Restaurante Ambigú — Restaurant in Alcalá de Henares

Sunday night: I am on vacation in Alcalá from Australia and saw the michellin guide. this wonderful restaurant, when they were full, there were very few empty tables left, I am not a feminist but I like it. that you could see the kitchen and the chef was a woman. and still we were attended by the guy at the entrance very kindly seated us took note of the drink and then the letter and explained that they did not have certain dishes available, but Even so, he gave us options to share and best of all, we were able to communicate which, on this trip, we had lacked a place to speak to us in English. Starters: sardine toast and second: my husband ordered Iberian pork and I red tuna both dishes were recommended by the waiter, and finally we met another very friendly boy to ask us the desserts, which took a while because we were full! Caramelized Torrija to finish a spectacular dinner in Alcalá, I will recommend it to my...

¡TODO MAL! Siempre que acudo a comer a cualquier restaurante , me informo de los comentarios y opiniones que tiene para decidirme a la hora de elegir . De igual manera , me gusta compartir mi experiencia en dichos lugares , para así ayudar al resto . No me considero muy exigente ,ni muy sibarita a la hora de valorar , casi siempre destaco las cosas positivas , pero ayer sinceramente me sentí bastante defraudada. El lugar tiene un encanto peculiar , buena decoración y un ambiente agradable .Nada más llegar , nos sentaron y tomaron nota de las bebidas muy amablemente , al traernos las bebidas, mi copa estaba rota , algo que puede pasar en cualquier sitio. Solicité que me la cambiaran , pero la copa llegó muy tarde , al igual que las cartas, que tardaron más de veinte minutos en traernos y que no contaban con todos los platos disponibles , ya que cuatro de los entrantes se habían agotado . A pesar de que el comedor no estaba lleno , se veía bastante descontrol en el servicio y una sensación de agobio y poca coordinación entre los camareros y cocineros . Nos pidieron disculpas por la tardanza , ellos eran conscientes de que las cosas no iban bien . Por fin después de más de 45 minutos , llego uno de los platos , el huevo poché, muy bien explicado por el camarero , pero muy muy salado , una pena no poder saborear la trufa y el resto de ingredientes, luego llegaron el resto de platos , y la pluma ibérica llevaba de guarnición unas patatas que estaban aceitosas y duras como una piedra . Pedimos una botella de agua que tuvimos que volver a pedir otras dos veces más. En fin... lo más molesto de todo es ver y oír risas por parte de la cocinera y camareros , ella se olvido de algún ingrediente que el camarero le tuvo que recordar , el plato de la pluma lo quiso retirar de la balda de platos y finalmente entre risas lo volvió a dejar y nos lo sirvió. Todo el mundo puede tener un mal día , siempre se nos pueden olvidar cosas , pero cuando sabes que no estás dando un buen servicio , al menos intenta disimular o compensar ese déficit, y más cuando la gente ve perfectamente la cocina y la barra. Por suerte en Alcalá de Hernares existen muchos y muy buenos restaurantes , este era uno de ellos , pero yo...

Comida en pareja con altas expectativas, que realmente no se cumplieron. Servicio correcto y amable, pero cuando te traen la carta y está bastante manchada por los bordes, en un sitio de tikect medio-alto vas desconfiando, pedimos todo para compartir. Gyozas bien de sabor, carne buena, pero con una picada demasiado compacta no hace justicia a la calidad de la carne. La oreja buena, plato bien presentado y la guindilla le da un punto picante, pero para mí gusto y esto es personal, le falta un toque crujiente al exterior, la especie de regaña ponen como base no supplementa. Canelón de pollo, pues seguramente PQ se quedó más tiempo del debido antes de servirnos lo, salió frío, masa demasiado compacta sin apenas sabor y el crujiente venía ya reblandecido y gomoso por el tiempo que llevaba en contacto con la salsa, un despropósito. La camarera es de agradecer nos preguntó amablemente sinos servía otro plato al percatarse no comimos prácticamente nada del canelón, y rechazamos el ofrecimiento, aunque se valora Tampoco nos gustó que nos ofrecieron el lomo bajo maduración 30 días fuera de carta, lo pedimos y al rato nos dicen que no queda y debemos pedir otro plato, nuestra sorpresa viene cuando mesas que llegaron más tarde, se lo seguían ofreciendo y sirviendo, imaginamos que servir un lomo para compartir en una mesa de dos, no les es rentable y lo guardan para mesas de más comensales que necesiten más de un lomo por mesa ...... A mejorar, pides un vino, te ofrecen en tinto rivera o Rioja, pero aunque preguntes cómo fue nuestro caso,no te comentan si es cosecha o crianza, ni su nombre, y te lo sirven tapando la camarera casualmente la etiqueta para no ver...