Restaurante La Viña De Henao Casa De Comidas — Restaurant in Bilbao

This is truly a fantastic restaurant, and our favorite among many great meals in Bilbao. Small, intimate and elegant, the owner is so kind and helpful with both food and wine suggestions. We split several small plates and everything was delicious. The tomato salad, the cod, the meatballs, and of course the award-winning Russian salad-- a very...

Hay que reservar con tiempo porque es un comedor pequeño (aprox 20 comensales) y suele estar completo a días vista. Alex, dueño del local y quien atiende el comedor no puede ser más amable y hospitalario. No conocíamos los vinos y su primera recomendación no fue del todo de nuestro gusto y no dudó en abrir una segunda botella y en esta ocasión acertó de pleno. De la comina, no tengo palabras, estaba todo buenísimo! Claro está probamos la ensaladilla rusa pero sinceramente, sin desmerecerla, es que todos los platos que siguieron cada uno de ellos iba siendo mejor que el anterior. Nos dio la opción de medias raciones así que apostamos también por la menestra, hongos y morcilla. Somos de buen apetito seguimos con lengua y morros. No somos de postre peeerooo una torrija para compartir? Ay ama! En memoria de mi abuela DEP y por respeto a ella no puedo decir que todo estaba mejor que lo que ella nos preparaba; voy a decir que todos los platos estaban igual :-) de ricos que los que...

Más que una reseña, esto es un agradecimiento por el trato increíble que nos dieron Álex (y María desde la cocina) y por el momento que vivimos ayer en La Viña. Desde que entramos, todo fueron atenciones y buenos gestos —como cuando le cambiaron la copa de vino a mi ama porque “se le había calentado en la mesa”. Un detalle tras otro. Disfrutamos cada plato y se notaba el mimo con el que los preparan y presentan. Además de la mítica ensaladilla rusa, nos encantó la morcilla y unas anchoas sublimes. La ensalada de tomates con salmorejo estaba sabrosísima, y luego vinieron las kokotxas de bacalao, el rodaballo y unas albóndigas que nos hicieron vibrar. Y los postres… de otro planeta. El flan de tres quesos fue un woah, y el hojaldre de manzana caliente… otro woah. Puro placer de principio a fin. La relación calidad-precio, insuperable. Este sitio es una joya. Se sale de lo común en todo: atención, dedicación, calidad y precio. Sin duda, para repetir...