The Black Turtle - Arena — Restaurant in Valencia

Me asomo a la puerta, veo que hay un tercio de las mesas libres, decidimos entrar a comer mi mujer y yo. Digo: hola, para comer dos..... y aún no he terminado la frase y la respuesta de la camarera es "sí se quedan a comer, al menos 15 o 20 minutos deberán esperar". Así es como te reciben. Son las 15:10. Así que decidimos quedarnos igualmente. Pedimos dos hamburguesas, no preguntan punto de la carne. A mi me gusta al punto, a mi mujer muy hecha... pues la mia estaba carbonizada y la de mi mujer cruda, pero cruda cruda que pensábamos que en cualquier momento volvía a la vida. Visto que el personal es desagradable, que no miran a las mesas para evitar que alguien les levante la mano, mi mujer decide no disfrutar de la comida y comerse la carne cruda. por cierto, las patatas se color verde oscuro, el papel de debajo empapado de aceite. Un horror. Pensamos compensarlo con una postre a ver si tenemos más suerte. Al pedir el postre de la cookie caliente, nos dicen que "la cocina está cerrada y que sólo hay tarta de queso". Cómo? Le digo que la cocina se cierra para los nuevos comensales pero que quien ya está dentro debe de poder pedir hasta el postre, y luego la cierras. Es de Hostelería primer curso. Pido hablar con la persona encargada. Viene con cara de pocos amigos a la voz de 'qué pasa?' le explico lo del punto de la carne...el aceite de las patatas... y lo de que me parece mal que sólo podamos escoger un postre de la carta, que no sé le puede decir a un cliente, que además acepta el retraso para comer, que no le sirves un postre porque la cocina está cerrada. La respuesta de la encargada, sorprendentemente, es que llevan una semana muy loca porque es la semana de reyes y que el género "nosequé"....y acaba preguntando si queremos la tarta de queso. Decimos que no, que traigan la cuenta y ¿creéis que nos descontaron aunque fuese una Coca-Cola por tener un gesto con nosotros? pues no. Pago, decimos adiós, ni nos miran ni responden. Ir a comer aquí es porque no hay otro sitio en 50km, porque tenéis un estómago realmente duro y no valoráis más que llenar el buche o porque vuestra sobrina es la camarera y ya que váis a verla, coméis algo. Si no es así, no veo motivo ni para pasar cerca y oler el aceite requemado de...

Por dónde empezar? Un miércoles 19 estábamos en casa en calentitos, nos apetecía comer algo tranquilos con el pijama puesto y ver un rato la TV y se nos ocurrió pedir a este restaurante, un error fatal! Pedimos dos hamburguesas, yo que soy alérgica a la cebolla y pepinillos pedí y especifiqué que soy alérgica y que no podía comer (como viene detallado en el ticket de la foto adjunta a esta reseña) y mi marido pidió una clásica al punto.

Total que al llegar el repartidor nos aseguró que lo había preguntado en el restaurante y que le habían asegurado que no llevaba nada de lo citado, cuál es nuestra sorpresa que al sentarnos a comer si no me llego a dar cuenta, ahora mismo estaría en el hospital!

Ahí no acaba la cosa, la hamburguesa de mi marido estaba como una suela de zapato, intentamos llamar en varias ocasiones al establecimiento pero se “colgaba” el teléfono cada 3 segundos de llamada en los que el camarero nos decía que tendríamos que ir nosotros a que nos cambien la hamburguesa! Que poca vergüenza, si pido yo y el error es de ellos.. me tengo que hacer cargo yo!!

No pasa nada, nos dirigimos allí y lo único que eran capaces de decir eran excusas, el chico que tenían cara al público no llevaba ni un mes y no sabía qué decirnos, el “encargado” de cocina no fue capaz de salir a dar la cara cuando quisimos hablar con él pero, sabéis la mejor parte? La hamburguesa que nos llevamos de mi marido era igual o peor que la que entregamos, fácilmente se te podía caer un diente por el bacon.

Me podéis decir cómo es posible que un cocinero que solo ha atendido 8 clientes en toda la noche no sea capaz de hacer bien 4 hamburguesas?? Las fotos del local vacío demuestran que no tenían nada que hacer y para algo que tenían que repetir para arreglar.. ni para eso fueron capaces.

No recomiendo a nadie este restaurante, la atención es pésima, la preocupación por la satisfacción del cliente es nula y la calidad de la comida...

Siento tener que poner esta reseña pero es que no es para más, llegamos alli la atención al cliente bastante bien, el problema viene cuando de 3 platos que hemos recibido , de 2 teniamos queja. Primeramente, nos llega la tabla de entrantes , con los fingers de pollo casi quemados, porque muchos tenian hasta el rebozado en muchas zonas negro, teniendo en cuenta que cuando pasa eso puede tener acrilamidas si se cocina mucha, y puede ser perjudicial para la salud. Total que nos dijirimos a decirselo al camarero y el como también lo ve un poco raro pregunta a la que supongo que seria la encargada en ese momento que nos responde con la friolera respuesta de “es que al ser pollo hay que hacerlo mucho” cuando literalmente habia zonas que estaban negros. Y posteriormente antes de acabar la comida, vemos pasar otro plato de tabla de entrantes que no estaba como los nuestros, asi que no todos los hacian asi.Anteriormente nos dimos cuenta que las patatas de la hamburguesa y del wrap llevaban mucha sal que casi ni se podian comer. Y por si fuera poco cuando nos llega un wrap, con la lechuga que podria decir que estaba caducada, procedemos a decirselo a la camarera que nos recoge los platos ( una chica de gafas muy maja), y claramente se queda perpleja al verlo, ya que se podia observar que era lechuga en mal estado, y se nos quitaron las ganas de seguir comiendolo, porque la mayoría estaba asi, total la chica se lleva los platos y lo comenta en cocina y supongo que a la encargada también, vuelve la camarera y nos dice que por el mal trago nos dan un café de cortesia (Que menos la verdad). El trato al cliente por parte de los camareros fue bueno, pero dudo que volvamos.Adjuntaria fotos de la lechuga, pero no se cono se pone, si la quieren pueden pedirmela por correo,...