Sobretablas — Restaurant in Seville

We were excited and very much looking forward to dining at Sobretablas given the great reviews. We love our wines and decided to try after checking out their wine menu.

I ordered a glass of wine by CORAVIN. It was a wine with a couple of years on it. When the somm (I believe, the somm-owner Robert) served it, he decided to uncork the bottle and, in one swift motion, emptied the bottle along with its sediments directly into the glass. It barely made a glass - he was sure to not waste a single drop. When I finally got round to tasting the wine, I discovered that almost 1/3 of the glass was filled with large sediment. It was almost uncomfortable to drink.

Politely, I told Robert that my glass “had some sediments” in it. I wish I knew what the exact opposite of “slightest bit apologetic” was because he was exactly that. He replied me, in a slightly condescending manner that “this is Natural for wine. There is no fault. ALL wine comes with sediments”

I continued being polite (maybe I was a pushover then? If I had stood up firmly maybe his stance would have changed? I can only guess, but we will never know). I replied “yes but it’s A Lot of sediments and not very pleasant to drink”. Let’s put it this way, a normal glass of wine in Spain would be 4-5 euros, this was 16euros.

He scoffed, and while walking away, said “never mind. This glass is FREE for you”

To unabashedly be that stuck up about knowing-it-all in wine is one thing, but if you truly are a world class sommelier, you will know that one stops before emptying a bottle filled with sediments into your customer’s glass.

Maybe WSET/CMS should reconsider having this taught as a mandatory requirement before graduating their students (or maybe not allow all wine folks to be called...

We came on a Friday night and had the tasting menu with the wine pairings. The ethos is refined elevated Andalusia food. The food was superb - we particularly enjoyed the desserts. The wine pairings were out of this world and complemented the food. I shall never forgot the Gamay paired with the venison carpaccio. The wines were exceptional value at €40 per person - the same pairing in the UK would cost at least twice as much.

The service, however, was a story of two halves. It started as you would expect in a fine dining restaurant. We particularly appreciated the Sommelier's expert descriptions of the wines. However, he disappeared never to return half way through service. We hope he is ok. Thereafter the service was rushed and impersonal. We paid and left without a thank you or a good bye, to the sounds of clearing up (it was not late by Spanish standards) and feeling rather deflated.

Fine dining is an experience that involves fabulous food and wine but also excellent service. If this restaurant is to earn higher accolades than a Michelin Bib gourmand - it needs to significantly improve the...

Una magnífica experiencia gastronómica y una fiesta para los sentidos. En estas pocas palabras podría resumir mi primera, porque sin duda seguirán otras muchas, visita a Sobretablas Restaurante, desde ya un referente necesario en Sevilla para quienes anhelábamos algo más en esta Ciudad.

Estuve ayer, 10 de julio, para comer, afortunadamente conducido y acompañado por mi amigo Dani, devoto del lugar desde el inicio de andadura. La atención de Robert, Sumiller y Jefe de Sala, y de Camila, impresionante Chef, ambos capitanes de este barco, fue impecable. Nos dejamos querer y cuidar, tanto en el menú ofrecido, a plena sugerencia y confección de la Chef, como en el maridaje ofrecido por Robert, precedido en cada ocasión por una breve reseña del vino seleccionado. Apasionante.

Dos aperitivos ligeros y deliciosos. En primer lugar sardina ligeramente curada con laminas de zanahorias aliñadas, sabores andaluces de antaño ideales para abrir boca. Y en segundo lugar, los sorprendentes langostinos con chicharrones, platillo que hay que degustar lentamente aunque sea para compensar la increíble y delicada elaboración que tiene. Los chicharrones son elaborados a partir de manitas de cerdo cocidas, deshuesadas, laminadas finamente, desecadas y formando unas escamas con las que se "reboza" el langostino, para darles un golpe de fritura que cocina ligeramente el marisco y deja la cobertura suflada. El mordisco, con la suavidad y jugosidad del langostino, junto al crujir y sabor del chicharrón, conducen al éxtasis.

A continuación, como entrante, una cremita de setas, perfumada, cubierta con virutas de portobello, que escondía dos sorpresas muy gratas: de un lado, un huevo a baja temperatura cuyo placer estaba en romperlo y mezclarlo con el resto; de otro, fantásticos pedacitos de papada ibérica melosos, untuosos y con corteza crujiente. Una locura.

Uno de los platos estrella, a mi entender. Ventresca de atún glaseada, tierna, jugosa, en su punto justo, deliciosa, con un glaseado sedoso, acompañada de un ajoblanco donde se detectaban destellos de rabanito picante, todo flanqueado con quinoa suflada. Todo en boca sólo producía placer.

Y turno para la carne, en este caso nos ofrecieron paletilla de cordero, asada a baja temperatura, con resultado jugoso y tierno, con exterior crujiente, acompañada de una crema o puré de berenjena asada, muy ligeramente, con toque ahumado, y hojita de salvia frita. Espectacular.

Qué decir del postre. Primero una sorpresa: el pre postre, una suerte de sorbete con deliciosa fruta fresca, ligero, refrescante. Y a continuación el postre en sí, un espectacular bombón de chocolate frito que emulaba el chocolate con churros de después de Feria, con el crujiente que encerraba el chocolate líquido con toques de naranja y azahar. Aquí ya casi muero.

Todos platos e ingredientes reconocibles, con una vuelta de tuerca y toque personal de Camila, que recupera recuerdos a cada bocado y cuenta historias que se comparten, para mí la esencia de la cocina.

Ya estamos preparando una nueva visita, esta vez en grupo, con parejas y amigos, pues algo tan sublime y maravilloso hay que compartirlo. Gracias a todo el equipo de Sobretablas por vuestro buen hacer y por esta experiencia, y gracias especialmente a Camila, por su profesionalidad y genialidad, y a Robert, por su atención y...