Ultramarinos Roig — Restaurant in Valencia

Me and my family went into the restaurant to take a look, planning to order some food later, however when a staff member asked us if we were going to eat and we said we were taking a look, he said we have to go to the front desk and ask for a table instead of letting us take a look. Are they racist or something? Because the rest of the reviews depict them as friendly members but we are Chinese so I do not understand why they ordered us to have to get a table instead order to take a look. Have better staff Ultramarinos, or just find some staff with an ordinary...

De momento, para no volver. Llegamos con reserva…y la chica de la entrada no la encontraba. Tras mostrarle el mail de confirmacion…y buscar un rato, nos encuentra y nos sienta al lado de una mesa con niños (estando el resto del local casi vacio) (mencion del niño subiendose a la silla tapizada con zapatillas sin que nadie le diga nada…amen de cantar, correr, gritar y molestar…sin que nadie diga nada. Despues de mas de 15’ despues de haber pedido, nos llegan unas croquetas que NO eran las que habiamos pedido…se las llevan y tardan 10’ en sacar las croquetas correctas, bien de sabor pero frias-congeladas por dentro. La coca de sobrasada algo pequeña pero bien de sabor. Al rato….20’ o asi, viene el camarero a retirarnos los cubiertos cuando todavia faltaban 2 platos por salir… los reclama a cocina….llevamos ya casi 1 h sentados y todavia nos faltan 2 platos por salir. Y para mas inri, las cocacolas de 237ml que te las bebes en dos tragos. Me va a costar volver a venir. Al final nos preguntaron si todo bien, explicamos lo de las croquetas….y se disculparon, pero cobrarlas las cobraron. Ah y tambien se equivocaron en traer la primera cocacola…que era zero y la...

Fui con mi madre que va en sillita de ruedas. El primer obstáculo con el que nos encontramos, las patas de la mesa, están hechas de tal manera (adjunto fotografía) que es IMPOSIBLE sentar a una persona con silla de ruedas, me ha tocado sentarla en la silla del restaurante, situación que es incómoda para mi madre, xq evidentemente, ella está mejor en su silla, menos mal que allí estaba Julián para ayudarnos, que desde que hemos entrado por la puerta, tanto él como Fernando han estado muy pendientes de nosotras y han sido un amor (sólo pregunto nombres cuando esas personas lo merecen y ambos lo han merecido)

Nos hemos pedido las bravas, el fartón de anchoa y el pan Brioche con blanc i negre con habitas, todo delicioso, de postre tarta de queso 🧀 con bola de helado de frutas del bosque, y la galleta selva negra, todo muy bueno, la verdad, y el café ☕️ no puede fallar xq son NESPRESSO, cosa,que prefiero antes de que no me guste.

Y precio junto a las bebidas ha sido no ha llegado a 45€, me esperaba tanto que hasta me ha resultado barato.

Así que, todo perfecto menos lo de las mesas que no están adaptadas para las personas con la...