Una negligencia de los dueños en cuanto a la organización! No volveremos a ir otra vez.
Fuimos el día 14.02.2018 a comer cinco personas. Llegamos a las 14:00 y salimos a las 16:45 del restaurante.
Estuvimos esperando un entrante una hora y media, el cuál al final no llegó y en la cuenta lo cobraron. Tras reclamar y esperar 10 minutos lo quitaron de la cuenta. Nos quitaron los platos del entrante para ponernos el primer plato y al entrar el camarero en la cocina dió la orden de nuestra mesa para que empezaran a cocinar el plato principal... Tras preguntar al camarero si acababa de pedirlos, nos contestó: "que va, llevan ya un rato pedidos" y se rió. El plato principal fue servido a las 16:00. No llegaron todos a la vez, sino cada plato por separado y con diferencia de 5 minutos largos. Todas las mesas estaban igual que nosotros. Incluso hubo una mesa de cinco que se fueron ya que no los atendían. Ellos llegaron, les pusieron pan y los dejaron con la carta una hora esperando. En otras mesas, se levantaba alguien a la barra para pedir su bebida o para llevarla ellos mismos. Incluso nosotros llamamos varias veces a los camareros para pedir algo y ninguno miraba. Uno pasó al lado de nuestra mesa y su contestación con muy mal tono fué: "sí, sí". (como diciendo cállate). Éste no volvió a pasar por nuestra mesa más hasta que nos fuimos. Al pedir la cuenta nos invitaron a unos chupitos por la tardanza. Los que nos trajeron fueron distintos a los pedidos, el argumento fue que supuestamente los que nos traían estaban más buenos. No dijimos nada porque no queríamos esperar más.
La comida estaba buena. Sólo hubo un plato que no nos gustó: la lasaña. La salsa bechamel olía que tiraba para atrás y no estaba bien hecha.
El cuarto de baño de mujeres estaba muy sucio. Uno de los grifos roto. Las rejillas de ventilación del baño llenas de pelusas y polvo, daba mucho asco mirar hacia arriba y ver eso!
En definitiva una pena. Somos de Granada y hemos ido al restaurante muchas veces. Llevábamos sin ir un tiempo y parece que han cambiado de dueños o algo, pero el restaurante ya no...
Read moreUna desilusión
Me siento profundamente decepcionada con el trato de parte del equipo del Kudamm Edel, éramos 4 comensales, y pedimos 4 bebidas y encargamos la comida, lo que empezó por pequeños despistes (se les olvidó traer el pan con mantequilla ).Solicitamos 1 vaso de agua para un de los comensales pero decían que no podían servir agua porque no podían responsabilizarse por la calidad de agua de Granada..... La excusa era un gilipollez claro. Luego al recalcar que nosotros si confiamos en la calidad del agua de la ayuntamiento de Granada , inventaron otro excusa diciendo que pasaba si todo el mundo solo iban a pedir agua de grifo....? Nosotros nos defendimos diciendo que eramos 4 personas y los 4 habíamos pedido una bebida y el vaso de agua meramente era para saciar la sed de uno de los comensales antes de tomar su cerveza ( para no tragarlo de golpe.) Después decían que si trajesen el agua tendríamos que entender que nos iban a cobrar un servicio de pan extra....... vamos el FOLLÓN que montaron para 1 vaso de agua lo querían cobrar sea como sea.
Más tarde, me sentí ofendida por comentarios del camarero como "pues esto ya te lo comes..." (como respuesta por habernos traído varias veces el plato que no había pedido y por tanto no quería comer, tan solo solicitaba que me trajeran mi petición inicial) o por comentarios del maître con tono ofensivo y amenazante como "pues a ver ahora que vas a decir tu....".
Después del incidente del agua había una cadena de situaciones desagradables, de olvidar traer platos, de traer platos erróneos y cobrar cosas que no habían servido en la cuenta final.
El Kudamm Edel sobrevive por la fama que creo Manuel Osuna y su mujer hace años. Desgraciadamente ahí ya no saben tratar los clientes con educación...
Read moreKudamm ha sigo un restaurante referente en Granada durante años, con una magnífica gastronomía Alemana y buen servicio, recuerdo a un señor veterano, que era fantástico profesional. Lo de hoy ha sido para nosotros una mala experiencia. Para empezar un camarero superado por las circunstancias (con 3 mesas), agobiado que sirve una cerveza caliente y sin gas, se le indica y después de pedirle una botella de vino, la pone igualmente caliente y nos dice que esperemos a que se enfríe (con un manguito sin helar), empieza a explicarnos que las neveras estan rotas y no viene el del seguro y por eso todo está caliente. Finalmente pone una cubitera tarde, porque tampoco le llega el hielo, justo final del segundo plato, para el postre. Por otro lado comida de baja calidad, un bacalao seco, carne sin sabor, servicio malo y sin profesionalidad. No tiene el detalle de no cobrar ni una cerveza, que reconoce en mal estado y nos dice que espera que repitamos otro día. Evidentemente no volveremos más a ese restaurante y eso que fuimos cliente fieles. Lo elegimos para celebrar nuestro aniversario y nos amargaron el día. Gracias por todo, por lo menos que sirva esta referencia para futuros clientes. Añado reseña a su valoración: No dije nada de toda la vida, dije que fuimos clientes fieles y me pregunto que tendrá ver usar un cupón, acaso eso ya no es ser calientes? Lo que sí está claro es que no responde a ninguno de todos los problemas, por cierto la mesa de al lado, que tambien le pusieron una copa de vino caliente, tuvo que pedir hielo y un poco de gaseosa de limón para intentar salvar el problema. Pero adelante, sigan con el detalle si soy...
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