Restaurante A Ver Tavira — Restaurant in Tavira

Interesting experience, maybe a bit overrated.

Staff very friendly, good ventilation, comfy chairs, Chose menu Algarve for 90eur. Before main meals start, aperitifs were brought for us. They were quite nice. Gave a good impression and a good start. But stay away from fake olives. Their taste is like used car oil. Server gave a good explanation about every meal, thats a plus. So a main course starts... some mushy pate with random stuff slapped around. Taste in mouth is really bad but a wine helps to clear it. Then bread arrives, its warm, fresh, with local olive oil that has a very specific distinctive taste that I have not experienced anywhere else, this part was nice. Third one is a fish. Fish is soaking in a plate of strong tastes, if you just grab a fish, its just a-ok. If you try fish with a bit of green-yellow stuff around. You can't taste a fish any more. So overall experience with this meal is not good as well. Moving on - pork meal. First good gust of fresh, balanced taste pallet. During this, while still trying to enjoy the meal, our server with a chief comes. I am not a man of many words, its hard for me to explain to them what I did not like about previous meals. They look friendly, I understand chief concerns if someone does not appreciate the hard work that he's doing. They promise an extra something to make our experience here amazing. After this, desert comes. Its flat-out amazing. Not overly sugary with all things perfectly balanced. I don't usually like cakes, but this one was amazing. After main desert, they brought extra desert and I can comfortably say that it did indeed make experience much better. Second desert was very well made as well.

Overall I would say that this was an interesting experience. I am torn between 2 or 3 stars. So giving a 3 as benefit of doubt. Maybe the other menu would be more suited to my taste buds. Amazing staff, deserts and wine were a highlight of our evening. Is it worth the total of 220eur for 2 of us? I would say...

A Ver Tavira is an absolute gem in the heart of Tavira!

From the moment we walked in, we were greeted with warm smiles and impeccable service. The ambiance is charming, offering a perfect blend of elegance and comfort, with stunning views that add to the overall experience.

The food was nothing short of spectacular. Every dish we tried was unique, bursting with local flavors and beautifully presented. The seafood was incredibly fresh, and the chef's creativity truly shone through in each course. My own favorite was the octopus dish - it was cooked to perfection, with a perfectly balanced combination of flavors and simply melted in my mouth.

The wine selection was equally impressive and the staff was knowledgeable and helped us choose the perfect wine for our dishes.

A special thank you to the staff, who went above and beyond to make our evening memorable. Their attention to detail and genuine hospitality made us feel like valued guests throughout our visit.

A Ver Tavira is a must-visit for anyone looking for an amazing dining experience. We will definitely be returning on our next trip to Tavira....

Aún viviendo a 40 minutos de Portugal me ha costado mucho decidirme a ir a un restaurante con estrella allí. Motivos: relación cantidad de platos/precio muuucho más elevada que en España. Cuando vas a pagar más de 125 esperas, como mínimo y contando aperitivos probar al menos 12 elaboraciones. Aquí los menús de 150 suelen rondar las 14/16. El problema. Allí como mucho... te ofrecen 6/8. Al menos los que están en la zona de Algarve que son los que me pillan cerca y he tanteado. No es porque me vaya a quedar con hambre. Este es mi restaurante con estrella 11 (13ava experiencia) y jamás me he ido con hambre. Al reves, cuesta llegar a los petit fours. Es más el hecho de querer probar la mayor cantidad de cosas distintas posibles. El otro problema que tienen es que suelen abrir solo por la noche. Cuando vi que este restaurante (estrella conseguida este año) tenía varios menús y que abría a medio día dije... es hora de probar. Y que alegría haberlo hecho. Lástima que tuve que pedir menú corto (a muy buen precio por cierto 85 cosa que renta porque el largo es 155 y solo son un plato y un postre más) porque el largo solo se sirve por la noche (recordemos que Portugal tiene sus horarios muy adaptados al turista inglés). Empecemos con el espacio. Ubicado en un sitio privilegiado. Las mesas se encuentran cerca de unos grandísimos ventanales por lo que al estar en la parte más alta de la ciudad y frente al río, las vistas son espectaculares. (Recomendable al reservar solicitar mesa junto al ventanal). Dispone de pocas mesas y el espacio es muy acogedor. La presentación de los platos lo justo para que alguna te llamase la atención. Correcta. El menú más que suficiente, platos MUY generosos en cuanto a tamaño. Me sorprendió que estaban bastante más elaborados de lo que creía, bien ejecutados y sorprendieron con 3 cosas que no aparecían en el menú y que fueron los 2 aperitivos y el brioche con las mantequillas y aceite (esto último parece una tontería pero es que en el menú largo aparecía como plato por lo que no me lo esperaba en el mío). Después de los dos aperitivos me pusieron las mejores gambas que he comido jamás. 3 gambas blancas enormes, tersísimas y con un caldo de marisco con un punto thai espectacular. Me comí cada gamba en 3 bocados porque me negaba a que eso se acabase. Sencillamente, perfecto. Afortunadamente, era bastante cantidad. Si me lo hubiera acabado en dos cucharadas me habría dado algo. De principio a fin todo estuvo perfecto. Incluido el postre que fue la guinda del pastel. Hojaldre, miel, queso de cabra, almendra y cacahuete. Deliciosa combinación. Lo que cuestan que los postres estén a la altura del resto de menú! Pues A ver Tavira lo consigue. Y parece que he acabado pero no, lo mejor se deja para el final y no era precisamente un plato. Fue el jefe de sala. Un señor mayor que nos atendió en todo momento ya que sabía español. Vaya persona más maravillosa y más simpática, lo que nos pudimos reír con él mi madre y yo y lo bien que nos hizo sentir. Lo que diga de él se queda corto. Ojo, se notó que se comportó así porque eran pocas mesas y le dimos pie. Se notaba su profesionalidad en todo momento, máxime con las otras dos mesas. Sin duda contribuyó a que la experiencia fuese de 10. Repetiré y seguramente con el largo. Han cambiado ya el menú y le tengo ganas a ese carabinero pero se que sin duda es más rentable comer...