Jardin de Gente — Restaurant in Santiago

Pase a almorzar, la recepción muy buena gente cordial con un lugar agradable, se ve mas como cafetería, imposibilidades para bar, aún que no venden alcohol, eso a simple vista se ve agradable, al pedir el almuerzo nos recomiendan el menú para disfrutar comida casera, pedimos arroz con pollo al Currie, en lo que la señorita que nos atiende de forma muy amable y cordial al raro comenta que solo tiene para un plato, por ende el segundo fue de pastas con bolognesa, el arroz llegó frío, casi nada d pollo con hartas verduras, y el otro plato de fideos, con los fideos claramente ya mezclados con la salsa, no era bolognesa, de muy mal aspecto, de igual manera empezamos a comer, comida recalentada, sabores más bajo que básicos. Un frasco con supuesto queso parmesano con un raspado que no le quedaba nada.Por ningún motivo recomendado para ir a comer, colación venía con jugo que no lo vimos, pedí una limonada con albahaca y gengibre, llegó un baso a temperatura normal ambiente sin hielo sin una buena presentación de mal sabor y el vaso con un olor a huevo, imposible de tomar, en consecuencia terminamos por comer lo que pudimos pagar la cuenta y retirarnos por algo de chatarra que era más sabroso que eso. Quizás como cafetería pueda funcionar, pero por lo del jugo claramente mal lavado los vasos no volvería a ir. Considerar la critica para que puedan mejorar estos aspectos que son básicos si van a...

El lugar es pequeño, acogedor, bonito. Vinimos a ver musica en vivo y todo bien....ahora, entiendo que haya estado lleno pero se demoraron demasiado en servir. Bebidas y un jugo unos minutos 30 minutos, cafés más tarde aun y un simple plato de pastas con boloñesa fue lo último en salir. Lo que más me molestó fue que preguntamos un par de veces y la respuesta fue "les van a traer todo junto", lo cual evidentemente no era verdad!! Mi hijo pequeño estaba muerto de hambre. Yo al final me aburrí y sali a comer a otro lado y volví después. Consejo: no lleguen...

Nos gusta muchísimo el lugar. Es de barrio, encanto que se ha perdido entre tanto edificio y cadenas grandes. Tengo la impresión de que es atendido por familia y/o amigos. El contacto con la clientela es cercano. Café y pastelería son muy, muy buenos. Todavía no probé nada salado. Tienen opciones veganas y sin gluten. Tiene sector para fumadores en las mesas de afuera. Ah, y algo muy importante que me olvidaba: Siempre suena buena música. Nunca te vas a encontrar con algo "urbano",...