Gloria Bendita — Restaurant in Ávila

I had read the reviews before hand so, I wasn't surprised about the food. I ordered the artichokes and they were excellent, followed by Salmon Hojaldrado which was very mediocre. My husband had the chuleta, which was not impressive, just OK. Although food was not the best, the service was. There is a young, multilingual, waiter/ bar tender/ everything in the restaurant, named Javi who made our experience very much fun. We were not excited about going downstairs to eat so, he arranged a tall table at the bar, he made me the best Tinto de Verano I ever had . He is energetic, attentive and runs up and down stairs taking care of customers with a big smile which is rare in Spain because waiters do not work for tips. At the end, we had a good time regardless ... Thank you Javi, we will return whenever we...

Llegamos a las 14:30 sin reserva y hemos tenido que esperar un poco en la parte superior, lo cual es justo por las circunstancias; nos han ofrecido tomarnos algo en el mientras y el camarero ha sido extremadamente amable. Esperamos una media hora a que se desocupase una mesa en la parte del restaurante que es muy bonita aunque he de decir que nos ubicaron en la parte interior donde se perdía un poco la gracia de tener vista a la muralla, que como otras reseñas ya han indicado, está tapada por un árbol y un poste de luz.

Dos camareros para la sala principal y uno para el bar de arriba. Luego de esperar media hora para sentarnos tardaron otra media hora en tomarnos la orden, llegamos a las 14:30 y nos sirvieron la comida a las 16. Para pagar nos levantamos nosotros y fuimos a la caja, de lo contrario era posible que nos terminásemos quedando otra hora esperando.

La carta es una especie de fusión donde creo que han querido experimentar pero sin terminar de salir muy bien; las peores croquetas que me he comido en mi vida, secas y duras (uno de los sabores es morcilla con plátano que creo que se lo pudiesen haber ahorrado). Mi pareja se termino pidiendo un solomillo que lo servían con patatas, se olvidaron de cambiarle el cubierto y prácticamente no se podía cortar. Yo por mi parte me pedí los tagliatelle bolognese con una salsa sin más, un poco salada para mi gusto y de textura gomosa. También se negaron a servirnos agua del grifo y nos cobraron la botella, lo cual entiendo no se puede hacer.

45€ después entre la comida, una cerveza, un refresco y el agua. Nos hemos gastado menos de eso en un Goiko y hemos quedado más satisfechos. La verdad es que...

Valoración general: excelente. Ubicación perfecta por estar situado en la misma orilla del río Aldaja y frente a la Puerta del mismo nombre de las murallas. Además se puede aparcar sin pago por la zona y, después de disfrutar de la comida, pasar por el puente peatonal, paralelo al vial de vehículos, y acceder al interior de las murallas. El lugar está bien ambientado con varias plantas. Nosotros cenamos en la planta sótano pero es recomendable en la planta de entrada porque tiene terraza al exterior: sobretodo, si no hace excesivo calor. El servicio es muy bueno: conocen la carta, atienden y responden a las consultas directamente y la atención es continuada, sin agobios. El grupo éramos: 4 adultos, 2 jóvenes y dos niños. Para los no adultos 3 bueguers y 1 pizza: todo en su punto, con cantidades suficientes y sin dilación. Para los mayores compartimos: gyozas de cerdo (2 salsas separadas: soja y thai. Combina mejor la segunda), pulpo con patatas revolconas (buena combinación pero algo escaso de pulpo), huevos fritos al foie en cazuela (patata melosa y huevo fresco), combinado de verduras en tempura con carne de humus (trozos pequeños y con fritura en su punto) y tartar de atún con mango y aguacate (creo que con salsa thai ayudaría mejor a potenciar el sabor del atun). Os adjunto fotos de platos y la factura. Creo que los precios son aceptables teniendo en cuenta no solo la comida sino el valor global del servicio recibido.

PD. Perdón por la foto de los huevos trufados. La presentación del restaurante es muy correcta: mis compañeros querían degustarlos...