Cal Pinxo Sitges — Restaurant in Sitges

Hay establecimientos que viven de la fama que tuvieron en su día, de la excelente ubicación que tienen y de los turistas que van de paso. Primera linea de mar, justo al lado, debajo de La Punta de Sitges, por cierto el aparcamiento fatal. Nada extraordinario, al contrario, incluso pedimos algún plato fuera de lo común, pero mal cocinado y escaso, la calidad precio mala. Y para rematar tuvimos que pedir que la paella nos la repitieran, pues nos la sirvieron quemada (confirmado por el propio cocinero, tenia todo el arroz completamente enganchado a la paella, con el olor y gusto a quemado)…Después de comentarlo y hacernos esperar 20 minutos, nos obsequiaron con un plato de gambas de cristal, que se agradece (pero que no evita esta reseña). Ni siquiera un aperitivo inicial u otro detalle al final de la comida (cortado, chupitos,etc, que es muy habitual en restaurantes a la carta y una despedida triste, sin ninguna atencion especial, nos fuimos después de pagar la correspondiente factura. Fuimos el 12 de diciembre de 2024, habían 4 mesas escasas en todo el restaurante, contadas y un servicio de camarero que se nota que no son del oficio, si no estudiantes (no creemos que tuviera más de 20 años de edad) haciendo horas para sacarse unos euros. Los lavabos sin jabón, ni en el de hombres, ni en el de mujeres… Nuestro consejo, es evitar este restaurante e ir a otros de los muchos que hay en Sitges, seguro que la calidad precio será muchísimo mejor. Precio pagado 40 euros por persona. Mi mujer quería ir por la fama que tenia, pero estamos seguros que no...

Una ubicació fantàstica al cor del Passeig Marítim, una terrassa espectacular, un dia perfecte. Uns entrants senzills però més que aceptables (peixet fregit al seu punt i musclos al vapor). I fins aquí vam arribar. De segon vam demanar una fideuà de marisc (insulsa, sense cap sabor) i una paella mixta (igual d’insulsa, arròs passat). Haguès estat acceptable con a plat principal a un menú de deu euros de bar de polígon, va ser una decepció total a un restaurant del nom de Can Pinxo i a un preu de més de vint euros per ració de fideuà o paella. Un clar exemple de la perversió d’un local de cert renom a un indret turístic que ofereix arrossos (i fideus) a turistes sense uns mínims de qualitat dignes. Val a dir que la terrassa estava plena a vesar, la qual cosa diu molt poc del gust dels clients per un bon arròs. Els cambrers estaven saturats per atendre tantes taules, no hi ha un únic cambrer assignat a la taula i no es va veure un cap de sala que dirigís. Pet fer les comandes (més aigua, més ví, postres, cafès) haviem d’agafar al vol al primer cambrer que veiem passar, i sovint haviem de repetir la comanda per que es perdia qui sap on (el cambrer que ens prenia nota dels cafès a mitja comanda ens va deixar amb la paraula a la boca i se’n va anar a parlar amb un altre company, literalment). Una llàstima, per que pel nom i per la ubicació (i pel preu de 50€ per cap) hom pot esperar molt més. Un lloc per guiris passavolants sense molt criteri, i podria ser un local de referència a poc que...

Siempre nos ha encantado este restaurante, tanto el sitio como la comida pero hemos ido viendo como clientes habituales que somos, que cada vez ha ido a peor, tanto calidad como cantidad. Nuestra sorpresa ha sido esta Semana Santa que reservamos una mesa para 7 comensales que eran unos amigos que vinieron de fuera y les dijimos que era uno de los mejores restaurantes de Sitges pero la verdad que les encantó el local y las vistas pero salimos super descontentos con la comida ya que comparado con la última vez ha sido nefasto, poca cantidad en todas las raciones, por ejemplo los mejillones a la marinera parecen una tapa en lugar de una ración, cuando nosotros en otras ocasiones, habíamos comido los mejillones en una olla grande con una salsa marinera abundante y exquisita. Pedimos también unos calamares a la andaluza que casi no se podían comer de salados que estaban pero no dijimos nada por respeto. Y pasamos a las paellas, pedimos 4 clases distintas de paellas y la única que se podía comer medianamente bien fue el arroz negro, cuando nosotros siempre habíamos pedido la paella de marisco y salíamos encantados. Para nosotros era el mejor sitio de Sitges para comer una buena paella pero creo que ya no vamos a volver ni lo vamos a recomendar a nadie como hacíamos anteriormente. Nunca nos había importado el precio porque la comida era exquisita pero ahora esto...