Cantina Mariachi La Laguna — Restaurant in San Cristóbal de La Laguna

Teníamos, desde hace tiempo, ganas de probar este mexicano y la verdad es que ha sido bastante decepcionante.

La decoración y el ambiente es bonito, pero la comida no ha estado a la altura de los precios.

Pedimos un combo de 18€, y la verdad es que dejaba mucho que desear en cuanto a calidad y cantidad. Caro, frío y poco sabroso. Hasta el guacamole tenía poco sabor y la salsa de queso igual. Muy decepcionante.

Los huevos rancheros sin embargo sí estaban buenos y en su punto. La salsa que acompañaba pica mucho para quienes no somos de picante excesivo, pero el plato está bien en su conjunto.

El Margarita de fresa se puede tomar sin ser una gran cosa, pero el de limón es infumable, no está bueno.

El servicio "bien sin más", porque la camarera tampoco es que fuera ni muy amable ni muy agradable. Debía de estar algo cansada. El encargado o jefe o lo que fuera, nos "invitó" a darnos prisa porque iban a cerrar en breve, casi que hubiera agradecido que al aceptarnos para la cena nos dijeran que en menos de una hora cerraban porque la verdad, nos hizo sentir algo incómodos.

En definitiva, un sitio con mejor pinta y apariencia, que realidad. La comida sosa, y sin gracia, y poco abundante, salvo los huevos rancheros. El combo de 18€ no merece para nada la pena. El servicio y la atención muy mejorable, hay que ponerle un poco de ganas cuando uno trabaja cara al público. Y caro para lo que es. No lo recomiendo...

Worst experience ever. Bad service and even worst food. Will never come back there and I recommend you to never step in if you want to preserve your health. Waiter (the one bold with glasses) is very unpolite and he also lied to us on sizes of plates to make us order more food and probably on the ingredients were in the quesadillas.I spent all the night long vomiting. I feel very sick and was absolutely...

Vergonzoso, sucio, lento, para no volver en la vida. Fuimos el pasado sábado con una niña menor de edad, después de 45 minutos esperando pacientemente sentados (ya nos habían puesto los cubiertos y tomado nota) no llegaba ni el agua. Voy a hablar con el camarero, más dedicado a hablar con sus compañeros de cocina en plan colega, que en estar pendiente de la mesa, y para sorpresa nuestra, empieza a mirar y resulta que no estaba nuestra comanda, por lo q no habían ni cocinado lo q habíamos pedido. Me tuve que controlar por no decirle de todo a semejante personaje, que va disfrazado de camarero y avergonzando a su profesión, dejando sin cenar a una niña pequeña, a mi pareja y a mi, siendo casi las 11 de la noche. La mesa de al lado, cansada de esperar también pidió al mismo camarero que si no habían preparado el último plato que no lo sacasen que no lo querían ya. Lo mejor de todo es q el restaurante estaba con una ocupación normal, sin colas ni estrés. Que falta de profesionalidad, que vergüenza, con la de gente que hay en paro, no...