Bobo Burgers & Café (Condesa) — Restaurant in Mexico City

Overrated burgers with nothing special, mediocre freezer fries, and horrible service. After seeing these copycat “In-N-Out” style burgers in Mexico City all over social media, I had to check them out. Luckily, we didn’t wait long for a table compared to others who experienced longer waits during the evening hours. We were seated at one of the inside tables, and it was crammed. We could easily hear the conversations of the people next to us, which was uncomfortable, though perhaps “part of the experience” of eating at Condesa’s hottest burger spot.

We had a rude server taking our order, which didn’t start things off well. We ordered a simple cheeseburger and fries to share. For drinks, the beer selection was limited, so I had to settle for a stronger beer that wasn’t as great as I expected.

The burgers took a while, but when the food came out, they looked tasty. However, after taking a bite, I was greatly disappointed. The beef patty was pretty medium rare, not really my preference. When I asked the waiter how the beef was cooked, I got a very rude answer that their patties are cooked medium rare. It would have been helpful to notify customers of this beforehand and offer the option to have the meat cooked differently. I really did not enjoy my burger.

Thinking the fries would be decent (I mean, how can you ruin fries?), they turned out to be mediocre, tasting like freezer fries—not fresh at all. It was truly an upsetting experience, both in terms of the food and the dreadful service we received from the staff. The inside, apart from being all bunched up, felt stuffy and didn’t provide a comfortable vibe for eating a burger. It felt more pretentious which wasn’t the vibe I was looking for.

The only positive was that the burger prices weren’t as bad compared to Shake Shack, but the drinks were expensive. Overall, it was a disappointing experience that didn’t live up...

Comida: de diez. Servicio: me tocó malón... Ambiente: la luz podría ser más intensa y la música menos alta.

Llegué, como muchos, con la expectativa de encontrarme "las hamburguesas como In n' Out". Me senté junto a unas personas que ya se iban y que le comentaron al mesero sobre lo rica que está la comida y el gran servicio que recibieron, por lo que mis expectativas se elevaron.

Cuando fue mi turno de ordenar, el mesero CERO amable: le pedimos unos cambios de momento y comentó molesto "mmh, déjame ver si puedo cambiarlo, porque ya metí la orden"... ni siquiera habíamos terminado de ordenar y ya había metido la orden? Ok...

Preguntamos sobre la salsa Bobo y nos dijo que tenía habanero y era picante (mi acompañante no come picante y por eso cambiamos la orden), pero PARA NADA pica y es JUSTO lo que eleva la hamburguesa de buena a deliciosa. Sin la salsa, las hamburguesas no se distinguen mucho de otros lugares.

La comida no se tardó nada en llegar y honestamente apenas tengo una observación, porque todo lo que comí estaba delicioso... salvo las papas. Perfectamente pudieron haber salido de una bolsa de congelados, porque estuvieron muy irrelevantes. Lo que las hizo deliciosas fue el alioli.

Para continuar con el mal servicio, el mesero tomó mal mi orden, le dije que si era de otra persona, me esperaba. Pero si era mi orden equivocada, ya me la quedaba (tenía hambre y no quería esperar). Sin queja de la comida, pero de nuevo, el mesero como enojado cuando él fue el que se equivocó. Le enseñé lo que sobraba y faltaba de mi orden y comentó que así la habíamos pedido, hasta revisó la orden y confirmó que EL se había equivocado.

Jamás se acercó a preguntarnos si queríamos algo más y otra persona se encargó de ir limpiando nuestra mesa (aunque tampoco estuvo muy padre, yo aún tenía comida en la mano y ya me estaban levantando el plato y a mi pareja casi se llevan su soda casi llena).

Al final me fui muy contenta, porque no me cobraron los adicionales de mi hamburguesa y muy satisfecha con la comida, porque además los precios son MUY buenos... pero muy decepcionada de que no me tocó Martín de mesero y me tocó otro sujeto que como que no le gusta trabajar ahí.

¿Volvería? Obviamente, sí vale la pena por la relación...

Bobo Burgers es un nuevo hotspot en la colonia Condesa de la Ciudad de México que ha captado la atención de los amantes de las hamburguesas gracias a su propuesta de calidad y sabor. Fundado por Carlos Salame y la chef Valeria Velásquez, este lugar se inspira en las clásicas hamburgueserías californianas como In-N-Out, pero con un toque sofisticado y un diseño minimalista. Su ambiente es acogedor y moderno, ideal para disfrutar de una comida casual pero bien ejecutada.

El menú, aunque breve, destaca por la calidad de sus ingredientes. Sus hamburguesas están hechas con carne de res de libre pastoreo y se sirven en un pan brioche esponjoso. Entre las opciones más populares se encuentran la “Spicy Burger”, con una salsa cremosa de habanero, y la “Veggie Burger”, elaborada con portobello. Las papas fritas, que se piden por separado, son delgadas y crujientes, similares a las de cadenas comerciales, pero con un toque más gourmet.

Además de sus hamburguesas, Bobo Burgers ofrece otras opciones como pollo frito con salsa tártara y un sándwich de queso a la parrilla. Para maridar, cuentan con una selección de vinos naturales, incluyendo su propio vino elaborado en colaboración con Radicante en el Valle de Guadalupe. También disponen de cervezas artesanales y malteadas preparadas con helado local, lo que complementa perfectamente la experiencia gastronómica.

Los comensales han elogiado la calidad de la comida y el concepto del lugar. En plataformas como TripAdvisor, algunos clientes han descrito su experiencia como “la mejor hamburguesa de la ciudad”, destacando el sabor y la atmósfera del restaurante.

En conclusión, Bobo Burgers se ha posicionado como un referente en la escena gastronómica de la CDMX, combinando tradición y modernidad en cada bocado. Su propuesta bien cuidada y su ambiente atractivo lo convierten en una parada obligada para los amantes de las hamburguesas y la...