Un estrés. Reservamos el día anterior para dos personas, esperando una cena romántica. Según llegamos nos advierten que a una hora determinada tenemos que desalojar la mesa, detalle de muy mal gusto ¿por qué no lo advierten cuando llamas para reservar? A continuación nos llevan a una mini mesa, o más bien la mesa de los pin y pon con sillas ídem de potro de tortura. La mesa tiene más patas que espacio para platos... Digo que por favor por lo menos nos cambien las sillas ya que es insoportable el dolor de espalda. La camarera me contesta que "va a preguntar si puede"y nos quiere tomar nota de la bebida. Yo le digo que sólo si nos cambian las sillas, nos quedamos y que la bebida ya si eso, después. Nos cambia de mesa a otra con cero intimidad y algo más cómoda pero... Entonces toman nota de la bebida, nos la traen y después el primer plato compartido. Antes de terminar el plato compartido, llega el camarero y con mucha amabilidad nos pregunta qué tal la comida, después el siguiente... Antes de terminar lo que yo tenía en el plato, ya se había llevado el plato a mi pareja. El camarero marca el tiempo, eso si, disfrazado de "gran amabilidad". Total que no te da tiempo ni a saborear ni a hablar tranquilamente con tu acompañante porque te están interrumpiendo constantemente hasta que "te vas". La comida está bien aunque escasa y precios normales teniendo en cuenta que es cocina exótica y elaborada, pero no se disfruta por el estrés al que te someten los camareros y lo incómodo que es el sitio. Bonito pero incómodo. Conclusión: es una incoherencia de sitio ya que la decoración elegante y acogedora choca con la incomodez de las mesas y sillas y las prisas de los camareros para que termines cuanto antes y lleguen los siguientes. Se nota y demasiado que lo más importante es "hacer caja". Es una pena. No volveré. Cuando reservas en un sitio así, esperas algo romántico, clima tranquilo y acogedor. No que te...
Read moreExcelente restaurante asiático pero con esencia propia, dándole a todo un toque personal. Nada más entrar lo primero que te llama la atención es la increíble decoración. Ponen tanto énfasis en esto que tienen su propia zona de muestrario con vajilla y cubertería que venden de diseños bastante bonitos, y precio no apto para todos los bolsillos.
Una vez en la mesa no tardan mucho en servirte, en nuestro caso una serie de platos para degustar y cuya presentación era exquisita, tanto como el delicado sabor de cada plato. Una experiencia muy buena. Absolutamente ninguna pega, si acaso la cantidad, pues solo los platos de arroz nos pareció que tenían una cantidad decente, lo demás, como todos los restaurantes modernos de hoy en día: cada plato cuatro cositas mal contadas que si te pides ese plato para ti vas a acabar con más hambre que un zorro del desierto. Tampoco les preocupa poner al menos cantidad suficiente para repartir entre los que somos y juegan con el típico número impar para que pidamos más. Fuimos por el cumpleaños del suegro y tras dejarnos 120 y pico eurazos, se pidió dar una sorpresa con una bolita de helado con bengalita al cumpleañero y no tuvieron el detalle de al menos eso invitarlo.
He tratado de decir tanto lo bueno como lo no tan bueno porque intento hacer una reseña justa.
En definitiva: un lugar espectacular al que pese a los inconvenientes, volvería, pero cuando tenga el dinero por castigo debido a...
Read moreFor us the main motivation to visit this restaurant was its ambiance. It has a very nice decoration. Personally I am not a hardcore sushi person, therefore I am not very pretentious about my assessment. Anyway, I think I have eaten better sushis at several different places. But this does not mean their sushis are bad. Service was unexpectedly fast and overall quality is good. Prices are not low but fair for a sushi restaurant. Definitely it is a...
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