lo del menú cantado sí lo fue, más adelante lo explico.
Las opciones del menú son más bien escasas. 4 primeros, 3 segundos y 4 postres. Postes que eran melón, helado, yogur y la última porción de tarta que quedaba. Las cantidades muy justitas, suficientes para nuestro caso pero muy escasas para lo habitual en Asturias. Un plato de sardinas en el que te ponen nada más que 2 sardinas me parece escaso. Pero en fin, no me quejo, es un menú barato.
Había visto fotos y comentarios de la fabada, así que iba con la ilusión de comerme una buena fabada, aunque fuera un plato pequeñito. Pero en el menú que me cantó el camarero no había fabada. Mala suerte, pensé, a lo mejor no la hay todos los días. Tomé un salmorejo que estaba bueno, exactamente igual que el que hago yo en casa con la receta de la thermomix.
Durante la comida me llamó la atención que en nuestra mesa pusieron un pan de barra muy normalito y un poco chicloso, mientras que en otras mesas, anteriores y posteriores a la nuestra, se sirvió un pan de hogaza de aspecto mucho más sugerente. ¿Mala suerte de nuevo?
La cosa se torció definitivamente cuando estábamos terminando y escuché como le cantaban el menú a una mesa recién llegada. De repente, había fabada de primero. Y de segundo, además de sardinas, había bonito, y en dos preparaciones distintas. No daba crédito. Fabada y bonito, lo que más me habría gustado comer. Para mí no lo hubo, pero para el que vino después sí. Y eran turistas como nosotros que parecía que acudían al Marisol por primera vez. ¿Habíamos ofendido al camarero de alguna manera y nos lo estaba haciendo pagar no ofreciendo los mejores platos?
Tuve que ver como el comensal de al lado se servía dos platos colmados de fabes y como se las comía como si no hubiera un mañana, porque con la fabada no hay escasez en el Marisol. Si tienes la suerte de que te la ofrezcan, claro.
Sé que debí preguntárselo al camarero antes de relatarlo aquí. ¿Por qué no nos ofreció los mismos platos y nos puso el peor pan? Fuimos amables con él, y él lo fue con nosotros. Pero yo solo quería irme de allí cuanto antes, y cualquier explicación del camarero no iba a arreglar el agravio porque ya habíamos comido.
Todo esto se resume en que lo que parecía mala suerte fue un trato discriminatorio. Y ni siquiera se me ocurre una explicación. Lo que habría sido una comida normal, nada del otro mundo pero barata, se convirtió en una especie de insulto, y por eso motivo no puedo dar más de...
Read moreNice people but maybe we came too late in the day. The menu del Dia soup was cold, and options very limited for the same price. Atmosphere was interesting in that they showcased historical artifacts like clocks 🕰️ which were beautiful, but they need to update the room and restaurant as a whole. Ceiling needed maintenance, both painting, and to assess whether there was mold behind the walls. It was very uncomfortable to eat knowing dust and debris was everywhere. We didn’t see other places to eat in the town for lunch since Spain usually offers it till 3:30 at the latest. They did try to help as much as they could and that’s appreciated, but a much needed update would...
Read more10 days between Asturias and Galicia and our meal here has been one of the best. Fabada was absolutely delicious and the portion very generous. All the rest of dishes were simple but very tasty, just as real comida casera should be ! Astonished by the cheap price we paid. Worth to mention the old vintage charm of the dining room and the professional friendliness of the owner. I’m just glad we found this...
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