Hermético Escape Rooms - Escape Room en Madrid — Attraction in Madrid

BUSCÁBAMOS A TORQUEMADA Y NOS ENCONTRAMOS CON UN VAMPIRO DE CHOCOLATE.

Hacía tiempo que teníamos planeado realizar un pequeño viaje en el tiempo y visitar a nuestro viejo amigo Torquemada. Lo que en principio planeamos como un viaje tranquilo, se convirtió en una trepidante aventura inesperada.

Nos acusaron de muchos pecados de los cuales no éramos culpable pero no tuvimos más remedio que demostrar nuestra inocencia, escapando de las manos de un monje algo loco (fue curioso porque luego ese mismo monje se convirtió en un cazador chocolatero..de locos!) Superamos muchas pruebas de lógica y otras tantas de habilidad, pero finalmente conseguimos demostrar que no éramos culpables de todo aquello de lo que se nos acusaba. Pese a que no nos gustó ser acusados, disfrutamos mucho del viaje, la ambientación, el envolvente entorno musical y de las pruebas que el malvado monje nos hizo superar.

No encontramos a nuestro amigo Torque, pero si nos dijeron cuál fue su posible próxima ubicación..¡y allí que nos fuimos!!

No nos quedó más remedio que mentir y hacernos pasar por adeptos del profesor Henry Brave y seguir sus pasos para encontrarle y ayudarle (nos dijeron que él podría decirnos dónde estaba nuestro amigo).

Fue un largo camino, tenebroso, lúgubre, con una ambientación sumamente envolvente y muy cuidada. Tuvimos mucho cuidado de no despertar a los vampiros, porque sabíamos que no seríamos capaces de hacerles frente. Dimos nuestro mejor esfuerzo y logramos llegar al final, pero allí nos esperaba el vampiro jefe. Hicimos uso de nuestros conocimientos de vampirismo y le dimos una buena lección que jamás llegará a olvidar. Pero nuestro gozo en un pozo, no encontramos al profesor, pero si encontramos una curiosa y colorida invitación para asistir a la fábrica de chocolate.

Aceptamos la invitación con la intención de infiltrarnos en la fábrica y realizar una pequeña investigación en busca de nuestro perdido amigo. Llegamos a la entrada de la fábrica y allí nos esperaba el dueño de la misma quién nos confundió con los investigadores que esperaban le ayudase a encontrar la gran receta.

¿Tuvimos opción? No. Nos adentramos en un perfecto mundo de color, felicidad, chocolate y diversión en estado puro en el cual no pudimos evitar contagiarnos del buen rollo que se respiraba en aquella fábrica. Doompos Loompos, mecanismos, juegos, fuero algunos elementos que nos encontramos es nuestra misión.

Seguimos sin saber dónde está nuestro amigo Torque, pero si podemos decir que nos dejó un dulce regalo en nuestro final.

¿Qué podemos decir de Hermético que no hayamos ido desengranando en líneas anteriores? Tuvimos la suerte de jugar con sus tres GM’s los cuales cada cual más amable, agradable y cercano. Se esforzaron por hacernos vivir una experiencia inmersiva, pero sobre todo divertida. Jugamos “Inquisición” y salimos con muchísimas ganas de más. Tanto fue así que al día siguiente volvimos para jugar “La cripta del vampiro” y “Fábrica de chocolate”.

Acting de los más divertidos que hicieron que las introducciones a los juegos fueran inmersivas. Las tres salas cuentan con una historia hilada e integrada con juegos que ponen a prueba tu mente como tu agilidad manual.

Salas de dificultad más que asequibles para cualquier escapista, con buenas dosis de humor, tensión (apta para todos) y muchas risas garantizadas.

Una visita obligada si eres amantes de los escapes. ¡¡No te vas a...

Quiero contar mi experiencia absolutamente decepcionante con esta empresa. He hecho varios escapes y sinceramente hermético era la que tenía mas en consideración por sus salas. Una pena que esto no vaya acorde con la atención recibida el viernes 8 de enero. Madrid, una nevada de campeonato, coches quedándose tirados en plena autopista, carreteras cortadas.... Teniamos una reserva para 3 personas y llamo por teléfono para cambiar el día (nisiquiera para cancelar) de una forma bastante poco simpática me dicen no rotundo, a pesar de explicar la dificultad que nos supone llegar hasta allí. Finalmente decidimos no perder el dinero, dos de las tres personas, ya que la tercera tenía imposible por cortes en el transporte público y el estado de carreteras llegar hasta allí. Después de un camino de traca, a las 20.20h de la tarde (la reserva era a las 20.30, me llaman para decirme que finalmente han decidido cambiar de día. Ya estábamos allí, obviamente, y decidimos jugar con la condición que se nos devuelva el dinero del tercero en discordia. No contentos con el problemon, en vez de devolverme la parte proporcional a lo que pagamos, me devuelven menos dinero, como si hubieramos reservado la sala para dos. Estoy completamente decepcionada, sobretodo porque ya habiamos ido en varias ocasiones y creo que por el eeror, no hubiesemos debido pagar nosotras. Muy mal... No creo que vuelva.

Respuesta: porsupuesto que llamé a las 17.30 cuándo empezamos a ver que era imposible llegar. No quería cambiar de día por gusto, sino por obligación. Y así lo comenté en la llamada "no se si vamos a poder llegar" entiendo las explicaciones que se me dan tanto del cambio como del precio, en una circunstancia normal. Lo siento pero no me convence en la circunstancias que se dieron y mucho menos cuándo finalmente vosotros mismos ibais a cambiarme el día por lo mismo. Solo hubiese hecho falta un poco de empatía y no hacernos ir hasta allí para llamarnos a las 20.09h. tan solo 20 minutos antes de...

Esperábamos muchísimo más, la verdad.

Voy a intentar contar la experiencia que vivimos sin hacer ningún spoiler.

Fuimos cinco personas a hacer el escape de Asylum. Las instalaciones eran correctas, y la GameMaster la verdad que encantadora. Sin embargo, creo que hay algunos aspectos que mejorar:

-La inmersión es nula. Un simple video en un pasillo, mientras el resto de jugadores están viendo otros vídeos para otras salas, o gente pasando al baño, etc.

-La ambientación de la sala es correcta, sin más. Para ser un manicomio podía haber estado mucho mejor.

-La sala si bien es cierto que tiene sonido de fondo, se oye poco, es siempre el mismo, no va acorde con las situaciones que pasan.

-La GameMaster da pistas en la pantalla o hablando. Leñe, pon un voz distorsionada o de una tía loca, que haga que te metas más en el ambiente.

-Lo de los sustos y tensión me parece ridículo. Simplemente golpean la puerta por la que has entrado. Fin de la historia.

-El escape es difícil, sí; pero porque tiene cosas inconexas, que no están bien hiladas, y que si no te dan pistas no lo sacas. Además, nos dejó 6 minutos extras para poder salir.

-Para mi gustos muchos candados y del mismo tipo.

Creo que deberían replantearse esta sala para conseguir que fuera una experiencia mucho más inmersiva y frenética. Al final la gente que hace este tipo de escapes busca estar al límite, con la adrenalina al máximo. Este no es el caso.

Quizás después de hacer otros escapes más tensos este se nos ha quedado flojo. Pero insisto, creo que tiene...