No voy a valorar la calidad del producto, seguro que sera bueno y no es lo que quiero comentar, la atención del personal estuvo bien. Pedimos un par de zamburiñas. Para nuestra sorpresa la cocinera que estaba en barra tocando el alimento con la mano desnuda, la carne de la zamburiña las toco con las uñas y la saco con la mano en la plancha, unas uñas lo suficientemente largas como para tocar el alimento, un guante en la mano izquierda y la mano dcha sin guante. Estaba haciendo tb unas unas gambas con la base de sal, al ladito unos trozos de carne para una tapa. Las gambas también dando la vuelta tocando con las manos desnudas, que por cierto previamente habia tocado el mango de la espatula, platos, cubiertos... Espatulas, pinzas y mano tocaban todo por igual, da igual carne que marisco y mira que he trabajado en la hosteleria muchos años y eso es de primero de carrera🤦🏽 para no mezclar sabores... Y el pelo?? que os parece el cabello de la cocinera??, que cabello tan bien cuidado, sin gorro y sin ninguna proteccion de cualquier pelo a la comida. Lo mas curioso del momento fue cuando se iba a limpiar las manos, no crean que con jabon y agua que sería lo normal, un trozo de papel y a seguir cocinando, eso si, después de tocar la caja, cambios etc para cobrar y volver a la plancha... Me parece una falta de higiene bastante considerable. De la zamburiña no hablamos, xq como es evidente acabaron en una servilleta y a la basura, pagamos y ya sabemos donde no volver.
CONTESTACIÓN AL ESCRITO DE SAPUTO: Evidentemente es duro y una pena que alguien pierda un familiar pero hacer de esto un tema sentimental me parece de no ser muy profesional. Que alguien, por desgracia, haya estado el día de antes en un entierro no quita para saber las normas para ponerse unos guantes para manipular y un gorro para cocinar, nada que ver sub comentario que yo esté juzgando, es demagogia barata lo que ha escrito. Y gracias, pero no volveremos, seguro que no será por restaurantes ni por...
Read moreCuando un restaurante lleva cuarenta años es que algo de valor atesora. Cuando has conocido la de hace cuarenta años y vuelves ahora, con el relevo generacional correspondiente, y observas que los valores de cuidada elección de producto, manipulación mínima del mismo y uso de la técnica correcta para la elaboración, te das cuenta de que el tiempo solo ha pasado de manera personal. Solo más viejos, hemos comido más y, seguramente, mejor pero cuando volvemos a los clásicos encontramos lo que esperamos: cálidad y satisfacción. De las mejores pijotas que he comido en Zaragoza, unas ostras frescas, tersas, crujientes. Unos salmonetes, de tamaño contenido y sabor inconmensurable. La gamba roja merecería un capítulo aparte. Si eres se ceviche debes probarlo, la leche de tigre, de textura salsa, debería ser una referencia. Todo lo comido de cálidad magnífica y precio contenido. Si a esto le sumas que se puede beber muy bien, solo me queda decirte ya estás tardando en...
Read moreThe food looked and tasted amazing! I think this is a very well kept secret as it was mostly locals, they know what is good and they obviously made their decision. The atmosphere was great, very lively and decent prices for the quality and...
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