Los templarios Asador — Restaurant in Úbeda

Fuimos a cenar, pedimos varias raciones, entre ellas una ración de secreto. La ración era la de la foto, de vergüenza! Aparentemente la mitad de lo que debería de ser una escasa. Que haya mucha gente en el local no justifica que de una ración intente hacer tres. Pedimos explicaciones a los camareros y el resultado fue que la jefa/cocinera, después de escucharla gritar, refiriéndose despectivamente hacia nosotros, saliese con otro plato con un poco de carne, con malas formas y sin decir ni una palabra, para dejarlo encima de la mesa que, evidentemente, no aceptamos por las formas y el trato hacia nosotros. No recomiendo a nadie parar a este local. Eso si, no les vendría nada mal una visita...

Tardamos 2 horas y media para que nos pusieran dos cervezas y un tomate aliñado. Cuando preguntamos por lo demás nos ponen un entrecot muy muy hecho y duro, de mala calidad. Le decimos que se lo pedimos poco hecho, nos lo van a cambiar y nos ponen el flamenquín frío por dentro. Viendo que ya iban a ser 3 horas con comida a destiempo entre una y otra, mala calidad, sin hacernos caso y malas caras nos levantamos y lo comentamos educadamente y pedimos la cuenta sin esperar al entrecot. Nos cobraron 50€ por un flamenquín del tamaño de una croqueta, un tomate aliñado y 4 cervezas. Y encima la chica con mala formas. Nunca he escrito una reseña negativa pero la experiencia no...

Se catalogan como gastrobar, pero nada de eso. La comida mala, escasa, poco creativa. El menú cuesta 15 euros y el filete empanado recalentado, más tieso que una alpargata, incomestible. Le dijimos al camarero, que prácticamente no comí nada, que eso no se podía ni cortar. Ni una palabra. Ni traer otro en condiciones. Ni un mantel de papel te ponen en la mesa para almorzar, ni un cuchillo para partir el melón. Si que es cierto que no nos cobraron una cerveza,( todo un detalle teniendo en cuenta que ni pusimos una reclamación) para compensar, pero vamos, 30 euros pagamos por la mísera comida. Nada recomendable. Lo siento por el camarero, que no tendrá...