VIPS — Restaurant in Madrid

Lamentablemente ha sido el peor día en cuanto a la comida, rapidez, limpieza, y atención. Eran las 13:30h, sólo había 4 mesas ocupadas de 1 o 2 comensales, local prácticamente vacío y tardaron en tomarnos nota, nos atiende Enma, que no tenía claro el menú del día, ni el acompañamiento de los platos y tuvo que ir varias veces a preguntar, estaba discutiendo sobre su jornada laboral con el encargado delante de nuestra mesa, escuchando su conversación inadecuada delante de los clientes, mientras se escuchaban y veíamos continuamente el jolgorio y las risas en alto de las cocineras, ya que la cocina está a la vista de la sala.

Como se puede ver en las fotos, la capa de arriba era el arroz que estaba muy duro y seco, era lo pegado del fondo de la olla, era imposible masticarlo, de tomate sólo una cucharada para tanto arroz, el plátano un trozo ridículo y súper aceitoso, el huevo frito pasado sin yema, y todo el plato frío por completo. Frío frío no templado. El salmón a la plancha seco, muy pasado, se hacía"bola" al masticar, véase la foto, los laterales del salmón no se pudieron comer, y el arroz que lo acompaña durísimo. Sirvieron los primeros platos de 2 menús pero la hamburguesa que pedimos a parte tardó 25 minutos en llegar, haciendo esperar al comensal mientras los demás comíamos para que no se nos enfriase aún más si cabe nuestros platos, la hamburguesa estaba en la barra de la cocina hacía tiempo pero nadie nos la servía con lo cuál llegó fría, la pedimos al punto y estaba muy hecha, más bien seca. El huevo de la hamburguesa del menú también llegó sin yema y casi quemado, ver fotos. Además sirvieron los segundos antes de acabar con los primeros, con lo cuál también se quedaron fríos los segundos. Un desastre de organización entre cocina y sala. Al expresar nuestro descontento con la comida, el tiempo de espera y la organización nos dice la camarera Enma que allí cada semana cambian de personal. Lo más inaceptable fue el estado de los servicios. Ver fotos (ojo! no aptas para personas sensibles, ni para el resto tampoco diría yo...) Repito que eran las 13:30h el local acababa de abrir y se vé claramente que no se limpiaron los servicios antes de abrir. El servicio de señoras con la taza entera salpicada de excrementos, papeles y demás objetos de higiene femenina tirados, suelo pegajoso, el lavabo con restos de comida y pelos, no había papel y fuí a buscarlo al baño de discapacitados que estaba aún peor de suciedad, no había jabón en ninguna de las jaboneras. La segunda vez que entro al baño, me encuentro con la camarera de la barra que sirven postres y bebidas, cogiendo una bola de papel higiénico y pasándola por la taza del váter, sin guantes, sin ningún producto desinfectante, sin bayeta, sólo una bola de papel para "limpiar" la taza. Después salió de los servicios y se fue de nuevo a la barra a preparar nuestros postres, espero que se lavara las manos porque no daban crédito mis ojos! Lo único correcto fue el postre, aunque que ya me lo comí sin ganas después de ver que lo preparó la camarera de la barra que vi limpiando el váter.

El encargado no paraba de repetir "las reseñas, miramos reseñas, las reseñas..." Metiendo bastante presión al personal, se notaba que no había un ambiente laboral agradable, malas caras y ni una sonrisa, eso repercute negativamente en la atención al cliente y si encima sirven la comida tarde, mal cocinada y fría, y ves los servicios así, se te quitan las ganas de volver, con la ilusión que nos hace tener un Vips en Plaza Río, con lo bien que atendían y comida riquísima y abundante cuando lo abrieron. La camarera que más se movía sin parar en la sala era una chica rubia con trenza larga, que ya nos ha atendido varias veces y su atención es de +10. Al igual que cuando abrieron pusimos reseñas excelentes como agradecimiento, también se ponen las reseñas negativas pero constructivas para que se mejoren éstos aspectos ya que nos gustaría seguir comiendo allí sin que salgamos desilusionados por completo por pagar un...

Hoy, el Vips Madre Río vivió un día lleno de emociones y nostalgia, ya que fue el último de Patricia, quien durante años ha sido el alma del lugar como jefa del restaurante. Desde el momento en que cruzamos la puerta, el ambiente ya se sentía diferente, con una energía especial que reflejaba el cariño y respeto que todos tenían por ella.

El Vips, como siempre, ofreció una experiencia culinaria excepcional. Los platos fueron servidos con la calidad y el toque característico de esta cadena, que se ha ganado la confianza de todos los comensales. Los favoritos del menú, desde las deliciosas ensaladas hasta los jugosos cortes de carne y las opciones vegetarianas, siguieron siendo un deleite al paladar.

Sin embargo, lo que realmente marcó este día fue la presencia de Patricia. Su calidez, dedicación y atención al detalle eran palpables en cada rincón del restaurante. No solo era la jefa, sino el motor que mantenía a todos los empleados unidos y motivados, creando un ambiente de trabajo armonioso que se reflejaba en el trato hacia los clientes.

Hoy, más que nunca, la despedida de Patricia no pasó desapercibida. Los comensales y el personal compartieron abrazos y palabras de gratitud, celebrando su legado y todo lo que aportó durante su tiempo al mando. El Vips Madre Río se despide de ella con la promesa de mantener ese espíritu de excelencia y calidez que ella cultivó.

No solo fue un último día de trabajo para Patricia; fue una celebración de todo lo que ella significó para todos los que tuvimos la suerte de conocerla. La despedida estuvo llena de risas, recuerdos y un reconocimiento a una líder excepcional. Patricia, sin duda, dejará un vacío que será difícil de llenar, pero su huella permanecerá siempre en el corazón de este...

He ido a cenar hoy con amigos.. y esto ha sido una vergüenza la encargada una mal educada del turno de noche y el otro encargado igual.. la gente va a comer a cenar tranquilamente no ah que vayan los camareros y metan prisa y te lleven la cuenta sin haber sacado los platos pedidos.. En toda la hostelería llevan primeros las bebidas y luego la comida esto es al revés nos hacen esperar una colas cuando la terraza la tenían vacía… tengo las pruebas de la hora de la cola y de las mesas vacías no entiendo como el dueño de hay puede tener de encargados a estos dos personajes… unos mal educados que se creen superior a los clientes y camareros vergüenza debería de darles. Eh pedido 3 hamburguesas y las cocineras que también pésimo su trabajo nos dan unas hamburguesas quemadas… no pude sacarle la foto por que se lo lleve a quejarme de que estaban quemadas y luego resulta que sale el camarero y dice que me devuelve el dinero… esto es una vergüenza que cene solamente dos persona y las otras dos se quedan sin cena por que su cocina ya estaba cerrada de verdad que es una vergüenza… eh pedido un combo y sin guacamole sin nada todo frío y pagar para que ? Para que tengan un sueldo unas personas que no se merecen ni el sueldo sinverguenzas. No servían bebidas a partir de las 11 me traen el postre del niño derretido que ni se lo comió. Me gustaría que el jefe tome nota a esto y que se ponga estricto con los empleados que tiene. Es una pena que una restauración sonada como esta tenga de empleados a unos vagos. Demasiada mala organización de atención al público y comida. Mejor está el de...