Food and service are top notch at this local favorite, but if you’re there on a busy night it gets really loud inside. It’s a good place for trying typical Murcian foods— they have marinera, zarangollo, pisto murciano, and grilled potatoes with alioli.
We ordered caballitos (beer-battered prawns), croquetas, verduras a la plancha (grilled veggies), huevos rotos (potatoes with jamón and egg), and entrecot to share. We also had some jars of beer for everyone.
Affordable prices, great food, Murcia staple. Be sure to check out my Instagram for more...
Read moreDespués de muchos años volvimos al Palomo y ya de entrada, cuando no vimos cola para reservar mesa nos extrañó . La experiencia fue de total decepción , pedimos un plato al centro ( según carta) de huevos rotos, con jamón y pimientos de Padrón pensando que al ser central estaría bien para cuatro personas pero cual fue la sorpresa cuándo vimos el plato… el plato era un plato de postre, con cuatro láminas de jamón , los huevos y tres pimientos de Padrón (tal cuál), nos quedamos de piedra y para colmo eso valía casi 12€, la bebida no ponía precios, pedimos una jarra de cerveza que daba para 4 o 5 cañas y el precio 8€ (menos mal que no volvimos a pedir otra), los montaditos ( que eran pulgas) exceptuando el de lomo que iba más completo ridículos, en fin… por mi pueden cerrar la puerta. Desde luego que no tiene nada que ver con El Palomo de antes, menuda diferencia pero como el mercado es libre, ellos pueden poner los precios que crean oportunos y yo la libertad de no volver. Resumiendo… una jarra de cerveza, una botella de agua, 4 montaditos ( pulgas) de sobrasada con una lámina transparente triangular de queso, 4 montaditos de lomo y el mini plato de huevos rotos 45€ ....
Read moreUn clásico. Un local donde te sirven comida y tapas típicas de murcia y alrededores, aunque tienen mayos variedad de la que en principio pueda parecer. Es un sitio perfecto para conocer la gastronomía murciana o repetir si te gusta esta cocina. Informar que para pedir se sigue un modelo algo "particular", ya que apuntas en una libreta (ya preparada por ello) lo que deseas y se lo pasas al camarero, en caso de bebidas y pedir alguna otra cosa se pueden ir pidiendo sobre la marcha de la comida sin necesidad de un nuevo papel. Lo peor es que en fechas señaladas suele estar a tope y, en general, unas mesas están muy cercanas unas a otras por no decir que son dos grandes mesas que dividen según necesidad, así que si te agobias fácilmente no sé si estarás cómodo del todo. En resumen un gran restaurante al que volveré varias veces sin duda salvo cambio extremo del...
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