Todo empezó con la ilusión de una escapada a Sierra Nevada. Naturaleza, nieve, tranquilidad… y lo que acabó siendo una masterclass intensiva de supervivencia hotelera.
Llegamos al Hostel Sierra Nevada sin muchas pretensiones, pero tampoco esperábamos que la aventura empezara en el baño. Allí descubrimos que el concepto de higiene básica era opcional: ni gel, ni champú, ni jabón de manos. Nada. Cero. Limpieza a base de fe.
Pedimos toallas —porque claro, no están incluidas, por supuesto que no— y tras unos eficientes 30 minutos de espera, nos las entregaron como si fueran un bien escaso en el mercado negro.
Pero lo mejor vino con la ducha. Nos encontramos con una grata sorpresa: no había agua caliente. Así que nos duchamos en pleno invierno, con agua estilo glaciar, mientras fuera nevaba. Una experiencia tan revitalizante que debería incluirse en retiros de yoga extremo o castigos medievales. Y eso sin hablar del suelo de la ducha, que ofrecía un riesgo real de contraer hongos de origen desconocido. Una ruleta microbiológica que convertía cada paso en un acto de valentía dermatológica.
Dentro de la habitación, el microclima era otro: una sauna nivel “nos están cociendo lentamente”. Insoportable. Abrías la ventana y entraban los pingüinos; la cerrabas y te evaporabas. Un microecosistema que ni la NASA entendería.
Por si fuera poco, mi compañero tuvo el placer de dormir con una luz azul parpadeante justo en la cama nido, creando un ambiente digno de after clandestino en un polígono industrial. Más que descansar, parecía que le habían reservado una habitación en la discoteca de Tron.
Y como la experiencia no estaba completa sin algo de fauna local, en un momento dado entró un perro. Tranquilo, confiado, como si fuese el gerente. Se paseó entre las camas, nos inspeccionó con indiferencia profesional y se fue. Ni saludó. Supongo que ya nos había visto sufrir bastante.
Y cuando crees que nada puede superarlo… llega el final apoteósico. Si el checkout era a las 11, uno pensaría que tiene hasta entonces para, no sé, descansar. Pero a las 9:45, la encargada entra cual inspector del Ministerio del Tiempo, abriendo las camas nido sin previo aviso. Supongo que quería asegurarse de que no nos hubiéramos fusionado con el colchón.
Y justo cuando pensabas que todo había acabado… la misma persona nos pidió que dejáramos una reseña de 10 en Booking. Una reseña de 10. Tras la ducha helada, la sauna, el perro, la rave en la litera, el allanamiento express de camas… aún tuvo la dignidad de mirarnos a los ojos, llamarnos “cariño” —eso sí, muy amablemente— y pedirnos un 10.
Hay que tener fe. O cara. O ambas.
Ahora bien, en honor a la verdad, diremos que el colchón era cómodo. Y cuando uno ha pasado por todo lo anterior, se aferra a lo que puede.
En resumen: una comedia absurda que pagamos como si fuera alojamiento. No repetiré. Pero al menos tengo anécdota, micosis potencial, una migraña fluorescente, cariño condescendiente y un nuevo miedo irracional a las...
Read moreI made a reservation for my brother and I for two nights. One day before our planned ski trip, my brother had caught a severe fever and could barely go out of his bed. We had made a request through Booking.com, asking for cancelation fee waiver. We have also contacted the hostel, explaining our situation. They've declined our request, and when trying to talk with them once again they lied to us, saying there is no way to waive the fee through Booking.com - even though clearly there is one. Very disappointing! I've never encountered such inconsiderate attitude from any...
Read moreI'd give 4.5 stars
Pros: Met people from all around the world, from Singapore, US, Australia, ... It's well located for shopping goddies for breakfast, lunch and dinner. Has cool promotions in local shops as well.
Cons: The beds, sleeping in the top bunkbed is kinda annoying because of the accessibility. The transportation of snow gear, it's around a 10min walk to the nearest local chairlift to go for the main area, with the equipment on the back is kinda exausting.
Easter egg: If you are lucky enough to meat Nena (the dog) consider...
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