Café La Hija del Jarocho — Restaurant in Mexico City

Came for a quick brunch before exploring Coayacan. They serve coffee, tortas, baguettes and “cuernito” which is a croissant with turkey and cheese. Coffee was a bit “soft”, but I’m a coffee lover so that makes a difference. Cuernito and baguette especial were good. They have some tables and chairs but you are basically sitting on the sidewalk. Overall is a good place for a quick bite/coffee. I tried with 2 different credit cards but the machine denied them. I think it’s the guy who doesn’t know how to operate the card reader or they did something to it. (He said it doesn’t take cards that are not from Mexico, first time...

En esta ocasión, la reseña es por la pésima actitud de los empleados, el café, panes, comida etcétera, normal. Resulta que después de retirarme del café, metros más adelante me percaté que no llevaba mi libro, regreso a preguntar a los demás consumidores y aprovecho para preguntar a los empleados si de casualidad alguna alma honesta se los dió por si preguntaban por él. Uno de los chicos me dijo que no lo habían entregado, di las gracias y al retirarme escucho claramente "pues aquí no es biblioteca", acto seguido regreso a preguntar que habían dicho, obviamente negaron las cosas, bueno, el hecho es que después de unos minutos de intentar aclarar la situación, les faltó valor para admitir su burla, incluso se negaron a llamarle al encargado para comentarle el hecho. Escribo esto porque creo que el éxito de un lugar, va más allá de la calidad de la comida, para mí, es fundamental el servicio al cliente, incluyendo el respeto y cordialidad. En ningún momento los hice responsables, solo pregunté si alguien lo había encomendado, por mera empatía y atención. En lo que a mí respecta, nunca regresó a lugares en los que no fui tratada cordialmente y con respeto, no importa que tan delicioso o bueno pueda ser, Café la hija del jarocho es uno de ellos, no está de más aclarar que los he visitado desde hace...

Pésimo servicio. Pedí un latte frío mitad leche y mitad café. Como estaba muy cargado, bebí un poco y regresé y le pedí "por favor" y de una manera muy amable al dependiente que si me podía poner un poco más de leche porque estaba muy fuerte. Inmediatamente, el tipo me empezó a decir en tono muy grosero: "Pues usted me lo pidió así!", a lo que le respondí que se calmara porque yo no le estaba reclamando nada, solamente le estaba pidiendo más leche y que si me la tenía que cobrar que me la cobrara. Entonces se acercó la dueña y me dijo que yo se lo había pedido así y le dije de nuevo que yo no estaba reclamando nada y que no quería tampoco nada gratis y que tengo un restaurante y yo nunca trato así a mis clientes, que yo quería leche en mi café y no que me estuvieran regañando.

Obviamente ya no disfruté mi café y quedé...