Caballa Gastro Pub — Restaurant in Ensenada

The place is ok. From a broad view it looks trendy with several areas to take pictures. Look at the details though. The cushions are dirty and the tables are sun damaged. There are trees for shade but these trees are dropping crap onto your food.

Some design issues. The music is too loud for breakfast. Classic rock blasting while I'm trying to talk. The coffee whip cream on top of their coffee is solid ( as in hard). Won't allow any coffee to actually pass through. They won't supply straws unless you ask for one. So they make a drink that is challenging to drink then they purposely don't supply you with something to enjoy it with. Lastly.. the short rib chilaquiles are served on a cast iron skillet. The skillet had rust on it. That was actually upsetting. I didn't see it until I got to the bottom. Then I noticed rust around the outside as well.

They have some things the director needs to work on. The music volume and the drink design was blamed on the...

Visitamos Caballa Gastro Pub en Ensenada por recomendación de un amigo local, específicamente para probar el rib eye, que nos habían sugerido. Sin embargo, nuestra experiencia estuvo lejos de lo esperado.

Primero, el servicio: Al llegar, nos ofrecieron agua sin aclarar que era embotellada, resultando en un cargo adicional de 45 MXN, algo que podría haberse informado de antemano. Luego, al revisar el menú, ordenamos una ensalada de durazno con tocino, pero la mesera nos indicó que no había durazno y sugirió sustituirlo con pera. Además, solicité un café descafeinado y me informaron que solo había café regular. Estas pequeñas faltas en la disponibilidad inicial empezaron a dar una mala impresión.

Al pedir el platillo principal, el rib eye, la mesera regresó para informarnos que no tenían carne disponible. Apreciamos que nos diera tiempo para reconsiderar la orden, pero cuando le pedimos detenerla mientras decidíamos si quedarnos o no, regresó de inmediato con las bebidas ya servidas, lo cual nos pareció apresurado. Decidimos quedarnos y cambiamos la orden, pero nuevamente nos informaron que tampoco tenían los ravioles que habíamos elegido. Finalmente, optamos por un risotto.

Para colmo, al ser el cumpleaños de mi cuñado, pedimos alguna cortesía simbólica, ya que habían tenido varios problemas con nuestra orden. La mesera nos informó que no tenían postres horneados y no ofrecieron ningún gesto para compensar los inconvenientes. Para improvisar, pedimos una coliflor horneada como “pastel” de cumpleaños, pero a pesar de todos los contratiempos, no se acercó ningún encargado para disculparse, ni hubo la mínima intención de hacer un gesto de cortesía.

La comida: Aunque la presentación era buena, se enfrió rápidamente, algo que mencioné a la mesera, ya que el clima de la zona parecía afectar la temperatura de los platillos.

Aspecto positivo: La decoración del lugar es muy atractiva y fotogénica, lo cual añade un encanto visual.

En conclusión: La atención de la mesera fue correcta y profesional, y le dejamos su propina. Sin embargo, en términos generales, el restaurante dejó mucho que desear en cuanto a disponibilidad y atención al cliente. En otras experiencias similares, los restaurantes suelen ofrecer algún detalle como cortesía ante tantos inconvenientes, lo cual aquí no sucedió. En resumen, aunque el lugar tiene potencial, el servicio y la gestión de inventarios necesitan mejoras para ofrecer una experiencia...

Es mi segunda vez que voy a caballa. La primera fue hace un año y estuvo increíble absolutamente todo. Pero en esta ocasión dejó mucho que desear.

El lugar está increíble, excelente servicio de parte de los meseros y personal. Muy limpio… Pero son increíblemente lentos para traer un platillo. Pedimos una entrada y dos platillos… Con la entrada se tardaron 30 minutos y como a los 15 minutos de eso nos trajeron un platillo pero aún faltaba el otro, decidimos compartir ese y pasaron otros 15 minutos nos llegó el otro platillo (el último) que decidimos compartir también para llenarnos porque desde el momento en que pedimos hasta que nos trajeron el último platillo, pasó una hora… Una hora 🥲

La entrada no recuerdo cómo se llamaba pero era tipo “tiradito”. Estaba rico pero las tostadas estaban como muy equis pero dijimos bueno, al menos está rico. Al risotto le faltó sal y queso, segun era de 4 quesos pero no sabía ni siquiera a un queso 🥲 y la porción fue muy poca para lo que cuesta y sabe (No recomiendo que lo pidan) El french dip estaba tostado demás, que aún que lo remojaras en consomé aún así era difícil masticar. Estaba pues… Bueno, pero también le faltó sabor.

Las bebidas están ricas, el vino está regular. Pero tristemente con esta experiencia...