Una experiencia muy regular, hace 3 años pedí 6 tamales a mi casa, me los llevaron y cuando los abrí tenían un olor raro, le reclamé al señor Martín en ese entonces, y fue grosero y no tuvo la delicadeza de cambiarlos y revisar aver que había pasado, perdí mi plata y me prometí nunca más volver a probarlos, hoy 3 años después después de la insistencia de unos amigos que decían que los tamales eran muy buenos, vinimos a Elizabeth al nuevo local, y en el fondo tenía la esperanza de encontrar buena comida, darle una segunda oportunidad pues creo que todo negocio de comida merece una segunda opinión una segunda vez.

Iba muy prevenido de la comida, me mostraron un menú muy interesante, muy original, creo yo que hay buen diseño, llama la atención al colombiano que vive lejos de su tierra y espera encontrar probar un poco de ese sazón colombiano que tanto se extraña. La TAMALERIA cómo negocio es próspero, llama la atención, intriga, y eso es lo que lo ah llevado a vender, pero creo que muchos de esos clientes que vienen no vuelven en un término de tiempo cortó, no es una experiencia la cual quieran repetir cada domingo cómo buenos colombianos. La comida no es tan buena cómo la venden, desde lo que probamos puedo decir lo siguiente:

Pedí una lechona, la cual venía recalentada en microondas un pedazo de piel de chicharrón blandito sin sabor, la lechona recondimentada, cómo si les hubiera hecho falta sal e intentaron arreglarla con pimienta y sal, salada por pedazos e insípida por otros lados. Cómo lechona muy mal plato.

Probé el supertamal, el chocolate con croissant estaba muy bien, pan fresco y un chocolate en el punto, servido en un pocillo de metal muy original y muy bien por ese detalle de fina coquetería.

El tamal puedo decir que no es lo máximo, mucho mejor en sabor que la lechona pero bastante costoso para lo que uno espera de un tamal de 25 dólares. Para el colombiano que por primate vez pruebe el tamal de este lugar puede que sea rico, pero para los que saben de buen sabor de la comida colombiana este lugar sería una falta de respeto.

Este review si lo lee el señor Martín puede que lo haga a un lado, igual es solo mi opinión, y puede que no le importe, pero si de verdad quiere ofrecer un excelente producto debería hacer una revisión interna del producto final que está ofreciendo, ahora si solo le importa vender por vender, puede que siga vendiendo pero el consumidor le comprara 1 sola vez y no creo que 2.

Muy mala experiencia a título personal, pagar 70 dólares por un desayuno por el cual queda un sinsabor, en todo el sentido de la palabra, creo que no es justo, la plata va y viene pero los clientes es mejor cuidarlos.