Sibuya Urban Sushi Bar — Restaurant in Las Rozas de Madrid

Hemos ido 3 personas a cenar. La temperatura del local no era la adecuada, pese a estar en agosto, hemos pasado muchísimo frío. El servicio ha sido pésimo, hemos pedido 6 platos y pese a estar allí casi una hora y media, no nos han puesto nada más que tres. Después de esperar unos 45 minutos desde que nos llevaron el último plato sin recibir ningún tipo de explicación por parte de ningún camarero ni responsable del local, hemos ido a la barra a pedir una botella de agua y a preguntar qué pasaba con el resto de platos. Nos han llevado la botella de agua sin ningún vaso, hemos tenido que pedir los vasos de segundas porque no nos los traían y no nos los han llevado después tampoco. Tras esperar otros 15 minutos nos hemos levantado para pedir la cuenta y nuestra sorpresa es que nos querían cobrar también los 3 platos que no nos habían servido, cosa que no hemos permitido. Les hemos dicho que no íbamos a pagar por algo que no nos habían servido y, sin recibir ningún tipo de explicación por su parte, nos han cobrado lo consumido y nos hemos ido. Soy cliente habitual de los restaurantes Sibuya y jamás me ha pasado nada igual. El restaurante no estaba lleno ni mucho menos así que no entiendo el pésimo servicio. Si han tenido algún tipo de problema en la cocina o donde sea deberían haber ido por las mesas informando a los clientes sobre lo ocurrido, dando una solución si disponían de ella y pidiendo disculpas, pero no ha ocurrido, si no nos llegamos a levantar no sé si aún seguiríamos allí esperando sin recibir ningún tipo de explicación. Tenía que salir de viaje sino, habría puesto una reclamación allí mismo, cosa que no descarto porque me he traído...

Cocina elaborada y sabrosa, con atención a los detalles en el emplatado. Raciones generosas, servidas con agilidad. Magnífico servicio por parte de Sebas, que cuidó de nosotros en todo momento con gran profesionalidad y cercanía. La decoración muy cálida e inmersiva, con buen juego de luces indirectas. Un único "pero", motivo de mi calificación de 3 estrellas solamente en el apartado "ambiente" y no 5 como en comida y servicio: la puerta de acceso al restaurante es corredera con sensor de movimiento y se abre constantemente cada vez que el personal pasa cerca para llevar las comandas a los clientes, de modo que el frío del exterior está entrando permanentemente, haciendo inviable que la calefacción pueda ajustar adecuadamente la temperatura del local en la zona próxima a la puerta, como fue nuestro caso. Adicionalmente, incluso estando cerrada, la puerta corredera deja un hueco importante con el marco, permitiendo la entrada de aire frío al local en todo momento. Por el contrario, a pesar de haber espacio, pues el acceso se realiza a través de un corto pasillo distribuidor, sorprendentemente no hay puerta de separación con el exterior que preceda a la de acceso al interior y evite la entrada directa de aire frío o lo secuestre en este espacio. Sugeriría que la puerta interior fuese abatible manual y que se emplazase una primera puerta de separación con el exterior. Por lo demás, un restaurante estupendo con magnífica cocina, servicio y decoración, que sin duda volveremos a visitar con frecuencia, también en invierno confiando en que resolverán el asunto del aislamiento térmico x...

Llevamos una hora y media esperando a que nos traigan la comida. Nos hemos sentado a las 21:45, nada mas sentarnos nos dicen que no podemos pedir porque estan con los pedidos de delivery, esperamos unos 20-25 minutos y por fin podemos pedir. A los 20 minutos nos traen un plato. Les decimos 20 minutos despues que por qué el resto de mesas tienen platos y nosotras una. Nos dicen que tienen la maquina de arroz rota, que estan haciendolo todo a mano. Les decimos que cuanto van a tardar, nos dicen que no saben. Seguimos aun esperando 20 minutos despues y no hacen mas que ir de un lado a otro y llevando platos a otras mesas, incluso de sushi, pero a nosotras nada. Lamentable, vaya perdida de tiempo y de dinero, no vengáis, o bien falta personal y no dan a basto o realmente no saben gestionar las comandas y los pedidos hasta tal punto de hacer que nos queramos ir una hora y media despues sin cenar y sin explicación. Yo tambien trabajo de cara al publico y se lo valioso que es el tiempo de la gente y el dinero, pero reírse en la cara de la gente es otra historia. No doy estrellas negativas porque google no me deja.

Edito: el encargado ha sido encantador y nos ha pedido disculpas, las hemos aceptado pero la experiencia ya ha sido mala en general, aun asi entendemos que esto es un problema de arriba y no precisamente de los...